Diosa Geek

autor Trybble

Capitulo 11: Kim


Traducción: [email protected]

{Nota: La palabra geek ha sido desde su aparición difícil de traducir al español, no hay una palabra en especial que pueda dar una idea aproximada del significado de `geek’. Geek representa una idea, un estilo de vida que podría resumirse como: “Persona que entiende todo acerca de las computadoras y demás tecnología” }

Siempre me pregunté que se sentiría ser un estudiante universitario en temporada de Spring Break en Florida. Nunca hubiera tenido tiempo para ir, o más realistamente nunca hubiera tenido las agallas para ir. Sin embargo, Me encontré en el carro de Kevin con Kevin y Amy viajando al sur por la I-95.

Incuso antes de que el detective le sugiriera a Amy que saliera de la ciudad, Kevin y yo ya habíamos hablado acerca de esconderla en algún lugar donde Nick no pudiera encontrarla. Ambos pensábamos que sólo era cuestión de tiempo para que él volviera intentar lastimarla. Sin embargo, nunca pensamos en abandonar el estado. Cuando el detective mencionó eso de ir a un lugar cálido, se me ocurrió que el lugar más seguro en el que podía estar Amy era la casa de mi tía en Florida. Dado que Amy dejó muy claro que no estaba lista para discutir lo que le había pasado, tuve que sr yo la que pusiera los planes en marcha sin hablar antes con ella.

Mi Tía Dawn vive justo a las afueras de Daytona Beach, así que la llamé y le pregunté si podía quedarme por una semana con un par de amigos míos. Tía Dawn estuvo realmente emocionada al escucharme, y esperaba volver a verme de nuevo. El hecho de que llevara unos amigos conmigo pareció no molestarle. Desde luego por alguna razón, se me olvidó decirle a Tía Dawn que uno de mis amigos era hombre.

Después de la clase de Astronomía de Kevin el Jueves en la Tarde, él y yo hicimos un viaje rápido al norte para ver a sus papás. Kevin le pidió a Walt que vigilara a Amy mientras nosotros no estuviéramos. Cuando Walt llegó al apartamento, Jessica estaba con él. Le dijimos que si alguien intentaba entrar, llamara a la policía inmediatamente. Luego encerramos a Amy, Walt y Jessica dentro del apartamento y les dijimos que no contestaran el teléfono o la puerta. Les dijimos que los llamaríamos al celular de Amy para indicarles que ya estábamos de regreso.

Aunque Kevin le había dicho a sus padres que iba solo de visita, no le dijo que yo iba con él. Ellos no se habían dado cuenta de que Kevin ya sabía lo que era una chica, mucho menos que estuviera saliendo con una. Después de que pasó el shock inicial, sus padres fueron muy amables conmigo. Mientras Kevin le informaba a su padre de sus últimos logros académicos en la sala de estar, yo hablé con su madre mientras ella preparaba la cena. Ella era una linda persona, al igual que Kevin, y realmente disfruté conocerla.

La mama de Kevin sirvió una cena muy buena con chuletas de cerdo, puré de papas y salsa, chícharos y biscochos. Incluso hizo una tarta de manzana como postre.

Fue durante el postre cuando Kevin dejó caer la bomba. Dijo, “Quiero ir a Florida al Spring Break con algunos amigos. Tenemos un lugar donde quedarnos y estaremos de regreso antes de que las clases se reanuden.”

Su papá miró a su madre, y juntos me miraron a mí. Su mamá preguntó “¿Tú también vas, Kim?”

Nerviosamente, asentí con la cabeza, insegura de decir algo.

La Sra. Sparks volteó a ver a su hijo y dijo, “¿Les importaría a ti y a Kim dejarnos solos por unos momentos? Necesito hablar con tu padre.”

Kevin se levantó y recogió sus platos sucios. Hice lo mismo. Juntos, los llevamos a la cocina y los pusimos en el mostrador.

Kevin me rodeo con sus brazos y me besó. Sentí una lagrima rodar por mi mejilla. Estaba temerosa de lo que sus padres podrían decir. Con su mano él limpió la lagrima. “No te preocupes. Todo saldrá bien” me confortó, dándome otro apretado abrazo.

Permanecimos parados abrazándonos por unos momentos, y luego escuché la voz de su padre llamándonos. Regresamos al comedor y nos sentamos con expectación.

El Sr. Sparks empezó a decir algo, pero su esposa lo interrumpió antes de que pudiera decir una sola palabra. “Sabemos que hay un montón de cosas malas que le suceden a los estudiantes cuando salen de Spring Break. No queremos que ustedes salgan lastimados. Solo miren lo que le pasó a esa pobre chica de su escuela que fue violada en el centro comercial. No quiero que nada de eso les pases a ninguno de ustedes dos.”

En el momento en que la Sra. Sparks mencionó la violación de Amy, tuve un mal presentimiento. Estaba segura de que le diría a Kevin que no podía ir a Florida.

“Sabemos que ahora tienes 18 años y que puedes hacer esto sin nuestro permiso, pero confiamos en que tienes el suficiente sentido común para evitar todo lo malo. Así que si realmente quieres ir, Kevin, tienes nuestro permiso” finalizó su madre.

El Sr. Sparks añadió “Al principio pensé que no te deberíamos dejar ir, pero tu madre me convenció de lo contrario. Evidentemente Kim la ha impresionado. Eso no es fácil y tú lo sabes. Creo que tu madre confía en Kim tanto como confía en ti. ”

Kevin y yo suspiramos aliviados. Literalmente podía ver la felicidad en sus ojos. Me acerqué y le di un abrazo a los padres de Kevin. El Sr. Sparks puso su brazo alrededor del hombro de Keviny juntos abandonaron el comedor y entraron en el estudio. Me sonreí, pensando si Kevin iba a recibir la veja lección de los pájaros y las abejas. Sospechaba que sus padres no habían tocado el tema cuando Kevin era más joven. Después de todo, los geeks no tiene sexo, ¿o sí? Volví a reír.

La Sra. Sparks comenzó a recoger el resto de platos sucios. Decidí ayudarla. Trabajando las dos juntas solo tomó un par de minutos limpiar todo y meter los platos al lava bajillas. “Nosotros no preocupamos mucho por Kevin” dijo la Sra. Sparks limpiando sus manos húmedas en una trapo de cocina. “Solo deseamos lo mejor para él. Tengo esta sensación de que tu serás muy buena para nuestro chico.” Sonreí por la forma un poco anticuada en que lo dijo.

Cuando el lava bajillas estuvo cargado, ella agregó un poco de jabón y lo echó a andar. Luego se dirigió a un escritorio en una esquina de la cocina y se sentó. Sacó una chequera, escribió un cheque, lo dobló a la mitad y lo puso en mi mano. “Aquí tienes algo de dinero para el viaje. No le digan al padre de Kevin” me hizo un guiño.

“Gracias” dije, y le di un gran abrazo mientras luchaba por contener un torrente de lagrimas de felicidad. Sus me estaba aceptando y de qué manera, y eso me hacía sentir muy bien.

“Cuida de Kevin en mi lugar, por favor” dijo su madre apretando mi mano y una lágrima se formó en su ojo.

“Lo haré” prometí. Miré a la Sra. Sparks a los ojos. Sentí como si me estuviera dando un regalo muy especial. Luego me di cuenta de que así era. Ella me estaba dando su más preciada posesión, y confiaba en que yo cuidaría de él. La abracé de nuevo, y ambas lloramos.

De camino a casa, Kevin dijo, “Cuando papá me llevó al estudio, me dijo que el pensaba que tu eras una dama especial. Entonces me dio un cheque por $1000 dólares y dijo no le dogas a tu madre.”

Me reí y saqué el cheque que su madre me dio de mi bolsa. “Tú mamá también me dio un cheque.” Lo desdoblé y dije “¡Otros $1000. Creo que no tendremos que preocuparnos por el dinero para la gasolina!” Ambos reímos.

Partimos en el carro de Kevin después de la clase de Redes el miércoles por la tarde. Kevin se ofreció para conducir durante la noche, y yo estuve de acuerdo en conducir la parte final del viaje dado que sabía como encontrar la casa de mi tía. Esos significaba que Amy conduciría primero. Dado que Kevin conduciría toda la noche, decidió tomar una siesta en el asiento trasero. De ese modo estaría más despierto mientras condujera.

Decidí tomar una siesta también. Así que seguí a Kevin y subí con él al asiento trasero del auto. Él se sentó y estiró sus piernas. Yo me acomodé y descansé mi cabeza en su regazo. Él distraídamente comenzó a deslizar sus dedos por mi cabello.

Después de un rato, Kevin dejó de mover sus manos. Lo miré y vi que tenía los ojos cerrados. Escuché su respiración y tuve la certeza de que se había dormido. Decidí que no había ninguna diversión en eso. Así que esperé un rato, entonces cuidadosamente desabroché sus pantalones, tratando de no despertarlo.

Kevin se agitó un poco, así que me detuve. Cuando me pareció que se había vuelto a dormir, tuve mucho más cuidado y bajé su cremallera. Kevin se despertó y me miró, pero pareció no darse cuenta de lo que estaba sucediendo. Puse mi cabeza en su regazo y pretendí estar durmiendo.

Esperé hasta que el constante ronronear del motor incitara a Kevin a dormir de nuevo. Tan pronto como pensé que estaba dormido, metí la mano en sus pantalones, saqué su pene y lo puse en mi boca. Kevin estaba totalmente flácido cuando empecé a mamarlo, fue una sensación extraña sentir su pene crecer dentro de mi boca. Cuando se empezó a poner rígido, empecé a mover mi cabeza arriba y abajo recorriendo su pene.

EL se despertó un poco y se quedó mirándome. Apuesto a que pensó que estábamos en casa en la cama dado que él solo puso su mano sobre mi cabeza mientras yo le daba placer. En poco tiempo, pude sentir el esperma empezar a fluir por su pene. Moví mi cabeza más y más rápido, y pronto mi boca estuvo llena con el semen de Kevin.

Escuché un risa desde el asiento delantero. Fue entonces cuando Kevin despertó y se dio cuenta de lo que estaba pasando. Miró a todos lados un tanto frenético, tratando de ver si alguien había visto lo que estaba pasando.

Me senté y vi a Amy mirándonos por encima del hombro. Ella me vio a través del espejo retrovisor y me hizo un guiño.

Entonces escuché una sirena de policía, y pude ver luces rojas y azules reflejándose dentro del auto. Sentí el carro aminorar su velocidad y detenerse sobre el acotamiento de la autopista. Amy bajó su ventanilla. La escuché preguntar “¿Hay algún problema oficial?”

Kevin y yo decidimos pretender que estábamos dormidos con mi cabeza sobre el regazo de Kevin. Con suerte, no tendríamos que explicar por qué el pene de Kevin colgaba fuera de sus pantalones.

EL oficial miró dentro del carro y le preguntó a Amy, “¿Se da cuenta de que usted iba a 150 Km/h en una zona de 100 Km/h?”

Amy le obsequió una mirada inocente, probablemente moviendo también las pestañas, y respondió “¿Está seguro, Señor?”

“Si” respondió el oficial. “¿Me permite su licencia de conducir?”

Para poder entender lo que sucedió después, ustedes deben entender que Amy solo estaba siendo Amy. Ella se palmeó en diferentes lugares, luego se desabotonó la blusa hasta abajo. Amy no usaba sostén, y estoy segura que los ojos del oficial se agrandaron ante la imagen de sus senos perfectos.

Cuando Amy comenzó a bajar la cremallera de sus pantalones, el oficial debió asustarse. ¡Amy había olvidado sus bragas de nuevo! De su entrepierna desnuda, ella sacó su licencia de conducir y se la entregó al oficial. Pude oler los jugos de Amy aún estando en el asiento trasero.

El oficial tomó la licencia de Amy y la estudió durante unos segundos. Se la entregó de nuevo y le dijo “Mire, estoy a punto de terminar mi turno, así que en lugar de perder mi tiempo escribiéndole un montón de infracciones, la voy a dejar ir con una advertencia. Vaya con calma en la autopista y mantenga su velocidad baja. Los oficiales en el próximo estado tal vez no sean tan amables con usted.”

Con eso, el oficial caminó de nuevo a su patrulla y se alejó como un alma que lleva el diablo. Al mismo tiempo, Amy se acomodó de nuevo sus ropas.

Kevin se abrochó los pantalones a la carrera, salió del auto y caminó hacia la puerta de Amy. “Amy, tal vez es mejor que yo conduzca” sugirió.

Amy sonrió y dijo “¿Cómo crees que he mantenido un record limpio en todos estos años conduciendo? Lo estoy haciendo bien” respondió, haciendo a un lado sus preocupaciones. De todos modos Amy finalmente salió del carro y cambió de lugar con Kevin.

Kevin arrancó a un velocidad mucho más baja que la de Amy, mientras, Amy y yo nos acomodamos en el asiento trasero y nos dormimos.

Desperté con la luz del sol en el rostro. Amy y yo éramos un amasijo de brazos y piernas todas revueltas. Miré a Kevin y me di cuenta de que comenzaba a verse un poco cansado. Grité “¡Buenos días Kevin!” y el casi salta fuera de su asiento.

Amy bostezó y comenzó a despertar también. “¿Alguien tiene hambre?” Pregunté, y como confirmación recibí un cabeceo por parte de Kevin y una sonrisa de parte de Amy. Le dije a Kevin que se dirigiera al siguiente lugar en que se vendiera comida.

El se desvió de la autopista poco después y entramos en un restaurante de McDonlad’s. Los tres bajamos del carro y entramos al restaurante. Yo ordené el desayuno de huevos revueltos y panqués, Kevin ordenó un par de McMuffins de Huevo. Amy ordenó un biscocho con huevo y salsa y un café grande.

Kevin devoró su desayuno y decidió cerrar los ojos por un rato. Amy y yo terminamos nuestros desayunos, y luego arrastré a Amy al baño de mujeres para prepararle un pequeña sorpresa a Kevin. Amy y yo éramos casi de la misma talla y podíamos intercambiarnos la ropa. Solo por diversión, quería que Kevin pensara que yo era Amy, y que Amy era yo.

Juntas, Amy y yo salimos del baño y caminamos de regreso a nuestra mesa. Kevin ya estaba dormido en su silla. Juntamos nuestros desperdicios, y los depositamos en un bote para basura cercano. Desperté a Kevin solo lo suficiente para que Amy y yo lo pudiéramos llevar hasta el carro.

Kevin se arrastró sobre el asiento trasero y se recostó boca abajo. Amy fue al otro lado del auto y colocó la cabeza de Kevin en su regazo. Yo entré a la parte delantera y empecé a conducir. Pronto, Kevin estuvo completamente dormido de nuevo, y Amy empezó a acariciarle la cabeza. Él durmió de esa manera una hora o más.

Con su cabeza enterrada en el regazo de Amy, todo lo que él podía ver eran mis jeans y la camisa. Cuando despertó, levantó su mano para juguetear con lo que él pensaba que eran mis senos. Abrió un ojo todavía adormilado. Imaginen sus sorpresa cuando se dio cuenta de que no era mi pecho, ¡Creo que el ojo de Kevin hizo una abolladura en el toldo de tanto que se le saltó!

Amy río y me hizo reír a mi también. Gracias a Dios había una parada de descanso cercana en la que pude detener el auto. Había empezado a reírme tan fuerte, que estaba segura que habría chocado el carro sino me detenía.

Cuando nos detuvimos. Kevin se veía realmente avergonzado. Esa tonalidad roja ya le estaba empezando a quedar. Lo besé y le expliqué que yo había planeado todo. “No te preocupes” le dije. “¿Por qué no duermes un poco más?” sugerí. “Todavía tenemos un largo viaje por delante.” Kevin se volvió a acostar sobre el regazo de Amy, lo vi más feliz de lo que lo hubiera visto nunca. “Hmmmmmm...” Pensé.

Hicimos otra parada para comer a media tarde en otro local de comida rápida.

Kevin despertó cuando se detuvo el auto. Los tres devoramos unas hamburguesas y papas fritas, que nos bajamos con vasos gigantes de Coca y Diet Coke. Me estaba sintiendo muy bien, así que decidí seguir manejando. Pronto estuvimos de regreso en la Interestatal y vi el anuncio que decía Daytona Beach, 365 Km. Calculé que estaríamos allí en tres y media o cuatro horas. ¡Florida, Allí vamos!

Ya estaba atardeciendo cuando salimos de la Interestatal. Amy se pasó al asiento delantero conmigo y me ayudó a encontrar la desviación hacia la casa de Tía Dawn. Tía Dawn valoraba su privacidad, así que su desviación estaba bien escondida. En completa oscuridad, casi nos pasamos de largo, pero Amy divisó la desviación en el último momento. Seguimos el largo camino de entrada que serpenteaba a través de una arboleda, y nos estacionamos frente a la gigantesca casa de Tía Dawn.

Todos salimos del auto y nos estiramos. Mientras Amy y Kevin permanecían cerca del carro, yo caminé hasta la puerta de enfrente. Antes de que pudiera llegar al porche, la puerta frontal se abrió. De pie allí estaba Tía Dawn. Si fuéramos de la misma edad podríamos pasar fácilmente por gemelas. Tía Dawn siempre le decía a la gente que tenía 29 años y fácilmente aparentaba esa edad. Sin embargo, yo sabía que ella venía diciendo 29 desde hacía ya varios años.

Tía Dawn era mi pariente favorito, especialmente después de que mis padres murieron. Ella era inteligente y exitosa, y era dueña de una pequeña compañía de alta tecnología que se especializaba en ingeniería para tecnología de punta. Yo esperaba ser por lo menos la mitad de exitosa que ella cuando me graduara.

Subí los escalones hacia el porche y le di a la Tía Dawn un fuerte abrazo. Me di la vuelta y vi que Kevin y Amy me había seguido. “Tía Dawn estos son Kevin y Amy – los amigos de los que te hablé” dije, señalándolos al tiempo que ellos extendían sus manos para saludar a nuestra anfitriona.

Tía Dawn sonrió y dijo “Hola Kevin. Hola Amy. ¡Encantada de conocerlos!”

“¿Alguien tiene hambre?” Preguntó ella, mirándonos a los tres para darse una idea.

Kevin y Amy dijeron “Si” al mismo tiempo. Se voltearon a ver y ambos rieron.

“Excelente. Me tomé la libertad de ir al pueblo esta mañana y compré algunas cosas. ¿Les gustan los bistés a la parrilla?” Preguntó Tía Dawn. Todos respondimos que si. La sola idea de hundir mis dientes en un caliente y jugoso bistec me hizo agua la boca.

Seguimos mi tía dentro de la casa. Mientras Tía Dawn encendía la parrilla, Amy y yo preparamos los bistés y la ensalada. Kevin intentó ayudar, pero lo sacamos de la cocina. Encogiéndose de hombros. Kevin se dirigió hacia fuera ha hacerle compañía a Tía Dawn.

Kevin regresó a la cocina minutos después y dijo, “La parrilla está lista ¿Y ustedes?”

Asintiendo, tome la bandeja con los rib eyes y los llevé ha afuera. Encontré a Tía Dawn y Kevin cerca de la parrilla a un lado de la parte profunda de la piscina. Tía Dawn con habilidad puso los bistés sobre la parrilla, y yo miré las flamas elevándose y lamiendo la carne. EL olor del la carne cocinándose combinado con las especias sazonadoras era celestial. Entonces la Tía Dawn dijo “Comeremos dentro, así que tu y Amy regresen y pongan la mesa.” Dimos vuelta y regresamos a la casa.

Amy puso la mesa y mientras yo puse las ensaladas que habíamos hechos a un lado de cada plato. Momentos después, Tía Dawn y Kevin entraron con una bandeja llena de bistés. Cada uno estaba asado a la perfección. Mi boca se hizo agua al anticipar el sabor de esos cortes suculentos.

En un intento por estar mejor informada sobre cada uno de nosotros, tía Dawn nos preguntó qué estábamos estudiando en la Universidad. Yo dije que Kevin y yo llevábamos Redes digitales avanzadas, y durante los siguientes 20 minutos aburrimos a muerte a Amy mientras el resto de nosotros hablábamos de redes digitales.

Luego Tía Dawn le preguntó a Amy que era lo que estaba estudiando, y la conversación cambió a planeación de negocios y estrategias de mercadotecnia. Siempre había pensado en Tía Dawn como una ingeniero, así que me sorprendió ver que sabía mucho de planeación y mercadotecnia.

Finalmente, terminamos de comer y los cuatro rápidamente limpiamos los platos. Tía Dawn nos mostró donde dormiríamos. Se suponía que Amy y yo dormiríamos juntas en mi cuarto, mientras que Kevin tendría en cuarto de invitados para él solo. Rápidamente decidí que lo que tía Dawn no sabía de nuestros arreglos para dormir no la molestaría.

Después de que sacamos nuestro equipaje del auto, desempacamos, y nos acomodamos en nuestros cuartos, salimos a la parte trasera de la casa para platicar un poco más con Tía Dawn. Los tres estábamos cansados por el viaje, así que cuando Tía Dawn sugirió que nos relajáramos en el jacuzzi, Amy y yo saltamos al ver esa oportunidad. Kevin estuvo un poco indeciso, pero no tuvo oportunidad contra nosotras dos.

Nos pusimos nuestros trajes de baño y nos reunimos con tía Dawn en el jacuzzi. Ella se había puesto un embarazosamente bikini rosa. Amy vestía un traje con menos tela aún. Juro que podía ver algo de sus aureolas saliéndose debajo de los triángulos de tela estratégicamente colocados. Yo vestía un traje conservador de una sola pieza que se ajustaba a mi cuerpo en los lugares indicados. Kevin desde luego usaba un short abombado que ocultaba todo. Me reí al imaginarlo usando un ajustado traje de buceo, con su abultada virilidad a la vista.

Los cuatro nos metimos al jacuzzi, y Tía Dawn hecho a andar las burbujas. Se sentía muy bien, me podía quedar a dormir dentro del jacuzzi.

Después de un rato, Tía Dawn nos preguntó si teníamos sed. Cuando dijimos si, ella salió del jacuzzi y regresó con cuatro cervezas. Los otros vaciaron sus cervezas rápido, mientras que yo, al no ser una bebedora de cerveza, apenas le di un sorbo. Cuando las cervezas de los demás estuvieron vacías, me ofrecí para ir a traer otra ronda. Regresé con tres cervezas para ellos, y una Diet Coke para mi.

Kevin y Tía Dawn estaban muy metidos en su charla de redes cuando regresé. Amy se veía un poco frustrada y se tomó su cerveza de un solo sorbo. Luego se tomó las otras dos que yo había traído para Kevin y Tía Dawn mientras su tecno charla continuaba.

Amy intentó interrumpir la conversación trayendo un tópico de conversación más interesante, pero Kevin y Tía Dawn ni siquiera lo notaron. Yo sabía que a Amy no le gustaba que la gente la ignorara, así que no me sorprendí en absoluto cuando ella se arrancó cada pieza de su bikini, los tiró a un lado y gritó, “¡Bañémonos desnudos! ¡El último en entrar a la piscina es una huevo podrido!”

Eso fue suficiente para interrumpir a Kevin y Tía Dawn. Al principio, pensé que Tía Dawn se sentiría avergonzada, pero cuando ella se quitó su traje de baño y siguió a Amy a la piscina, Pensé que Kevin era el más avergonzado. Riendo, Hice una nota mental para comprarle un traje de bucear rojo que hiciera juego con el color de su rostro la mayor parte del tiempo. Él era adorable cuando estaba avergonzado.

Decidí unirme a la diversión, arrojé mi traje de baño y salté a la piscina. El agua estaba lo suficientemente fría para que nuestros pezones se levantaran. Las tres bromeamos con Kevin hasta que finalmente dejó caer sus pantaloncillos y saltó a la piscina con nosotras.

Kevin empezó a nadar dando vueltas a la piscina y Amy se unió a él. Se inició una carrera, la cual Amy ganó con facilidad. Luego jugamos al juego de la gallina con Amy sentada sobre los hombros de Tía Dawn, mientras que yo me senté sobre los de Kevin. Fui cuidadosa para evitar las lastimadas costillas de Amy, pero cualquier lugar sobre mi Tía Dawn era juego justo. Cuando finalmente me las arreglé para derribar a tía Dawn, Amy cayó al agua. Me incliné y le di a Kevin un beso de victoria, y luego salté de sus hombros y caí en sus brazos.

Amy y Tía Dawn se excusaron y salieron de la piscina cuando Amy dijo “Tengo que deshacerme de algunas cervezas.”

Después de que ellas salieron, me di la vuelta y besé a Kevin de nuevo. El beso se convirtió en algo más al tiempo que ambos desaparecíamos en nuestro propio universo. Apreté mis labios contra los de Kevin mientras mi lengua se metía profundamente dentro de su boca. La lengua de Kevin me devolvió el favor.

De repente, sentí que alguien me daba un masaje en el coño. Pensé que algo le pasaba a Kevin, pero el separó sus labios de los míos. Sonriente Amy sacó su cabeza del agua, y entendí lo que había pasado. Kevin y yo estábamos tan perdidos en nuestro beso que Amy fue capaz de deslizarse sin ser notada en el agua y empezó a jugar con nuestros sexos.

Tía Dawn nadó hacia nosotros, poniéndome a pensar si se imaginaba lo que Amy había hecho. Ella dijo que se estaba haciendo muy tarde y que se retiraba a dormir. Tenía una reunión en la mañana y necesitaba dormir lo suficiente. Cuando empezamos a seguirla, ella nos hizo señas de que nos quedáramos y dijo “No hay necesidad de que ustedes se vayan a la cama tan temprano. Estas son sus vacaciones. ¡Disfrútenlas!” Ella se metió a la casa sonriéndonos.

Cuando Tía Dawn estuvo dentro de la casa, Amy sumergió su cabeza en el agua de nuevo y puso el pene de Kevin en su boca, mientras que reanudó su ataque a mi coño. Yo ataqué la boca de Kevin de nuevo. Esto siguió durante un tiempo antes de que Amy saliera a la superficie, totalmente si aliento. Jurarpia que Amy podía permanecer bajo el agua ¡durante 60 segundos antes de que saliera a tomar aire!

La siguiente ocasión que Amy se sumergió, me acerqué y seguí besando a Kevin. Kevin acercó sus manos y comenzó a pellizcar mis pezones. Entre las acciones de estos dos, yo estaba a punto de arrastrarlos fuera de al piscina y hacer lo mío con ambos.

Amy emergió y dijo “Fue una experiencia única. Deberías intentarlo alguna vez Kim.” Amy bostezó. “Creo que necesito descansar. Estoy muy cansada por el largo viaje. Los veo en la mañana.” Luego Amy salió de la piscina, recogió su traje de baño y su toalla, y entró a la casa.

Alcancé con mi mano hacia abajo, tomé el miembro de Kevin y empecé a frotarlo. Kevin me tomó en sus brazos y me llevó a la orilla de la piscina. Lo besé mientras me cargaba. Entonces el me sentó en la orilla de la piscina y separó mis piernas. El empezó a lamer mis muslos, luego se dirigió a mi hendidura.

Cuando la lengua de Kevin tocó mi clítoris, mi cuerpo explotó. El orgasmo continuó y continuó... Cuando finalmente bajé de las alturas, me incliné y acerqué los labios de Kevin a los míos y susurré, “Te amo.”

Entonces salté al agua y engullí el pene de Kevin en mi boca. Todo el jugueteo de la tarde había dejado a Kevin bastante rígido. Emergí durante un momento para tomar aire, y me sumergí de nuevo para continuar mi ataque al pene de Kevin. Amy tenía razón pensé para mí misma, esta realmente era una experiencia única.

Para el momento en que salí a la superficie por tercera vez, sentí que Kevin estaba casi listo para explotar. La siguiente vez que me sumergí, solo puse la punta de Kevin en mi boca y usé ambas manos para frotarlo. Justo cuando estaba quedándome sin aire, sentí el esperma moverse en el pene de Kevin. Me las arreglé para aguantar a respiración unos segundos más lo cual permitió a Kevin llenar mi boca con su semen.

Emergí, jadeando por aire, mostrándole a Kevin el contenido de mi boca. Solo para volverlo loco, lo moví alrededor de mi lengua antes de tragármelo.

Ambos salimos de la piscina y tomamos nuestras toallas. Sequé a Kevin, mientras él me secó a mí. Justo cuando pensaba que había terminado, Kevin levantó cada seno y usó la toalla de bajo de ellos. Luego caminamos hacía nuestras habitaciones escaleras arriba.

Después de besar a Kevin por última vez, entré en mi cuarto. Sabía que si me metía en la cama junto con Kevin ninguno de los dos dormiría. Después de todo lo que conducimos, más el ejercicio en la piscina, estaba exhausta.

Amy ya estaba dormida cuando entré en la habitación. Así que silenciosamente me subí a la cama a un lado de ella, la abracé, y me dormí casi instantáneamente.

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