Diosa Geek

autor Trybble

Capitulo 13: Amy


Traducción: [email protected]

{Nota: La palabra geek ha sido desde su aparición difícil de traducir al español, no hay una palabra en especial que pueda dar una idea aproximada del significado de `geek’. Geek representa una idea, un estilo de vida que podría resumirse como: “Persona que entiende todo acerca de las computadoras y demás tecnología” }

La noche pasada me sentí mal por Kevin. Dawn se había desmayado en la pista de baile mientras bailaba con él. Afortunadamente, Kevin pudo abrazarla y traerla de nuevo a la mesa. Pero para el momento en que regresó a la mesa con Dawn, Kim también se había desmayado.

A pesar de que yo había bebido bastante, pude ayudar a Kevin a llevar a las otras dos hasta el auto y las aseguramos en el asiento de atrás. Me senté en el asiento de enfrente junto a Kevin, y me recosté sobre el respaldo del asiento de modo que pudiera ver a Dawn y Kim. Ellas dormían tranquilamente. Sacudiendo mi cabeza con una sonrisa, pensé para mí misma, “Ellas necesitan mucha práctica bebiendo cerveza antes de que puedan pasar a tomar tequila”

Kevin encendió el motor y lentamente salió del estacionamiento. El tráfico era ligero, y supe que solo nos tomaría unos 20 minutos llegar a casa de Dawn. Le recordé a Kevin que encontrar el desvió podría ser difícil, así que estaría alerta para poder verlo. “Me parece bien” respondió Kevin, sus ojos se concentraron en el camino por delante.

La mañana siguiente, mi memoria estaba un poco borrosa. Vagamente recordaba haber visto a Kevin en mi habitación la noche anterior. Pero cuando intenté darle un beso el hizo un gesto con la cara y esquivó mis labios, así que descansé mi cabeza sobre la almohada. Cuando rodé sobre la cama, vi que Kim ya estaba sobre la cama a un lado de mí. Entonces sentí a Kevin inclinarse y darme un beso sobre la mejilla.

Cuando finalmente salí de la cama la mañana siguiente, vi que Kim aún yacía en la cama en medio de la cama en un sopor causado por el alcohol. El aire frío me congeló las piernas. Miré hacia abajo y vi que no estaba usando pantalones; sin embargo mi brasier y mi blusa aún estaban en su lugar.

Confundida, me encogí de hombres y caminé hacia el baño para echarme agua en la cara. Mis ojos se veían un poco inyectados de sangre cuando me miré en el espejo, y la cabeza me dolía un poco, pero considerando que me había bebido más de una docena de cervezas la noche anterior, no estaba del todo mal. ¡Podía apostar que Dawn y Kim se verían y sentirían peor de lo que yo me sentía!

Caminé de regreso a la recámara, me saqué la camisa y el brasier, y los tiré en una pila en el suelo. Encontré mis pantalones doblados correctamente a un lado de los de Kim. Revolví mi maleta buscando mi bata preferida. Me la puse y me sujeté el cinturón holgadamente alrededor de mi cintura.

Fui a la cocina y vi que alguien había preparado una olla de café. Me serví un tarro y lo sorbí lentamente, empecé a sentirme humana de nuevo. Vagué por la casa para darle las gracias a quien fuera que hubiera hecho el café.

Kevin estaba trabajando en la PC del estudio de Dawn. Me quedé parada en la puerta, recargué mi codo sobre el marco de la puerta, y dije, “Días.”

Kevin se sobresaltó un poco y luego se dio la vuelta en la silla. “Buenos días para ti misma” respondió con una sonrisa. Kevin nunca se había visto tan sexy y seguro de si mismo.

“No. Sólo días” corregí. “Debo esperar una rato antes de poder decidir si son buenos o no.”

Kevin se levantó de la silla. Caminó hacia mi, y me dio un abrazo y un beso en la mejilla. Inmediatamente me sentí mejor en sus brazos. “Bueno, las cosas empiezan a lucir un poco mejor ahora” sonreí, acurrucándome en su cálido abrazo.

“¿Se han levantado las demás?” preguntó Kevin, liberándome del confort de sus brazos.

“No. Kim todavía estaba dormida cuando me levanté, y tampoco he visto a tía Dawn.”

Kevin miró el pequeño reloj sobre el escritorio de Dawn. “Ya casi es mediodía” dijo. “Creo que deberíamos ir a verlas.” Caminó fuera del estudio en dirección de las habitaciones de Kim y Dawn.

Regresé A la cocina y me serví otra taza de café. Mientras estaba sentado allí, empecé a pensar en el concurso de camisas mojadas de esta noche en Kokomo. Nick y yo habíamos venido a Daytona Beach el año pasado, y yo casi gano el concurso. La única razón por la que perdí fue porque la ganadora había retorcido y atado la camisa de tal modo que mostraba sus claramente falsas tetas. Mi plan para ganar este año incluía a Kevin para que llevara un par de tijeras y así yo podría “hacer” que la camisa que quedara un poco mejor.

Kevin llevó a Kim a la cocina y la sentó a la mesa. Ella se veía en muy mal estado. Cuando le dije “Buenos Días”, ella se encogió como si algo la hubiera lastimado. ¡No lo dudaba después de su noche alocada! Podía apostar a que esta había sido la primera vez que Kim se emborrachaba y se levantaba con una verdadera cruda, Este pensamiento me hizo reír.

Me levanté y le susurré a Kevin, “busca algo de Tylenol.” Él salió de la cocina obedientemente. Serví un vaso de la estantería de la cocina y caminé hacia el comedor en busca de la única medicina que yo sabía que podía ser de ayuda en un momento como ese. Encontré una botella de tequila en el gabinete de licores de la Tía Dawn y serví un poco en el vaso. Un poco de tequila debería ayudar.

Le di el vaso a Kim y le indiqué que lo bebiera. Ella bebió el tequila como si fuera agua, su cara se retorció por el dolor, en ese momento Kevin regresó con un bote de plástico y puso un par de pastillas en la mesa. Tomó el vaso de Kim lo llevó al fregadero y llenó con agua. Kim se tomó las pastillas. “Bébelo todo” le aconsejé. Cuando Kim se terminó el agua, volví a llenar el vaso y se lo di. “un vaso más te ayudará” agregué, la voz de la experiencia le daba un tono de confianza a mi voz.

Sin rechistar, Kim se bebió el segundo vaso de agua, y luego la ayudamos a llegar a las sillas de descanso cerca de la alberca. Cuando regresamos a la cocina, Kevin me preguntó “¿Qué le diste?”

“Tequila” respondí. “Entre el tequila, el Tylenol y el agua, ella se sentirá mejor en una hora más o menos. Busquemos a Dawn. Sospecho que necesita el mismo tratamiento.”

Encontramos a Dawn caminando por el pasillo desde su habitación llevaba una mano en la cabeza como si se la fuera sosteniendo. Kevin la llevó a la cocina mientras yo preparaba otro vaso de tequila. Después de administrar el tratamiento de Tylenol y tequila, la hicimos beber una par de vasos de agua, y entonces la escoltamos a la otra silla de descanso cerca de la alberca. Un poco de aire fresco le ayudaría.

Kim ya estaba dormida, mientras que Dawn parecía que se le uniría en poco tiempo. Llevé a Kevin de nuevo adentro y le dije, “dejémoslas dormir por un tiempo. Estarán bien cuando despierten, o por lo menos estarán mucho mejor de lo que están ahora.”

“¿Qué quieres hacer mientras despiertan?” Preguntó Kevin.

Tomé su mano y le hice un guiño. “Puedo pensar en un par de cosas” sonreí y lo arrastré a mi recamara.

Kim y Dawn se veían mucho mejor cuando las fuimos a ver más tarde. Estaban sentadas y charlando quedamente a un lado de la alberca. Kevin se acercó para hablar con ellas, mientras que yo decidí lanzarme a nadar. La alberca se veía muy tentadora. Entré a la casa para ponerme mi bikini.

Cuando regresé a la alberca, no había nadie, así que corrí los pocos pasos que faltaban para llegar y me zambullí. Después de nadar algunas vueltas, vi a Dawn y Kim saliendo de la casa llevando unos platos con sándwiches y botanas, y sosteniendo vasos de té helado. Salí de la alberca y me uní a ellas en la mesa.

“Amy, gracias por ayudar a Kevin a traernos a casa la noche pasada” dijo Dawn con gratitud. “No había bebido tanto en mucho tiempo.” Comentó ella, su voz se arrastraba. Una gesto de tristeza cubrió su rostro. Me imagine que estaba recordando algo que había sucedido hacía mucho tiempo.

“No hay problema” sonreí. “¿Recuerdan algo de la noche de anoche?”

“Realmente no. La última cosa que recuerdo es el baile con Kevin” respondió Dawn con una mirada perdida en la lejanía. Cogió un sándwich y comió un bocado.

Miré a Kim, quien acababa de sorber un poco de té. “¿cómo te sientes Kim?” inquirí.

“Todo lo que recuerdo es que estaba bebiendo una margarita mientas Kevin y Dawn estaban en la pista de baile” dijo Kim.

“Kevin y yo prácticamente las tuvimos que arrastrar al carro anoche. Afortunadamente Kevin fue lo suficientemente inteligente para no beber alcohol anoche” dije. “Ustedes dos estaban totalmente perdidas. No habría manera de que yo las pudiera manejar por mí misma.” Fustigué con tono maternal.

“Si, pero me pareció que tú bebiste bastante anoche” respondió Kim, un poco a la defensiva.

“Lo hice” admití, “Pero conozco mis límites. Yo no me desmayé como ustedes dos lo hicieron en el bar. ¿Saben lo difícil que fue llevarlas al carro?” Decidí no mencionar que me desmayé de camino a casa.

“Tendremos más cuidado la próxima vez” Prometió Kim.

“Bueno, hay algo más que quiero pedirles a las dos, especialmente antes de que Kevin salga. ¿Está alguna de ustedes dos pensando en entrar al concurso de camisas mojadas de esta noche?”

Ambas chicas asintieron. “Ok, antes de que Kevin venga, quiero explicarles como pienso ganar el concurso. Si Kevin sabe lo que tengo en mente, el no querrá cooperar, y realmente necesitaremos su ayuda para sacar esto adelante.”

Eché un vistazo a la puerta del patio y Kevin no estaba a la vista. “Ok chicas, esta es mi idea.” Procedí a explicarles mi idea a detalle. Kim estaba impactada, mientras que Dawn estaba intrigada.

“Bueno, ¿Qué piensan?” pregunté.

“Creo que funcionará” dijo Dawn, asintiendo. “¡Le entro!”

Kim dudó y dijo, “Bueno...”

“Vamos Kim, será divertido” presionó Dawn.

Kim asintió de mala gana, estando de acuerdo con mi plan. Justo en ese momento, Kevin salió con dos raciones de sandwiches y una lata de Coca para él y una Coca de dieta para mí. “¿qué pasa chicas?” preguntó, y me entregó un plato.

“Oh, nada.” Dije encogiendo los hombres. “Estamos hablando del concurso de esta noche.”

“¿Así que realmente van a participar, eh?” preguntó Kevin.

“Todas nosotras” le aclaré.

“Wow” dijo Kevin, sus ojos se agrandaron solo de imaginarnos a todas en camisas mojadas.

El concurso empezaba a las 8, así que decidimos comer algo antes de salir de la casa. Dawn cocinó algo de fettuccini Alfredo que estaba delicioso. Kim y yo preparamos ensaladas y ajo tostado para acompañar.

Le pregunté a los otros, “¿saben como funciona este concurso?” Kim y Kevin negaron con la cabeza, mientras que Dawn mantenía su cara inmutable.

“Ok, asi está el asunto. Cada chica sube con un ayudante al escenario vistiendo una camisa seca. Una por vez, cada chica pasa al frente del escenario y al ayudante le dan una cubeta de agua. Entonces, el ayudante de la concursante la remoja con el agua y la chica actúa para la audiencia. ”

“Después de cada chica tiene su turno, todas ellas suben de nuevo al escenario y la audiencia le aplaude a cada concursante. La chica con el aplauso más ruidoso gana.”

Recordando el curso del año anterior con Nick, continué con mi explicación detallada. “Típicamente ellos divides a las chicas en grupos de doce más o menos, y la ganadora de cada grupo va a la ronda final. Es muy importante que nos separemos para que no compitamos contra nosotras mismas.”

“Finalmente, es muy importante usar el agua más fría disponible. Kevin, si te lo permiten – encuentra algunos cubos de hielo y agrégalos al agua.”

“¿Por qué quieres hacer eso?” preguntó Kim, alzando las cejas.

“¡Porque esto hará que tus pezones se pongan erectos, boba! ” respondí.

“Si ese es el caso” argumento Kim, “creo que deberíamos usar bikini debajo de la camisa.”

Sacudí mi cabeza ante su completa inocencia. “No, si lo que quieres es ganar” corregí. “Estoy segura de que la audiencia quiere ver algo más que un simple traje de baño debajo. Ellos quieren ver tus pezones erectos y tus pechos moviéndose.” Kim se sonrojó.

Dawn pegó un salto y dijo, “probablemente Amy tiene razón. Es parte del juego. Si quieres ganar, tienes que jugar el juego de la manera que en debe ser jugado. De cualquier manera, no estoy segura de estar tan ansiosa por ganarlo...” Un tono de incertidumbre se arrastró en su voz. “¿se imaginan lo que pasaría si alguien me tomara una foto vestida de esa manera? No sería algo bueno.”

“No sé” dijo Kevin, con una gran sonrisa. “Me parece que sería algo muy bueno desde mi punto de vista”

Una servilleta arrugada voló sobre la mesa y se impactó en el rostro de Kevin. “Tú sabes lo que quiero decir Kevin” dijo Dawn riendo. “¿cómo se vería que la presidenta de una gran compañía de tecnología saliera medio desnuda en una foto en los diarios? ¿Qué pensarían nuestros consumidores?”

“Si realmente estas preocupada por tus consumidores, no deberías participar en primer lugar” apunté.

“Por otra parte, tienes un excelente cuerpo para una persona vieja” bromeo. Una servilleta arrugada más la golpeo en la cara.

“Está bien” gruñó Dawn, “Ya entendí el punto. Las acompañaré en esto, pero insisto en vestir mi bikini.”

“Está bien” concedí. “Las reglas dicen que debemos mantener nuestras cubiertas nuestras partes privadas, así que de cualquier manera debemos usar bikini.” Dije. “Eso creo.” Pensé para mí misma.

Kevin me lanzó una servilleta arrugada, y esta rebotó en mi rostro. Decidí escalar la batalla, así que metí mis dedos en la salsa Alfredo y se la lancé a Kevin. Se veía realmente gracioso con gotas de salsa Alfredo en toda la cara.

“Dos pueden jugar ese juego” dijo Kevin, recogiendo en tazón de salsa Alfredo.

“No te atrevas” lo amenacé, alejándome de él.

Kevin solo sonrió y se acercó. Sostuvo el tazón en lo alto y pretendió verterlo sobre mi cabeza cuando lo alcancé y le hice cosquillas en las axilas. Rió y brincó al mismo tiempo, cubriéndonos a los dos con salsa Alfredo. Nunca me había dado cuenta de que Kevin era tan cosquilloso.

Kim y Dawn reían ruidosamente. Cuando finalmente se calmaron, Dawn fue a la cocina y regresó con un rollo de toallas de papel. Kim sostuvo una bolsa de plástico mientras nosotros nos limpiábamos la mayor parte de la salsa Alfredo y tirábamos las toallas en la bolsa.

Kim le echó un vistazo a la suciedad que todavía quedaba en nuestros cabellos, y dijo, “Será mejor que se vayan a limpiar – nos tenemos que ir a Kokomo en media hora.”

Kevin rió y dijo, “¿En tu baño o en el mío?” entonces me levantó en brazos y me llevó hasta su baño.

Me gustaba la regadera grande de su habitación. Había espacio para al menos dos personas más dentro de ella. Nos desvestimos y tiramos la ropa en un rincón del baño. Kim nos guió dentro de la regadera y la abrió. “Hey, está muy fría” protesté, pero Kim solo cerró la puerta y rió mientras nos mojábamos con el rocío de la regadera.

La regadera tenía dos boquillas que nos rociaban desde diferentes direcciones. Ajusté la temperatura de modo que el agua no estuviera tan fría, y traté de enjuagar la mayor parte de la salsa Alfredo de mi cabello y rostro bajo una de esas boquillas. Kevin hacía lo mismo debajo de la otra.

Dado que la puerta de la regadera era transparente, Kim podía vernos perfectamente. Su voz se escuchó como la de un sargento al momento que intentó dirigir nuestras acciones. “Kevin, empieza a enjabonar el cabello de Amy. Necesita verse bello para el concurso.” Kim arrojó un bote de shampoo sobre la puerta de la bañera.

Afortunadamente, Kevin la cachó antes de que lo golpeara en el estómago. Escuché una risa desde fuera de la regadera y sospeché que Kim había apuntado un poco más abajo.

Kevin puso un poco de shampoo en sus manos las froto. Me encantó sentir las manos fuertes de Kevin mientras enjabonaba mi cabello y masajeaba mi cabellera. Después de un minuto o más, el guió mi cabeza dentro del chorro de agua para enjuagar el shampoo.

Le regresé el favor enjabonando y enjuagando su cabello. Llamé a Kim, “Hey, pasa un acondicionador.” Kim lanzó otra botella sobre la puerta. Desafortunadamente la puerta estaba empezando a empañarse, de modo que Kim no pudo vernos claramente – o tal ves si. La botella rebotó en el pene de Kevin y cayó al piso con sonido apagado.

“!Owwwwwww¡” gritó Kevin al tiempo que ponía su mano sobre su pene.

Kim dijo “¿Estás bien Kevin?”

“¿Tú qué crees?” dijo él con una mueca.

“Deja que la doctora Amy le eche un vistazo” sugirió. Me arrodillé en el piso y pretendí examinar cuidadosamente el pene de Kevin. Unos cuantos frotes fue todo lo que se necesitó para convencerme de que Kevin no estaba seriamente herido.

“Tal vez debería besarlo para hacerlo sentir mejor” dije mientras empezaba a besar la corona de su miembro. No tomó mucho tiempo para que Kevin se pusiera rígido. Engullí su virilidad hasta que mi nariz tocó su estómago, y luego lo saqué hasta que solo la punta de su pene quedó en mi boca.

Lamí la punta como si fuera un cono de helado, mientras lo frotaba con mis manos. No pasó mucho tiempo para que sintiera como se tensaba preparándose para disparar su semen. Saqué su pene de mi boca y continué frotándolo con mis manos. Finalmente, el disparó su leche sobre mi cabello.

Para entonces, la puerta de la regadera se había empañado tanto que Kevin era apenas un fantasma borroso.

La escuché gritar, “¿Qué está pasando allí? ¡Tenemos que apresurarnos!”

“Oh, solo estoy usando un acondicionador especial en mi cabello” respondí con una sonrisa traviesa.

Llegamos apenas a tiempo para registrarnos en Kokomo. Resultó que no importaba a que hora nos presentáramos. Kim, Dawn y yo pudimos separarnos de modo que no estuviéramos en el escenario al mismo tiempo.

Todas las concursantes fueron alejadas del piso de baile de modo que no pudimos ver las rutinas de las otras chicas. Una señora de edad vistiendo una camisa de Kokomo dividió a las concursantes en grupos de 12 más o menos, y le dio a cada una un número único.

Dawn fue colocada en el primer grupo de chicas. Incluso aunque Dawn se veía realmente sexy, dudé que pudiera pasar la primera ronda. La audiencia estaba plagada de chicos jóvenes, quienes probablemente deseaban ver chicas jóvenes y sexys con sus pezones sobresaliendo de sus camisas. “Dawn simplemente es demasiado vieja para esta gente. Pero si fuera 20 años más joven.” Pensé para mí misma.

Miré a Kevin irse con el grupo de Dawn, y pude escuchar al gritería de la gente que miraba el concurso. Entonces pude escuchar los aplausos para cada chica. Una chica en particular parecía ser la clara ganadora, y desee que lo mismo me pasara a mí cuando saliera al escenario.

En caso de empate, las otras chicas serian descartadas y el maestro de ceremonia haría una ronda con Las chicas restantes. Si la audiencia no pudiera decidir cual chica enviar a la ronda final, el MC escogería una y pretendería que el aplauso fue más fuerte para ella. Esto significa que el MC puede meter a alguna de sus favoritas a la final, lo cual significaba que cualquiera de nosotras podía ser eliminada fácilmente.

La señora de edad que estaba dirigiendo el concurso vino con el siguiente grupo de chicas y las llevó al escenario. Vi a Kevin regresar y decirle algo a Kim. Luego se acercó a mí y dijo, “Dawn entró a la final. El grupo de Kim subirá después de que este termine, así que regresaré para estar contigo dentro de un rato.”

Kim se alejó caminando con Kevin cuando la señora a cargo vino por su grupo. Nosotras decidimos esperar y arreglar nuestras camisas hasta la ronda final. No tenia caso darle pistas a las demás chicas antes de que el verdadero juego comenzara realmente. Una vez más, una chica fue la clara ganadora, Esperaba que hubiera sido Kim.

Kevin vino a mí, levantó dos dedos y dijo “dos de dos. ¡chicas, esta noche realmente están calientes!” le contesté con una gran sonrisa. El esperó conmigo calladamente hasta que mi grupo fue llamado, luego subió conmigo al escenario. Dado que me retrasé un poco, me las arreglé para ser la última chica en subir al escenario. Esto me dio un poco de ventaja dado que los chicos siempre recuerdan mejor a la última chica que a la primera.

Le di a Kevin mi cartera, él me miró con extrañeza, como si se preguntara porque traía yo mi cartera. Dawn y Kim le habían dado a Kevin sus identificaciones y algo de dinero en la casa por si acaso decidíamos quedarnos un rato después del concurso. “Solo guárdala. Ponla en tu bolsillo.” Dije al tiempo que Kevin se metía la cartera en su bolsillo.

Cada asistente recibió una gran cubeta con agua para mojar las camisas. Vi que Kevin se las había arreglado para meter algunos cubos de hielo en el agua, en lugar de lanzar el agua del cubo en mí, Kevin cuidadosamente vertió el agua en el frente de mi camisa, en el momento en que el agua fría me golpeó, mis pezones se contrajeron y se pusieron rígidos viéndose claramente a través de mi camisa.

Bailé lenta y sensualmente de modo que mis pechos se movieran con gracia debajo de mi camisa. Me incliné para darle a la audiencia la mejor vista posible de mis tetas. La mayoría de las otras chicas saltaban por el escenario alocadamente, lo que realmente no les permitía ver a los chicos lo que ellos querían.

Estaba nerviosa cuando el MC se acercó a la línea de las chicas. Puso su mano sobre mi cabeza para solicitar el aplauso, la audiencia rugió mucho más ruidosamente que para cualquiera de las otras chicas. ¡Había entrado a la final!

La señora que estaba organizando a las chicas vino a mí con una toalla y una camisa seca y dijo, “hola, mi nombre es Fran. Felicidades por ganar tu ronda.” Luego Fran nos guió a Kevin y a mí al área de espera con el resto de las ganadoras. Encontré a Kim y Dawn allí y le di a cada una un abrazo de felicitación.

Le pedí a Kevin mi cartera y saqué una pequeña navaja que yo había escondido dentro. El me miró desconcertado al tiempo que le detallaba nuestro plan. A él no le pareció bien, pero con tres contra uno, rápido claudicó.

Dawn había decidido hacer varios tajos en toda su camisa, lo cual permitiría a la gente ver la piel que estaba debajo, sin darles una vista completa. Kim por otra parte había decidido cortar agujeros en varios lugares de su camisa. Ella fue cuidadosa de no hacer huecos en algún lugar que pusiera al descubierto sus pezones, pero cortó un agujero grande para dejar expuesto su hermoso ombligo.

Cuando las chicas me preguntaron que pensaba hacer, solo sonreí y dije, “ya verán” Kevin nos ayudó a preparar nuestras camisas, y luego nos escondimos de modo que las otras chicas no vieran lo que sucedía.

Cuando salimos a la pista de baile, Dawn y Kim estaban cerca del frente de la fila, mientras que yo estaba cerca de la mitad. Dawn jugaba con su camisa jalándola a un lado y a otro. Eso hacía que la gente pudiera ver varias partes de su cuerpo a través de las aberturas que Kevin había cortado.

Kim, por otra parte, simplemente saltaba. Dado que ella saltaba, sus pechos se movían para todas partes y exponía varias partes de su cuerpo por los huecos que Kevin había cortado en su camisa. Si mirabas el tiempo suficiente podías ver por momentos sus pezones al tiempo que ella saltaba.

De todos modos, estaba segura de que yo había causado la mayor impresión en la audiencia. Después de que Kevin me vertió más agua en la camisa, simplemente usé algunos movimientos de las clases de ballet que tomé cuando niña. Giré, hice piruetas y baile de puntillas en incluso hice algunos giros voladores. Hice una pausa, tomé mi camisa y la jalé.

Kevin había cortado un círculo alrededor de mi camisa, justo debajo de mis pezones, dejando solo unas hebras manteniendo la camisa entera. Cuando jalé mi camisa, la mitad inferior cayó a mis pies. Fácilmente podías ver a curva inferior de mis pechos debajo de la tela rasgada, y si mirabas cuidadosamente, podías ver parte de las aureolas.

Entonces hice mi movimiento más dramático. Me paré sobre la punta de un solo pie y levanté la otra pierna completamente recta haciendo un arabesco. Me dolió realmente por la falta de práctica, y estoy cierta que mi profesora de ballet se hubiera decepcionado porque no fue ten recta como debería ser, pero el movimiento seguramente impresionó a la audiencia, especialmente porque tuvieron una clara vista de pelo rojo de mi coño a través de la pequeña tanga que usaba.

No había duda de que yo era la ganadora. Cuando el MC puso su mano sobre mi cabeza, la audiencia enloqueció. Entonces el MC dijo que repasaría la línea dos veces más para seleccionar al segundo y tercer lugar. Hubiera sido grandioso que Kim y Dawn ganaran el segundo y tercer lugar, pero una chica cuyos pechos hacían ver pequeños los de Kim se llevó el segundo lugar, Kim se quedó con el tercer puesto.

Por ganar el concurso, recibí un bono de ahorros por $1,000 dólares, un trofeo que proclamaba que yo tenía los mejores senos de la playa, más una caja de regalos. Kim ganó un bono de ahorros por $250 dólares y un trofeo más pequeño. Dentro de mi caja de regalos había algunos certificados de regalos de Kokomo, una gorra de béisbol de Kokomo, y tres camisas nuevas de Kokomo. Sonreí por mi victoria.

Después del concurso, encontramos un cubículo cerca de la parte trasera del club y ordenamos una ronda de bebidas. Dawn le prometió a Kevin que no se emborracharía dos noches seguidas, así que ordenó una Diet Coke. Kim estaba tan emocionada con su victoria, que se olvidó de lo mal que se sentía esta mañana y ordenó una margarita de fresa. Kevin ordenó su Coca de siempre, mientras que yo tomé una cerveza.

En 20 minutos, nos tuvimos que salir que del cubículo y nos fuimos a una mesa más grande debido a la gran cantidad de gente que quería hablar con nosotros. No volvimos a pagar por las bebidas en toda la noche.

Cuando decidí ir al baño, me llevé a Kim y Dawn conmigo, y nos cambiamos las camisas por las que venían en mi caja de regalos. No me molestaba mostrar algo de piel durante el concurso, pero estar sentada en un bar con una camisa mojada cortada justo debajo de mis pezones no era placentero.

Kim empezó a estar un poco borracha por todas las bebidas de cortesía. Ella dejó que algunos tipos nos compraran bebidas. Tomamos “Sexo en la Playa” y un “Atornillada lenta y confortable contra la pared”. Luego alguien nos trajo unos Té helados Long Island.

El Té Helado Long Island es engañoso. Usualmente se sirven un vaso largo de para té helado, y saben tanto a té que no notas el sabor a alcohol al principio. Para cuando terminas con el primero, ya estás medio borracha. Una noche de viernes hace tiempo, me las arreglé para tomarme 5 de esos. Estaba tan borracha que no recuerdo una sola cosa hasta que escuché la alarma de mi reloj sonar el lunes por la mañana.

Kevin levantó el vaso que estaba delante de mí y bebió un sorbo, Hizo una mueca extraña, pero luego se bebió el resto. Creo que él pensó que era té helado normal. Cuando me dieron otro, se lo pasé a Kevin. Se lo bebió rápidamente. Kim y yo empezamos a atormentarlo levantándonos las camisas y mostrándole las tetas un par de veces. Él estaba tan borracho que empezó a intentar agarrarnos las tetas pero solo pudo asir el aire. Tuve que hacer su mano a un lado, sin embargo en silencio le dije “más tarde”.

El encargado del bar sonó la campana, haciéndonos deber que esa era la última llamada. Eran cerca de las 2 de la mañana, así que decidimos irnos. Kevin estaba definitivamente borracho y necesitaba ayuda para subir al carro. Kim estaba peor de lo que estaba la noche anterior. Yo me alegré de no tener su cabeza mañana por la mañana. Beber es un vicio para el que debes tener práctica, y yo lo había practicado muchas veces en el pasado.

Dawn guió a Kevin al carro, mientras yo medio ayude a Kim. Los colocamos en el asiento trasero, y ellos quedaron dormidos casi inmediatamente. Tengo que admitir que yo estaba también un poco bebida dado que me pareció que unos luces nos seguían en el camino de entrada a casa de Dawn. Intenté decirle algo de esto a Dawn, pero para el momento en que las palabras se formaron en mi nublaba mente, las luces se habían ido.

Dawn y yo llevamos a Kevin y Dawn adentro de la casa de uno en uno y los metimos a la cama. Luego ella hizo café para nosotras dos, y nos sentamos fuera, cerca de la alberca, platicando hasta casi las 4 a.m.

Dawn era una mujer sorprendente. Ella me explicó cómo el conductor del trailer acabó con su familia y cómo ella se escondió del mundo. Todos los días ella miraba fotos de su familia y lloraba sobre ellas. Visitaba las tumbas los domingos y les colocaba flores frescas. Ella permaneció en esa rutina por varios meses.

Luego me explicó que cuando su hermana y su cuñado murieron tan cercanas las fechas dejando a Kim sola, ella encontró el coraje para romper su rutina y volar a Maryland para ayudar a Kim. Por la expresión en los ojos de Dawn, pude descubrir que Kim realmente significaba mucho para ella. Era como si fuera mucho más que una sobrina para ella. Creo que dado que las dos estaban solas ahora, Dawn debía sentir como si Kim fura su hija.

Cuando Dawn guardó silencio, le conté la historia de cómo Kevin y yo nos conocimos. Luego le expliqué cómo fue que Kim se enamoró de Kevin. Pude ver lágrimas en sus ojos mientras le contaba la historia. Creo que ella realmente entendió cuanto significaba Kevin para Kim.

Ella me preguntó con quien estaba saliendo, así que le conté lo que Nick me había hecho, y le expliqué que habíamos venido a Daytona Beach por consejo del detective que investigaba el caso. Finalmente, le confesé como yo misma estaba enamorándome de Kevin.

También confesé que yo amaba a Kim, y me sentía confundida acerca de todo esto. No quería lastimar a nadie.

“Hay ocasiones en las que deseo que Nick me hubiera matado en vez de mandarme al hospital” resoplé, mi labio inferior temblaba por la frustración. “eso hubiera hecho las cosas más fáciles para todos.” Dawn se sentó a mi lado y me tomó en sus brazos. Empecé a llorar, mis hombros temblaban con la intensidad de las emociones que tenía encerradas.

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