Note: This story was dynamically reformatted for online reading convenience. El camino de Dolores Prefacio Dolores iba en el Metro que la dejar'a cerca de su casa, venia del colegio donde trabajaba como profesora de Psicolog'a, ella siempre hacia ese recorrido todo los d'as porque era la manera más rápida de ir y venir del trabajo. El Metro en las horas picos siempre estaba atestado de gente y especialmente esa ruta que llegaba a una barriada populosa donde ella viv'a. Dolores detestaba ir en un vagón atestado de gente donde no hab'a manera de evitar que pasajeros pervertidos se recostaban y disimuladamente manoseaban a las mujeres. Para evitar esa situación ella sal'a temprano de casa al trabajo y procuraba regresar cuando los vagones iban con menos pasajeros, también usaba faldas largas que no eran más cortas que el largo de la rodilla y la blusa abotonada hasta el cuello siempre con una chaqueta, aun en d'as calurosos. Sin embargo este d'a no le importaba cuanta gente hab'a a su alrededor y cuantos se habr'an aprovechado en el vagón, sus pensamientos estaban muy alejados de all' y quer'a llegar a casa para desahogarse de la experiencia que hab'a vivido. Dolores se hab'a casado dos veces y sent'a que no hab'a tenido suerte con sus matrimonios; era hija única y hab'a dejado la casa de sus padres cuando se caso a los 18 años de edad al quedar embarazada de su hijo mayor, Raúl, su segunda hija, Dinora, nació cuando Raúl estaba por cumplir dos años de edad, el matrimonio parec'a ir bien como cualquiera que ella conoc'a, pero cuando llevaban diez años de casada comprobó que su esposo hab'a tenido varias amantes y aunque ella soportó tal situación para no romper con el matrimonio no pudo aguantar más cuando él empezó a llevar a la casa a su secretaria con el pretexto de adelantar trabajo, una joven que apenas estaba saliendo de la adolescencia que estaba haciendo pasant'as, y una vez lo pillo en el acto teniendo sexo en la sala de la casa cuando ella llego a casa, pero lo que verdaderamente la enfureció fue que sus dos pequeños que en ese entonces solo ten'an diez y ocho estaban en casa viendo el espectáculo sin que a su padre le importara. Ella echó de la casa a su esposo mientras tomaba alguna decisión, esperaba algún tipo de arrepentimiento de parte de él que nunca llego. No quer'a hablar con ninguna de sus amigas sobre ese asunto que le parec'a vergonzoso pero si hablo con su madre, ella esperaba que su madre la apoyara pero en cambio la critico porque estaba haciendo muy duro con él, ella no pod'a creer que su propia madre le parec'a que lo que hac'a su esposo era sólo un entretenimiento propio de todos los hombres y le parec'a divertido que tuviera sexo con la chica cuando sus propios hijos estaban observando. A pesar que sus hijos, y padres le reprocharon por echar a su esposo de la casa decidió dar el paso y se divorcio. Después de esa mala experiencia se prometió nunca confiar en los hombres y menos formalizar un nuevo lazo matrimonial aunque nunca le faltaron pretendientes, ella siguió sola con sus dos hijos por otros tres años pero en su tercer año de divorcio conoció a Cesar un hombre diez años de edad mayor que ella, era un padre soltero y en algunos aspectos sus vidas estaban cruzadas, Cesar se hab'a divorciado de su esposa porque le era infiel y también hab'a tenido varios amantes y cuando la echó de la casa solo se quedo con su hijo mayor también llamado Cesar como su padre. Confió en la sinceridad de Cesar y se volvió a casar, para entonces el pequeño Cesar ten'a once años, ella sent'a que volv'a de nuevo a tener una familia, y as' fue por tres años cuando un d'a recibió la noticia que su esposo hab'a fallecido en un accidente cuando regresaba a casa, quedando sola de nuevo ahora con tres hijos que estaban en su etapa más dif'cil y Cesar que hab'a resultado ser un chico problemático apenas de 14 años de edad. Apenas habr'an pasado unos meses de haberse casado con Cesar cuando un d'a limpiando la habitación de Cesar Jr. Ella encontró sobre la cama debajo de las sabanas unas pantaletas de ella y cuando las revisó estaban manchadas de semen fresco, la impacto y la enfureció, pero no le dijo nada a su esposo porque en esos d'as estaba viajando y cuando regresó ya ella hab'a asimilado la situación, Dolores hizo un inventario de sus pantaletas y a menudo estaban extraviadas algunas, pero luego aparec'an manchadas de semen, pasado el tiempo ya no le hizo caso porque pensaba que era producto de la edad. Otro d'a limpiando de nuevo la habitación estaban entre las sabanas unas pantaletas que ella supo inmediatamente que no eran de ella, eran de una jovencita, Dolores se puso blanca y parec'a que se iba a desmayar pensando que podr'an ser de su hija Dinora, se puso roja de furia y juró que su padre deb'a conocer de su comportamiento, pero luego de mirar detalladamente las pantaletas le parec'an extrañas porque ella no recordaba haber comprado ropa interior hecha de esa tela barata a su niña, mientras ordenaba la cama vio una marca profunda bien elaborada hecha con una navaja en la cabecera de la cama de madera, Dolores intuyo que podr'a ser ya que era de la jerga diaria en el colegio escuchar a los chicos vanagloriarse de las marcas que ten'an sus camas y bromeaban con eso, de nuevo su imaginación corrió sobre quien pudo haber sido la chica producto de esa primera marca y un temblor recorrió su cuerpo; Podr'a decirse que Cesar Jr. Y Dinora eran hermanastros pero no hab'a ningún lazo natural que los uniera, Dolores supo entonces que deb'a cuidar a su hija de este chico precoz sexualmente. Dejó las pantaletas sobre la cama y salió de la habitación. Otro d'a llego a casa más temprano de lo acostumbrado y cuando entró a la sala encontró a una de las hijas de la vecina de apenas doce años que afanosamente buscaba acomodar su pequeña falda mientras Cesar Jr. Estaba sentado en el sofá de la sala aparentemente viendo Tv, Dolores no hizo caso al asunto en ese momento pero cuando el chico dejo la casa fue a su habitación y como sospechaba estaba una segunda marca en la cabecera de la cama. Después de la muerte de su esposo Dolores trato de tomar las cosas con calma, especialmente porque le hab'a dejado un seguro que le garantizaba cierta estabilidad económica. Sin embargo luego de la muerte de su padre el comportamiento de Cesar empeoró y a pesar que ella era Psicóloga le constaba tratar con él, pero las cosas se pusieron más dif'ciles cuando Raúl y Dinora salieron de la casa para ir a estudiar a la universidad fuera de la ciudad a la capital. Ahora ella ten'a que lidiar con Cesar sola, él estudiaba en el liceo donde ella daba clase, pero cada d'a se le hac'a más dif'cil mantenerlo all'; El liceo era una institución privada de prestigio y los egresados de all' eran apalancados para ingresar a la universidad. En este ultimo año Cesar hab'a sido llevado en varias ocasiones a la dirección por mala conducta y no era echado del liceo porque el director, un hombre en sus sesenta que estaba a punto de jubilarse, tenia cierto cariño hacia Dolores y pasaba por alto las faltas de su hijo. Sin embargo apenas un mes atrás el dueño del colegio hab'a fallecido y estaban las dudas sobre quien se encargar'a de la administración del mismo, entonces unos d'as después el director llamo a Dolores a su oficina y le comunico que él abandonar'a el colegio por desavenencias con los nuevos administradores, también le recomendó que tratara de controlar a Cesar. Unos d'as después conoció la nueva administradora y dueña y el nuevo director, eran hijos del antiguo dueño; como administradora quedar'a la hija, una mujer de la misma edad de ella de 40 años de edad que daba mucha importancia a su belleza f'sica, su cuerpo era una escultura esculpida por el gimnasio, la falda que llevaba apenas llegaba a mitad de su muslos, mientras como director quedaba su hermano; un hombre de 45 años de edad, fortachón como si practicara lucha, su cabeza parec'a una bola grande de boliche completamente calva, en el cuello y dedos llevaba una joyer'a completa. La primera impresión que dejaron en el personal fue de asombro y rechazo porque no era el estereotipo para dirigir una institución educativa de tanto prestigio, ese rechazo se desvaneció cuando como primera medida aumentaron al doble el sueldo y salarios de todo el personal que de por s' ya era el más elevado de todos los colegios del área. Apenas hab'a pasado un mes con la nueva administración cuando Dolores fue llamada a la dirección, cuando ella fue anunciada por la secretaria y entró vio al nuevo director que parec'a más bien un jefe de la mafia sentado detrás del escritorio, su porte arrogante con una mirada penetrante además que era inevitable no fijarse en los anillos en casi todos los dedos de sus manos y el reloj de oro, llevaba una camisa blanca como nieve con los dos botones superiores sueltos que mostraban una cadena gruesa de oro que ca'a alrededor del cuello, su cabeza brillaba por la luz blanca del techo, Dolores sintió un escalofr'o por primera vez en muchos años trabajando en ese colegio cuando atravesó la puerta, el director ten'a un cuaderno grueso empastado de negro sobre el escritorio y cuando Dolores lo reconoció sintió que el piso se hund'a, el director la mando a tomar asiento en una silla acolchada que estaba justo al frente del escritorio, Dolores se sentó sin aún decir una palabra, cuando estaba sentada el director dijo: "Dolores, no tengo ninguna queja de tu profesionalismo, me parece excelente, sin embargo me estoy enterando que algo anda mal con su hijo, ¿Cesar Gutiérrez es su hijo verdad?" Tratando de digerir que pasaba y con una muestra evidente de nerviosismo respondió: "Si señor director, él es mi hijo." Quer'a preguntar lo que pasaba con él pero por el cuaderno sobre la mesa era muy evidente. Dolores no pudo aguantar más y dijo: "¿Sucede algo con mi Cesar?" "¿Ha estado sucediendo, ha estado sucediendo Dolores, y usted muy bien sabe eso, nuestra institución tiene normas estrictas y según he visto en el libro de vida del joven Gutiérrez las ha estado violando constantemente, estoy seguro que aún en un colegio público no soportar'an semejante conducta, no es as' Dolores?" Dolores aguantaba tragando duro, ella sab'a que su hijo estaba en ese colegio era por la voluntad del antiguo director, ella no podr'a negar nada de lo que acababa de decir el nuevo director, entonces con voz apenada respondió: "Si señor y estoy muy agradecida que hayan tenido paciencia con él, yo le prometo que no sucederá de nuevo." El director se quedo mirando a Dolores que apenas levantaba la mirada del escritorio, entonces dijo: "¡M'rame Dolores!" Dolores levantó la mirada encontrándose con una sonrisa socarrona. El director continúo: "Veo porque Sebastián no tuvo el valor de echar a tu hijo del colegio, usted es una mujer apetecible." La tez de Dolores cambio rápidamente de color a un rosado, ella sent'a que la sangre le herv'a, pensaba: "Como se atreve ese hombre a insinuar semejante cosa" sin embargo aguanto, no dijo nada. El director continúo: "Lo que pasa Dolores es que ya paso de nuevo." Entonces el director hizo clic en un video y giró el monitor de su computadora de escritorio, era una grabación tomada de una cámara recién puesta en la biblioteca, all' estaba Cesar grabando un video con su celular de dos chicas que se manoseaban y besaban detrás de unos estantes de libros. De nuevo su tez era blanca como papel, el director dijo: "Y entiendo que esto no es la primera vez, en el cuaderno hay por lo menos diez faltas graves y otras incluso peores que esta última, por ejemplo tengo aqu' una de la profesora de historia que se quejo que el joven Gutiérrez le toco las nalgas causando un alboroto en el salón de clase cuando ella paso juntó a él por la fila mientras hacia un dictado, pero yo se que usted sabe todo eso, por eso digo que definitivamente usted tra'a a Sebastián por los pelos, el pobre hombre no pod'a resistir a una mujer como tú." Dolores apenas escuchaba pero respondió: "Señor director le suplico esta será la última vez, el chico es problemático desde niño y la única manera de poder lidiar con él es teniéndolo cerca, si usted lo expulsa, probablemente con el record que se lleva no será aceptado ni siquiera en una institución pública, y usted sabe las consecuencias que eso suceda." "Entonces usted está consciente de la gravedad." "Si señor director" "¿Sabe que el único lugar donde lo aceptar'an es una correccional para menores?" "Si" "¿Qué vamos hacer con esta situación Dolores?" Dolores no noto la doble intensión en las palabras y si lo noto las paso por alto, respondió: "Por favor señor director no pasara de nuevo." "Voy a ser claro contigo Dolores, me imagino que Sebastián no tuvo las bolas de hacerlo pero le propongo dos opciones." Dolores escucho la palabra obscena, pero miro al director como si quisiera interpretar lo que acababa de decir. No dijo nada. El director continuó. "Tus opciones son: una; retirar a tu hijo del colegio y esta conversación termina aqu' como si no hubiese existido, dos; mañana venir al colegio sin pantaletas y entonces cuando termine tu actividad del d'a viene aqu' y me mama el guevo." Dolores apenas pod'a mantenerse, aguanto para no desmayarse, las lágrimas corr'an por las mejillas, quer'a suplicar pero sab'a que era inútil, entonces cuando el director dio por terminada la charla, ella se levantó y salió. continua... le agradezco sus comentarios a johernan2002@yahoo.es.