Note: This story was dynamically reformatted for online reading convenience. El camino a la depravación de una madre Por Johernán (Esta historia es completamente ficticia. Tiene incesto, zoo, scat, y otros.) `Las cosas pasaron tan rápido que aún me pregunto cómo me paso esto a m'' pensaba Mar'a. Se hab'a casado con un hombre veinte años mayor que ella y para ahora tuviera cincuenta y cinco a no ser por el terrible accidente que lo condujo a la muerte. Viv'an en una granja a las afueras del pueblo que era propiedad de él, cuando se caso con ella, el matrimonio tuvo cuatro hijos dos hembras y dos varones: las hembras; Juanita y Patty de quince y nueve años de edad y los varones; Pedrito y Pablito de trece y once años. La granja también ten'a algunas casas humildes en las afueras que albergaban a trabajadores de la granja y sus familias, casi todas extranjeras. Entonces de repente vino una crisis económica que afecto toda la venta de la producción de la granja y las facturas empezaron a amontonarse, cuando los proveedores de alimentos y semillas empezaron a presionar, el esposo de Mar'a se vio obligado a viajar largas distancias para poder negociar la cosecha. Él estaba empeñado en no dejar caer la granja, que era una herencia de la familia, además que sent'a una obligación moral por sus trabajadores de mucho tiempo. Entonces ocurrió el accidente en uno de estos viajes, dejando a Mar'a sola con semejante carga. Ella salió de la casa de sus padres apenas cuando cumplió los 18 años y solo completo el bachillerato, y en todo este tiempo ella no intervino en los negocios de sus marido, solo se dedicaba a los deberes que una madre debe hacer en su casa y a cuidar de sus hijos. Por lo que quedar de repente sin esposo, una granja que mantener y muchas deudas que pagar, además de cuidar a sus hijos fue un tremendo golpe para ella. Se sent'a como que quer'a morir y as' permaneció por varios d'as, pero eso no la desobligaba de sus compromisos, entonces decidió que la única manera de salir del estado en que se encontraba, era asumir el reto de administrar la granja como hab'a hecho su difunto marido. Lo primero que ten'a que hacer era salir de la producción que se estaba acumulando y salió a visitar a los clientes. Primero me decidió visitar a los clientes que ten'a en el pueblo. Ella conoc'a el pueblo pues a menudo bajaba por las cosas que necesitaba en casa. A pesar de ser madre de cuatro se conservaba y manten'a su figura. Ella hab'a heredado la figura de su madre, un metro setenta de altura y 65 kilos de peso, con grandes tetas que parec'an melones, grandes caderas, nalgas grandes y redondas y cintura reducida. Ella ten'a la misma figura de su hija cuando ten'a su edad, era el objeto de las miradas por donde quiera que pasara, tanto de viejos como de niños, que ya ten'an algún interés sexual, de profesores y por supuesto de sus compañeros. Ella se sent'a excitada cuando la miraban y empezó a usar la falda colegial al l'mite del código del colegio, cuando estaba acalorada sub'a unas o dos pulgadas su falda que prácticamente se pod'an ver sus pantaletas con una simple inclinación, Caminaba del colegio a la casa y antes de salir del colegio iba al baño y se quitaba las pantaletas que luego guardaba a escondidas en el bolso, sub'a su falda justo unas pulgadas debajo de su horca y caminaba a su casa, siempre pendiente de las miradas, devolviendo sonrisas a algunos piropos o incluso vulgaridades que algunos viejos pervertidos le dec'an. Entonces cuando estaba por llegar a su cuadra se acomodaba la falda, para evitarle una molestia a su madre. Cuando apenas termino su bachillerato su madre la obligo a casarse con José que fue en su tiempo un compañero de colegio de su madre. Con el tiempo acepto que él era su esposo y aprendió amarlo. Sin embargo su fetiche exhibicionista siempre la acompaño y cuando ten'a que bajar al pueblo sola, se pon'a faldas que flotaban con la brisa o vestidos que ella misma hab'a hecho: con botones o cierres en la falda y cuello escotado, le gustaba usar mini pantaletas que apenas ten'an un mini parche que tapaba su coño. Cuando usaba estos vestidos o faldas llevaba unos zapatos de tacón altos. Cuando estaba por entrar al pueblo sub'a sus faldas a medio muslo y soltaba unos botones de su blusa para hacer acentuar la hendidura entre sus tetas y caminaba por la calle ondulando sus caderas, atrayendo las miradas del todo el que pasaba. En verdad: `me sent'a como una puta' pensaba, pero lejos de avergonzarse se sent'a cómoda y cachonda. Cuando su esposo murió el velorio se hizo en una funeraria del pueblo, y recibió muchas condolencias de los amigos de él, y clientes, la mayor'a tanto hombres como mujeres ya la hab'an visto a ella caminar por las calles exhibiendo su cuerpo y a muchos de ellos de seguro yo le hab'a provocado un hard-on y quien sabe cuántos niños no se hab'an masturbado por causa de ella. Lo que de seguro recuerda muy bien en aquellos momentos de dolor; es que muchos abrazos de pésame parec'an manoseos, algunos incluso se atrevieron a manosear sus nalgas o tetas. En la sala de su casa hab'a colocado un pequeño santuario con una fotograf'a de su esposo y var'a velas encendidas al frente como era la tradición, mientras se guardaba el luto. La noche anterior después que sus hijos estaban en cama Mar'a fue al santuario y se arrodillo frente a la fotograf'a, y entonces prometió que no dejar'a que la granja se perdiera y har'a cualquier cosa que fuera necesario para salvarla. Capitulo dos Mar'a estaba dispuesta a no perder la granja. Por lo que se dispuso a vender la mercanc'a de cualquier manera, que con tanto esfuerzo los trabajadores se hab'an esforzado en producir. En la mañana reunió a sus hijos antes de salir para el colegio y les dijo que ella se iba a encargar de los negocios de su difunto esposo, entonces encargo a Juanita para que cuidara a sus hermanos mientras ella no estaba en casa. Después que Mar'a quedo sola, se dispuso a vestirse para salir a su primer d'a de trabajo, fue al closet y saco sus vestidos negros que hab'a comprado para guardar el luto. Todos eran del mismo modelo por lo que tomo uno y se lo puso, entonces fue al espejo, el vestido era de una tela suave y se ajustaba a su cuerpo pero la falda estaba por debajo de las rodillas, y cerrado al cuello. Ella solo hab'a usado estos vestidos en el funeral, desde entonces no hab'a salido de la casa. Ella se quitó el vestido, y rápidamente le hizo algunos arreglos en la máquina de coser. La costura era su hobby desde pequeña, su mamá era costurera y le hab'a enseñado, ella disfrutaba cociendo. Después de hacer los arreglos se lo puso, se miro en el espejo y sonrió, tomo el malet'n y salió. Cuando llego al primer negocio ella estacionó la camioneta, y después de acomodarse su vestido y calzarse con unos tacones altos, entro al local. El lugar estaba vac'o a esta hora y un jovencito como de la edad de Pedrito estaba acomodando algunas verduras. Mar'a se dirigió donde estaba el niño, que no apartaba la mirada de ella, un cosquilleo recorrió el cuerpo de Mar'a, entonces dibujo una sonrisa y sensualmente dijo: "¿Buenos d'as hijo, cómo te llamas?" Sin apartar la mirada de la hendidura de las tetas de Mar'a, respondió "Pedro, señora." Mar'a estaba consiente donde estaba fija la mirada del niño, entonces ella bajo su mirada y notó que las mitades de los globos de sus tetas estaban a plena vista y parec'an que luchaban por salirse, después disimuladamente miro la horca del muchacho y pudo notar un pequeño bulto, en vez de sentirse avergonzada ella empezó a sentir un cosquilleo de excitación que recorr'a su cuerpo, añadió: "¿Qué edad tienes, hijo?" El niño estaba incomodo porque noto que la señora no apartaba la mirada de su horca, rápidamente dijo: "Trece señora" "Uhm, Justo mi hijo también se llama Pedro y tiene trece años como tú. ¿Donde está don Manuel?" "En el almacén haciendo inventario, si usted lo busca yo lo puedo llamar." "¿No es necesario, será que puedo pasar al almacén para hablar con él?" "Puede pasar. El almacén está detrás de aquella puerta." Señalando al fondo. "Gracias cariño. ¿Por qué no estás en la escuela?" "Hoy no fui porque tuve que ayudar a mi abuelo aqu' en la tienda, él necesitaba hacer el inventario y no ten'a a nadie que atendiera la tienda mientras tanto." "¿Donde estudias?" "En el colegio Santa Mar'a, octavo año." "Qué casualidad mis hijos también estudian en el mismo colegio y mi hijo Pedro también está en octavo." "Yo conozco a Pedro, él y yo somos buenos amigos." "Bueno yo le diré hoy que te conoc'. Voy a ver a don Manuel. Chao." Alejándose del muchacho, mientras se dirig'a a la puerta del almacén el niño se quedo mirando como aquella voluptuosa mujer meneaba su trasero. Mar'a atravesó la puerta y llamo a Don Manuel. Cuando escucho un "s'", como respuesta al fondo, y la bulla de algunas cajas, ella dijo: "Soy la señora Mar'a, la viuda de José, que le vend'a mercanc'a. ¿Puede atenderme un momento?" "Lamento la muerte penosa de su esposo en ese accidente. Pase hasta aqu' porque estoy atareado, tengo que hacer todo esto hoy. Por favor acérquese." Mar'a avanzó, al final estaba Don Manuel de espaldas acomodando unas cajas, un hombre de unos 60 años de edad, alto y fornido. Cuando ella estaba a su espalda, aclaro la voz de manera audible, entonces Don Manuel dejo las cajas y se volteo. Don Manuel hab'a visto a Mar'a en el funeral, y hab'a quedado impresionado por su voluptuoso cuerpo a pesar que el vestido que llevaba entonces ocultaba mucho de sus encantos. Pero el vestido que llevaba hoy, lejos de ocultar sus encantos los acentuaba: su vestido era negro con falda corta y escasamente llegaba a medio muslo, pero ten'a dos aberturas a cada lado que llegaban a la altura de la horca; el vestido estaba ceñida a su cuerpo y hac'a resaltar su gran trasero y el plano de su vientre. El vestido era escotado y dejaba ver gran parte de la hendidura de sus grandes tetas, la mitad de sus melones sobresal'an claramente a la vista. Rápidamente Mar'a noto la mirada descarada de Don Manuel. Ella dejó que él la mirara, y disimuladamente se inclino un poco para revelar más de los globos de sus tetas, mientras le explicaba su situación. El delantal que llevaba puesto Don Manuel le tapaba el tremendo hard-on. Sin embargo Mar'a noto el bulto, mientras se mord'a su labio inferior. Don Manuel Dijo: "Señora; no sé cómo decir esto, pero vino otro proveedor y... bueno yo pensé..." "Don Manuel no me diga eso, por favor entienda mi situación." Entonces se acerco y apoyo su cabeza y tetas contra el pecho del viejo, entonces empezó acariciando sus pechos, añadió. "Yo estoy dispuesta hacer cualquier cosa, realmente estoy desesperada." Don Manuel no pod'a resistir aquella mujer, `dicen que las oportunidades las pintan calvas.' Se quedo all', sin hacer el menor esfuerzo por alejarse de ella. Mar'a prosiguió siendo más atrevida y poco a poco bajo su mano hasta la entrepierna. Dijo: "Si usted me ayuda Don Manuel, yo estaré infinitamente agradecida de usted." Mar'a salió de la tienda media hora después con una sonrisa, y por supuesto limpiándose su boca después de haber chupado y tragado los 25 cent'metros de palo de Don Manuel. No solo le hab'a vendido la cuota que normalmente le vend'a su esposo, sino que él seguir'a comprándole a ella. Claro a cambio recibir'a un trato especial. Mar'a regreso a su casa, estaba satisfecha porque no le hab'a ido tan mal en su primer d'a. Cuando llego, sus hijos ya estaban en casa reunidos en la sala viendo la tv. Mar'a inmediatamente noto las miradas de asombro de sus hijos, ellos nunca la hab'an visto vestida de esa manera. Para ellos su mamá era una madre enchapada a la antigua, con vestidos largos, o faldas que iban más debajo de las rodillas. Entonces Pablito que siempre era muy espontaneo y a veces hab'a recibido una que otra palmada por la boca por soltar las palabras, dijo: "Mamá esta vestida como una puta." Después se tapo su boca, mientras esperaba la manotada de su mamá, con temor. Sus hermanos miraban a su mamá y a Pablito, esperando el momento que saltara sobre su hermano y lo manoteara, sin embargo en vez de eso, Mar'a permaneció como si no hubiese escuchado nada. Juanita agrego: "¿mamá porque estas vestida de esa manera?" Todos los demás hermanos estaban expectantes por la respuesta de su mamá, Mar'a respondió: "Niños es mejor que me escuchen y entiendan. Ustedes saben que tu papá que en paz descanse estaba trabajando duro por mantener la granja. Las cosas no estaban muy bien y por eso el se vio obligado a vender los productos lejos. Ya la gente no puede comprar como antes, entonces es muy dif'cil vender, y cuando se vende quieren pagar un m'sero precio. Pero él no se desanimo y lucho duro para poder pagar todas las deudas que se estaban acumulando. Él no quiso vender la granja porque fue una herencia, y si la hubiese vendido escasamente podr'amos vivir en un barrio. Además de que iba a trabajar, si toda su vida fue granjero. Por eso yo lo apoye todo ese tiempo. Y yo lo único que he hecho en mi vida es dedicarme a la casa y a ustedes, pero ahora que él no está, que creen ustedes que debo hacer. Pensé que lo mejor es seguir con la granja y asumir trabajo de tu papá, y esperar que las cosas mejoren, entonces podremos contratar a alguien que se encargue de las ventas. (Después de una pausa agrego) Niños, hab'a d'as que tu papá llegaba destrozado y deprimido, porque las ventas no eran suficientes para pagar las deudas. Él me dec'a que hab'a mucha competencia y los clientes eran dif'ciles de convencer. Entonces esta mañana cuando me vest' con el vestido de luto para ir a visitar a mi primer cliente del pueblo me ve'a más como una adolorida y desvalida viuda, que daba lástima y no como la agresiva y decidida vendedora. Como yo no tengo ninguna experiencia en ventas, pensé que podr'a usar mis atributos femeninos y por eso hice algunos arreglos a este vestido. Y a no ser por la decisión que tome hoy no hubiera vendido la mercanc'a a Don Manuel, pero además logre que él renovara el contrato de nuevo por otros seis meses". Después que su mamá guardo silencio, Juanita dijo: "Si, bueno mamá pero no te parece que el vestido está un poco, usted sabe..." "Vulgar, es eso lo que me vas a decir. Bueno déjeme decirte esto jovencita y a ustedes niños, la vida de una mujer es dura en un mundo de hombres. Por eso nosotras tenemos que recurrir a nuestras armas, as' como los hombres utilizan las de ellas. Ahora nosotros estamos solos y debemos apoyarnos unos a otros, y además all' tenemos una granja que mantener y trabajadores que dependen de nosotros, y yo le jure a mi difunto José que har'a cualquier cosa para conservar la granja. Y créenme esto, no estoy bromeando si yo tengo que ir desnuda a visitar un cliente para vender la cosecha, lo haré. Ese sacrificio no ser'a nada comparado con todo lo que mi querido José hizo por nosotros." Los niños nunca hab'an escuchado a su mamá expresarse de esa manera, en cambió la conoc'an como una madre estricta que no permitir'a ningún comportamiento, que rayara en lo moral. Era la primera vez que alguno de ellos hab'a visto las piernas de su madre, siempre usaba vestidos o faldas y algunas veces batas de casa que siempre llegaban unos cent'metros de los tobillos. Ahora no solo estaba vestida con un vestido que mostraba las piernas hasta medio muslo y si cualquiera de ellos era detallista podr'a incluso ver parte de sus nalgas, cuando se agachaba, y el top que dejaba al descubierto prácticamente media teta, sin dejar mucho a la imaginación. E incluso hablaba de ir desnuda si el caso fuera necesario. Patty dijo espontáneamente e inocentemente: "guao mami usted ir'a desnuda a vender." Mar'a se sentó en el mueble que estaba frente al sofá donde los cuatro niños estaban viendo la tele, y respondió: "Cariño es solo un decir, pero lo que quise decir es que haré cualquier cosa para cumplir mi promesa que hice a José." Pedrito en un tono un poco más serio dijo: "Mamá pero que, si alguien te dice que vaya desnuda a la tienda. ¿Usted ir'a?" "En realidad no lo sé, pero si no tengo otra opción lo haré." Pablito dijo sin pensarlo. "Me gustar'a eso." "Cállate Pablito" grito Juanita. "Que te pasa, estas envidiosa. Mami Juanita le gusta andar en el colegió con la falda que casi se le ven las pantaletas, y no me digas que no porque yo te he visto." "Cállate Pablito" "Es verdad mami yo también la he visto, y cuando ella y yo estamos solas en la casa, le gusta andar desnuda por la casa." "Cállate Patty." Mar'a en otro momento ya hubiese, reprendido duramente a sus niños. Pero contrar'o a eso, una sonrisa se dibujo en su rostro. Entonces dijo interrumpiendo la discusión: "Ya Juanita. Me parece que este es un buen momento para que todos seamos sinceros. ¿Y tú Pedrito que tienes que decir, has visto a Juanita en esas faldas cortas, también?" "Casi siempre. Pero casi todas las muchachas del colegio lo hacen y los profesores también lo saben y no dicen nada, incluso hay maestras que llevan unas faldas casi tan cortas como las que ella usa. A mi parece que está bien." "A m' también, cuando yo era más joven que Juanita, también me gustaba llevar las faldas cortas, justo como juanita cuando no hab'a ningún profesor a la vista. Incluso le voy a contar mi secreto de adolecente. Yo antes de dejar el colegio para ir a la casa iba al baño y me quitaba las pantaletas, y me sub'a las faldas tan alto como pudiera, e iba a mi casa caminando contorsionando mis caderas para que todos me vieran." "Guao, mami eso debe ser Cool. Dijo Patty." "Si que lo es cariño, y por eso digo que ojala un d'a alguien me rete a ir desnuda a su tienda, yo ir'a pero necesito que me empujen, porque sola, por mi cuenta, no ser'a capaz." "¿Guao, mami usted ser'a capaz?" "S' cariño me siento que puedo hacerlo. Toda mi vida he tenido un sueño de ir por las calles desnuda y que las personas me vean, y me digan cosas obscenas. Eso siempre me ha excitado." "Guao, mami. Eso es Cool." "Por eso si Juanita quiere mostrar su cuerpo, me parece bien, no ser'a justo que yo se lo prohibiera." "Guao mami. Yo también puedo." "Si cariño tú también puedes. Además estoy segura que con ese cuerpo vas a babear más de un pervertido. Yo recuerdo que cuando ten'a tu edad, los amigos de papá se reun'an en casa los sábados en la noche para jugar y tomarse algunas cervezas. Mi mamá no permit'a que tú t'a Elena y yo usáramos el baño, mientras la casa estuviera llena de hombres tomando cerveza y yendo al baño a cada rato. Entonces nosotras ten'amos que bañarnos en el patio con un perolito y sacábamos agua de un depósito donde manten'amos agua para cuando hab'a escases. El patio estaba al frente del porche de la casa donde se reun'an mi papá y sus amigos, pero también cualquiera que pasara frente a la casa podr'a vernos. Mi mamá nos hab'a comprado dos bikinis de dos piezas tanto a Elena como a m'. Mientras nosotras nos bañábamos éramos el centro de las miradas de todos y nosotras durábamos horas all', mientras nos re'amos de las miradas de todos esos viejos pervertidos." Juanita dijo: "Mamá el otro d'a vi a Pedro y Pablo que estaban fisgoneando en la puerta de su cuarto mientras usted se cambiaba, cuando vieron que yo los estaba viendo salieron corriendo a sus cuartos." Las miradas de Pedrito y Pablito se clavaron en Juanita, mientras Patty miraba a su mamá y a sus hermanos. Mar'a rápidamente intervino antes que se formara una discusión: "S' ya lo sab'a, y sé que no es la única vez, yo dejo la puerta sin seguro a propósito, como dije a mi me gustan que me miren. Eso no es de extrañar en jóvenes de su edad. Ellos son curiosos, y las primeras hembras que tienen a la vista son sus hermanas y por su puesto su madre. Yo estoy segura que todos los jovencitos hacen lo mismo en sus casas. ¿Usted no ha estado curiosa por saber que tienen ellos ah' abajo en sus horcas que nostras no tenemos, Juanita?" Juanita vaciló un momento, entonces respondió: "Bueno e...e...este s'." "Ve, como yo pensaba." La conversación segu'a mientras el sol se estaba poniendo y la noche ya se apoderaba de la granja, de repente se escucho el ladrido del perro afuera en la perrera. El perro se manten'a amarrado de d'a, para evitar que fueran a morder a alguien o corriera a la carretera y lo atropellara algún carro. Pero de noche lo soltaban para que cuidara, la casa. Mar'a se levantó y salió al porche para ver que estaba molestando al perro. Aunque la oscuridad ya se estaba apoderando, aún se pod'a ver a lo lejos. No vio nada, aunque el perro segu'an ladrando, `Debe ser algún animal suelto que paso' pensaba, entonces se dispuso a entrar a la casa. En el momento que dio la espalda para entrar a la casa, una mano la tomó por el cabello, y un revolver le hirió la espalda, entonces una voz masculina dijo: "No haga ninguna cosa tonta si quiere seguir viviendo." Entonces el hombre la empujo adentro. Los niños que aun estaban reunidos esperando a su mamá, quedaron paralizados de miedo cuando vieron que su mamá era empujada por un extraño. El hombre dijo: "Yo no les voy hacer nada si ustedes prometen hacer lo que yo les diga." El hombre empujo a Mar'a al asiento donde ella estaba sentada más temprano. Cuando cayó en el asiento la falda se le arremolino en la cintura dejando el dobladillo al borde de la horca, enseñando las mini pantaletas rojas. La mirada de todos se poso sobre su horca. Ella bajo la mirada y se dio cuenta de su exposición vulgar, entonces trato de levantarse un poco para bajar la falda. Pero escucho la voz del hombre: "Quédese donde esta puta. No hagas nada." Mar'a levantó la mirada al hombre por primera vez y vio que llevaba un uniforme de presidiario. El miedo se apodero aún más de ella. Ella hab'a escuchado en la radio en la tarde, que un peligroso violador se hab'a escapado de la cárcel, y aconsejaban a todos a mantener las casas aseguradas mientras era aprehendido de nuevo. También se estaba dando una recompensa por cualquier información que llevara a la captura. Miró a los niños y vio la mirada de miedo en sus ojos, entonces, tomando fuerzas, trago duro y calmadamente dijo: "No nos haga daño por favor. Arriba de la mesa está el dinero en efectivo que tenemos. Puede tomarlo." "Cállate puta. Ahorita lo que tengo es hambre. Tráigame algo para comer. Yo la voy a estar vigilando y si hace algo estúpido, tus hijos van a pagar. ¡Vamos Muévete!" Mar'a se levantó con temor, para ir a la cocina. Pero cuando se dispon'a a marcharse, escucho: "Yo no he dicho que te muevas. Ten'a tanto tiempo encerrado en ese maldito penal, y no hab'a visto una mujer tan buena como usted, señora. De seguro no es dif'cil tener un hombre que este babeándose por usted." "Gracias señor." Respondió Mar'a con voz temblorosa. "Ahora qu'tate esas faldas, que quiero ver tu trasero." "Señor por favor, tenga compasión de nosotros. Ellos son mis hijos, y nosotros somos una familia cristiana." "Bueno entonces ser'a mejor que tu preciosa hija mayor se desnudara, para m'." "No, no está bien, yo me quito la falda." Con eso Mar'a se soltó la falda con dedos temblorosos, y dejo caer la falda a sus pies, quedando de pie frente al hombre y a sus hijos. Inmediatamente bajo sus manos y cubrió su horca. "Venga acá perra." Mar'a se acercó al alcance del hombre. "Date vuelta." Mar'a se giro y el hombre empezó a manosear sus grandes nalgas, estrujándolas y abriendo sus nalgas, dejando a la vista de él y de sus hijos, el hueco del culo. "Uhm, uhm que rico, tanto años que no acariciaba, algo as'." El hombre se mantuvo unos minutos más manoseando y estrujando las nalgas de Mar'a. "Ahora qu'tate la blusa, puta que quiero ver las tetas." Mar'a quer'a negarse de nuevo, pero no lo hizo, en cambio quito las manos de su horca y rápidamente soltó los botones de la blusa y se la saco dejándola caer al piso. "Date vuelta." Mar'a se giro de nuevo, pero esta vez no bajo las manos, para proteger sus zonas 'ntimas, más bien coloco las manos en sus caderas, y apunto al hombre sus grandes tetas, que quer'an salirse de sus sostenes rojos de media taza. Los niños ya se estaban acostumbrando a la presencia del extraño que estaba siendo entretenido por su mamá. El hombre hab'a dejado el revólver sobre una mesita cercana. Los niños y Mar'a lo hab'an notado. Esto la tranquilizó. El hombre manoseo las tetas de Mar'a unos segundos. Entonces él mismo giro a Mar'a, y dándole una fuerte palmada en las nalgas que la hizo saltar y chillar. La mando a la cocina. En la cocina Mar'a hab'a notado que ya no ten'a miedo, extrañamente en cambio se sent'a cachonda. Sent'a que la horca de su mini panty estaba mojada. Preparó al hombre una comida rápida, ante la mirada atenta de él y de sus hijos, que desde la posición donde estaban pod'an verla. Después de preparar el alimento Mar'a llevó el plato a la sala y lo coloco sobre la mesita. El hombre hab'a puesto la pistola sobre su regazo. El hombre aparto la mesa, entonces se sentó en la orilla del asiento donde estaba sentado, abrió los botones de su bragueta, y expuso su miembro flácido que parec'a un salchichón, de unos 25 cent'metros de largo y al menos cinco de grueso. Los ojos de Mar'a se abrieron, de asombro y temor nuevamente. Ella pensaba que quizás el hombre comer'a la cena y luego tomar'a el dinero y entonces abandonar'a la casa, pero no. Más bien estaba all' mostrando a todos un palo del tamaño que ella nunca se imagino, que podr'a existir. Ella sab'a que el miembro de su esposo era pequeño y delgado, pero ni en sus más húmedos sueños se pudo imaginar uno de este tamaño. Este era grande y grueso y estaba flácido, ella se maravillo que tamaño tendr'a cuando estaba erecto. Ella levantó la mirada del miembro y volteo a mirar a sus hijos. Lo que vio, la perturbó aún más. Tanto Juanita como Patty estaban hipnotizadas con ese palo. En cambio, Pablito y Pedrito ten'an la mirada puesta sobre ella, como si quisieran adivinar que estaba pensando. El hombre la saco de sus pensamientos cuando gritó: "¡No te quedes ah' parada perra! Agáchate en cuatro y venga acá." Mar'a nuevamente dirigió la mirada a sus hijos y noto que todos parec'an interesados en ver lo que ella iba hacer. No percibió miedo en lo más m'nimo en ninguno de ellos. Entonces pensó que no ten'a caso luchar. Ella se agacho y se puso en cuatro, y agachas fue al regazo del hombre hasta que pod'a oler el fuerte olor del miembro. El hombre tomo un manojo del cabello de ella y la empujo hac'a él hasta que la cabeza estaba completamente sobre la horca. Él dijo: "Ahora lame mi guevo como una buena perra." Mar'a levantó la mirada a él como si quisiera suplicar, entonces a sus hijos. Pedro y Pablo ten'an una sonrisa dibujada, mientras Patty y Juanita, estaban en expectativa, esperando. Ella sab'a cómo complacer a un hombre con la boca, ella hab'a mamado el guevo de su esposo incontables veces, y algunas veces hasta lo hab'a hecho all' en la sala, con él sentado justo donde estaba sentado el hombre. También aquella tarde hab'a ganado el contrato con Don Manuel, utilizando su boca. Mar'a aguanto la respiración un poco mientras se acostumbraba al fuerte olor que emit'a la horca del hombre. Entonces t'midamente abrió la boca y empezó a dar pequeñas lamidas al salchichón que sobresal'a de la horca. El tipo entonces agarro el plato y lo coloco sobre la espalda de Mar'a y empezó a comer. Los niños no dejaban de mirar a su mamá lamiendo, aquel trozo de carne. Al rato la excitación nuevamente se apodero de Mar'a y empezó a lamer con entusiasmo. El hombre empezó a sentir el efecto de las mamadas, y el miembro se puso erguido alcanzando, unos treinta cent'metros y unos ocho cent'metros de grueso. Mar'a estaba demasiado excitada para mostrar algún tipo de recato, entonces se dispuso a lamer aquel bello espécimen descaradamente, no solo lamiendo sino tragando el miembro hasta donde pod'a. Ella hab'a aprendido el arte de la garganta profunda, los escasos quince cent'metros de su esposo ella los pod'a tragar hasta que los labios tocaban las bolas, y luchaba por tragar lo más que pod'a con este. Mar'a no se hab'a dado de cuenta, o no le importaba ya, que las tetas colgaran libres mientras bat'an de lado a lado, como peras de boxeador. El hombre se inclinó hacia adelante y empezó a bajar las mini pantaletas, Mar'a abrió las piernas para permitirle mejor acceso. Al rato la mini panty estaba en las rodillas de la mujer. El hombre manoseaba las nalgas y coño de Mar'a mientras com'a y limpiaba las manos llena de grasa y comida. El hombre retiro el plato vació de la espalda y entonces se dedico a manosear todo el cuerpo de Mar'a. Ella empezó a responder a las caricias meneando el cuerpo y caderas al ritmo de sus mamadas. Entonces como a los veinte minutos de mamar un chorro de semen se disparo directamente a su garganta, Mar'a trago hasta que no sal'a ninguna gota, y continúo hasta que el miembro estaba flácido de nuevo. Entonces lo soltó y con ojos vidriados de excitación, levantó la mirada al hombre, como si esperara otra orden. En ese momento se escucho a los lejos y acercándose en el camino una sirena de polic'a. El hombre se levantó, empujando a Mar'a al suelo, y salió de la casa huyendo. Cuando sintieron que la patrulla pasaba frente a su casa, los niños corrieron a la ventana. Entonces vieron cuando pasaba la patrulla. Cuando los niños retornaron a la sala, su mamá hab'a recogido todo su equipo que estaba regado en el piso y hab'a corrido al baño. Mar'a salió del baño después de haberse bañado y puesto una vieja bata de casa, como las que normalmente usaba. Los niños estaban en la sala todav'a descre'dos de todo lo que hab'an visto. Cuando Mar'a fue a la sala todas las miradas se posaron en ella como si quisieran una respuesta a una pregunta. Mar'a fue directamente a la ventana y miro hacia la carretera. Pero solo hab'a oscuridad y silencio all' afuera. Mar'a regresó a la sala, se sentó y dijo: "Si la polic'a viene para acá, ustedes no han visto a nadie. Yo no quiero problemas, con nadie. Más bien debemos dar gracias a Dios que nada paso." Los niños no atinaban a decir nada, entonces Mar'a se dio cuenta que ellos quer'an era saber sobre su conducta, momentos antes. "Porque me miran as'. Yo hice lo que cualquier madre de cuatro en una situación como esta hubiera hecho." Pero el silencio de los niños parec'a preguntar más que las palabras. "Ok está bien. Exagere un poco, pero no me culpen. Cuando vi que ustedes no estaban asustados, sino más bien interesados en lo que estaba pasando. Me sent' débil, y me deje llevar por mi deseo, además, yo ya tengo meses sin recibir el cariño de un hombre. Perdón ok." "Fue Cool Mami." Dijo Patty en tono travieso. Todos re'an. Entonces la tensión bajo. "A m' me gustar'a que regresara de nuevo", dijo Patty de nuevo. "Que estás diciendo Patty" rápidamente comentó Juanita. "A m' también dijo Pablito." "QUEEE estás loco." Dijo de nuevo Juanita. "Cálmate Juanita, yo te vi también y a Patty, y vi como no apartaban la mirada del pene de ese hombre. Entonces deja de fingir. A m' también me impresionó ese pene. El de su papá no era tan grande, pero les juro que este debe ser muy dif'cil de encontrar, dicen que los negros son bien dotados. Pero definitivamente este hombre tiene uno de caballo. Bueno ya es suficiente de hablar. Es hora de cenar y dormir, porque mañana tienen clase y yo tengo que trabajar" Capitulo tres Al siguiente d'a Mar'a se enteró por la radio, que el reo que se hab'a escapado hab'a sido de nuevo encerrado. Entonces después de visitar al cliente para aquel d'a y convencerlo utilizando sus armas para reanudar de nuevo los negocios con ella. Ella se dirigió a la penitenciar'a del pueblo. Al entrar se dirigió a la oficina de información. De la oficina de información la remitieron a la oficina de retenidos. Cuando ella llegó a esa oficina, la puerta estaba abierta y una señora de unos cincuenta años estaba sentada detrás de un escritorio, revisando unos documentos. Mar'a se presentó y dijo que buscaba a un presidiario, llamado Arturo Gutiérrez que era familiar lejano de su esposo. Ella ten'a entendido que estaba retenido en esa cárcel. (Ella sab'a su nombre por las noticias de la radio) La señora buscó en la computadora que ten'a enfrente. Después de mirar a Mar'a fijamente por unos instantes. "Dijo: S' señora ese ciudadano está pagando su condena aqu' en este recinto. ¿Por qué esta usted interesada en él?" Mar'a noto el tonó extraño de la mujer, como si sospechara algo. Entonces rápidamente, tramo algo, y dijo: "Mi esposo me hab'a contado, que ellos eran primos y hab'an crecido juntos en el pueblo, pero un d'a su primo Arturo hab'a dejado el pueblo y nunca más supo de él. Pero un d'a él se enteró que estaba preso, pero nunca supo donde. Pero hoy escuche en las noticias que un tal Arturo Gutiérrez se hab'a escapado de la cárcel, y lo hab'an aprendido de nuevo. Entonces me acorde de lo que me hab'a dicho mi difunto esposo. Y quer'a salir de duda si este hombre era su primo." "¿Que sabe usted de este hombre?" "Nada solo lo que ya le dije." "¿Su esposo le dijo alguna vez como era su f'sico?" "No mucho, sólo que era moreno." La señora se quedo pensativa por un momento, entonces dijo: "Señora Mar'a. Creo que el primo de su esposo es la persona que esta privada de la libertad aqu'." "¿Puedo saber porque está el señor Arturo, Preso La señora estuvo unos instantes mirando en el computador. Entonces contesto: "Es por violación, y ahora por intento de fuga." "¿Tiene algún familiar cercano que lo viene a visitar?" La señora de nuevo reviso su expediente en la computadora, entonces dijo: "Tiene su esposa y una hija de 15 años de edad, pero viven en el pueblo vecino. Su esposa ha venido unas veces a visitarlo en los cinco años que ha estado retenido." "¿Puedo saber la dirección de su esposa, me gustar'a conocerla? Creo que a mi esposo le hubiera encantado conocer a la familia cercana de su primo Arturo." Dar direcciones a terceros, de los presos no estaba permitido pero Mar'a hab'a sido tan convincente que la señora le dio la dirección, pero le advirtió que no le dijera a nadie. El pueblo cercano estaba a unos cuarenta minutos en carro. Entonces decidió que ir'a al siguiente d'a. Al siguiente d'a después que los niños salieron para el colegio y ella quedo sola en la casa se alisto para ir a visitar a la familia de Arturo. Ten'a algunos clientes en ese pueblo. Después de visitar un cliente y asegurar una venta, preguntó por la dirección y salió para allá. El lugar estaba a las afueras del pueblo por una carretera de tierra. Parec'a ser una zona de granjas, cuando se acercaba al lugar, vio una pequeña casita de barro. Cuando Mar'a estacionó la camioneta al lado de la carretera y bajo, un perro grande empezó a ladrar desde la casa, dando la advertencia. Entonces una mujer de tez morena se asomo a la puerta, cuando vio a Mar'a y supo que no representaba ninguna amenaza, mando a callar al perro. Mar'a se acerco a la casita. Cuando estuvo frente a la puerta pudo ver que la mujer era más o menos de su edad, estaba en un estado bastante avanzado de preñez. Aunque la mujer hab'a tenido una vida dif'cil, aún as' se pod'a ver que conservaba un buen cuerpo a pesar que estaba desaliñada. La mujer vest'a una vieja bata de casa, que apenas si le cubr'a medio muslo, abrazado a su pierna derecha estaba también un pequeño niño desnudo. Mar'a vaciló un momento, entonces después de unos segundos dijo: "Buenas tardes señora. Mi nombre es Mar'a de Hernández y vivo en San Jacinto. Y estoy aqu' por motivo de su esposo." La señora miro un momento a Mar'a, pensó que quizás era alguna especie de empleada del gobierno, que ven'a de la cárcel a traerle noticias de su esposo, invitándola a entrar a la casa. Mar'a siguió a Ana dentro de la casa, el lugar era pequeño con una sala grande que serv'a de cocina y comedor y dos cuartos, y un baño. Ana trajo una silla del comedor y la puso a un lado de Mar'a para que se sentara, mientras ella permanec'a de pie, y el pequeño que nunca se apartó de ella. Mar'a dijo, después de sentarse: "Yo no trabajo para la penitenciar'a, pero ayer conoc' a su esposo. ¿Usted sab'a que él se escapo de la cárcel, aunque ya lo aprendieron de nuevo?" Mar'a agrego: "Ayer cuando iba huyendo de la polic'a irrumpió en mi casa, pero cuando escucho la sirena de la polic'a salió corriendo, y esta mañana me entere por las noticias que fue aprendido de nuevo." Ana empezó a sentir temor. Ahora supo que su esposo se hab'a metido en más problemas, y probablemente, esta mujer ven'a a informarle de alguna demanda, contra su esposo. Su rostro se puso blanco de miedo. Mar'a noto el miedo de Ana, entonces agrego: "S' señora su esposo podr'a pudrirse en la cárcel, si yo lo denuncio." "No señora Mar'a, por favor no haga eso, mi hija y yo estamos esperando que salga de la cárcel, para que se haga cargo de nuevo. Desde que él está en la cárcel, mi hija ha tenido que trabajar duro para mantener a su hijo, y a m'. Pero cada d'a es más dif'cil para nosotras, las cosas van de mal a peor. Por favor señora." Mar'a se quedo pensativa mirando a Ana, entonces dijo: "¿Cómo es que él fue a la cárcel?" "Todo fue su culpa. Yo se que él es un bastardo pervertido, pero nosotras necesitamos de él, ahora." "Si usted me dice que fue lo que paso yo podr'a considerar, si lo demando o no." "Nosotros éramos una familia, y éramos felices hasta que nos mudamos para acá hace unos seis años. Mi esposo empezó a trabajar en la hacienda de Don Alejandro, como capataz. Todo iba bien, hasta que un d'a, llego borracho y acompañado de unos trabajadores de la hacienda. Mi niña y yo dorm'amos, pero él me obligo a levantarme y atender a él y a sus amigos. Me obligo a servirles cerveza, y entonces me sentaba al lado de él hasta que alguno terminara su cerveza y yo le serv'a otra. Yo me sent'a como cualquier cabaretera del pueblo. Después de aquel d'a, esta situación se volvió una rutina los fines de semana, yo empecé a acostumbrarme. Yo empecé a disfrutar de sus chistes vulgares y obscenos, incluso empecé a tomar cerveza con ellos, cuando estaba mareada, incluso los animaba a contar más chistes. Mi esposo se emborrachaba de tal manera que perd'a el control y empezaba a tratarme como si yo fuera una prostituta. Cuando se refer'a a m', era de `zorra', `perra', a veces hasta me dec'a `puta' delante de sus amigos. Al siguiente d'a, después que se le pasaba la borrachera me dec'a que no se recordaba de nada que haya dicho o hecho. Me fui acostumbrando a sus vulgaridades. Un d'a después que estaba borracho me obligo a vestirme como una prostituta, yo al principio me negué, pero entonces los amigos empezaron a retarme y a decir cosas que me hicieron sentir muy cómoda. Aquella noche después de vestirme de prostituta, empecé a sentir un sentimiento de libertad y placer, entonces empecé a actuar como tal, para todos los hombres. Los hombres empezaron a tomar libertades conmigo, y a manosearme. Yo miraba a mi esposo, pero a él no le importaba. Empecé a desear que llegara cada fin de semana. Luego de unas semanas, yo ya estaba completamente descarada, incluso empecé a usar faldas cortas sin pantaletas, los tipos me sentaban en sus regazos y manoseaban mi coño, yo en cambio acariciaba sus guevos. La mayor'a eran hombres negros y estaban bien dotados, pero ninguno igualó a mi Arturo. Mi esposo parec'a disfrutar viéndome en semejante vulgaridad. Y yo lo disfrutaba aún más. A más cosas perversas me hac'an yo más lo disfrutaba. Un fin de semana se presentaron con un perro gran danés que era uno de los perros guardianes de la hacienda. También tra'an un collar de perro y una cadena, unos tacones altos, una minifalda de cuero, y una cosa que parec'a un sostén de cuero, pero las tazas eran unas tiras. Yo pregunté qué significaba todo eso, pero nadie me dio una respuesta cre'ble, en cambio echaban bromas entre ellos. Yo al rato también estaba riendo y llevándole la corriente. Yo ya hab'a perdido cualquier decencia que me quedara. Después que todos estaban borrachos y yo estaba alegre y excitada, portándome como una vulgar puta mi marido saco las cosas de la bolsa y me las tiro, y me dijo que me las pusiera. Ya no me importaba, as' que corr' al cuarto que estaba vació y me puse aquel equipo, la falda escasamente cubr'a mis nalgas, y me quedaba estrecha, las tetas parec'an estar amarradas con las tiras de cuero alrededor, yo me sent'a desvergonzada, entonces sal' meneando mi culo y mostrando mis tetas con orgullo, los hombres me aplaudieron. Yo me sent' más sucia, e incluso les di la espalda y me agache tocando mis dedos de los pies con mis manos, y mis piernas estaban completamente abiertas, para darle una buena vista a mi coño peludo, y mojado. Entonces un hombre saco, el collar de perro y me lo puso en el cuello, y otro amarro la cadena al collar. Después de eso, los hombres me llevaron all' al patio, cerca de donde usted dejo la camioneta. A m' no me importaba, aunque era luna llena y todo estaba iluminado pero a esa hora nadie pasa por la carretera. Entonces un hombre soltó el perro que hab'an amarrado a la entrada de la casa. El perro sab'a lo que hac'a, porque este inmediatamente se abalanzó sobre m' tumbándome a la grama, y empezó a bombear sobre m', como si yo fuera una perra. Yo me sent'a como una perra y empecé a actuar como tal, al poco tiempo el perro me estaba cogiendo a la vista de todos, y yo amaba todo aquello. Luego el quedo atado conmigo y as' duro por unos minutos. Después bombeo toda su carga en mi coño. Al rato se separó y se fue a echar, yo quede all' como en un trance, después los hombres empezaron a cogerme, todos a la vez, por cualquier hueco que yo ten'a, mientras mi esposo miraba. Desde aquel d'a, yo empecé a sentirme como una vulgar perra, y puta y empecé a actuar como tal. A mi esposo no le importo, empezó a cambiar conmigo y ya no me tocaba. Pero entonces, empezó a dirigir sus cariños a mi pequeña niña, que para entonces ten'a diez años de edad. Sus tetas estaban floreciendo, aunque para entonces su cuerpo parec'a como de trece años. Yo lo note pero no me importo, porque de alguna manera, sent'a que no ten'a vergüenza para reclamar algo. Pero un d'a mi pequeña, le empezó a crecer la barriga y entonces supe que estaba embarazada. Yo ya sab'a de quien era. Yo le hab'a perdonado que me hubiera convertido en una prostituta, pero aquello era demasiado. Entonces fui y lo denuncie. El fue preso, y todos sus amigos se perdieron de por aqu' por temor. Entonces mi vida retornó de nuevo a lo que era antes. Como pude ayude a mi hija que tuviera su hijo. Pero las cosas empezaron a ponerse mal, entonces mi hija dejó de estudiar y se fue a trabajar para sustentar la casa. Aqu' no hay trabajo, y terminó trabajando de noche en un paradero, atendiendo a borrachos y camioneros. Mi esposo estaba por salir de la cárcel, no entiendo porque quer'a escaparse, ahora no se que pasara, pero yo ten'a la esperanza que regresara, y entonces volver de nuevo a tener nuestra vida normal como era antes, por eso le ruego señora que no lo denuncie." Mar'a estaba cachonda por la historia que le hab'a contado Ana, le hubiese gustado descascarar sus pantaletas y masturbarse all'. Después de pensar un poco dijo: "¿Y tu hija donde está?" "Ella aún está durmiendo, porque trabaja hasta tarde en la noche." "¿De quién es el hijo que usted lleva?" "Es de mi esposo, yo sal' preñada, en una visita que hice a la cárcel." Mientras hablaban la puerta de uno de los cuartos se abrió, entonces una joven que parec'a mayor para tener quince años de edad, salió con un paño cubriendo su desnudez. La jovencita estaba preñada con lo que parec'a de unos seis meses de embarazo. Mar'a y la joven embarazada se miraron, entonces Anita miro a su mamá diciendo: "¿Quien es esta señora mamá?" "Es una señora que vino a traernos noticias de tu papá. Su nombre es Mar'a. Señora Mar'a. Ella es mi hija Anita." Anita y Mar'a, se saludaron informalmente, mientras sacud'an sus manos. Entonces Anita salió de la casa a la parte de atrás, al baño. Mar'a siguió con la mirada a Anita hasta que dejo la sala, entonces dirigió la mirada a Ana que estaba sentada en otra silla de la mesa y con el niño sentado en su regazo. Entonces Mar'a dijo: "Me puede regalar un poco de agua." Ana se volteo para bajar el niño de su regazo. La mirada de Mar'a se enfoco en la horca de Ana. Ana se levantó a la cocina por un vaso con agua, mientras el niño se quedo sentado en la silla, donde estaba su abuela. Cuando Ana regresó se dirigió a la mesa al lado de Mar'a para colocar el vaso de agua sobre la mesa. De repente la mano de Mar'a tomo por las caderas a Ana, atrayéndola hac'a ella. Y antes que Ana reaccionara otra mano levanto la falda de su bata, exponiendo su trasero desnudo. Rápidamente la mano de Mar'a bajo a la horca y toco el coño peludo de Mar'a, entonces dijo ante la mirada atónita de Ana: "As' que tú estabas jugando con este sucio coño, antes que yo llegara, déjame adivinar. ¿No me digas que estabas jugando con el perro, de razón salió de aqu', y que hac'a el niño, mientras tanto?" Ana estaba paralizada por el sorpresivo cambio de actitud de la mujer. Ella no atinaba que hacer, porque en verdad la mujer ten'a razón, ella estaba jugando al perro y la perra en calor, mientras su nieto jugaba y chupaba de sus tetas. Mar'a no soltaba su coño, en cambio lo aporreaba con su mano, Ana quer'a alejarse, pero la excitación que flu'a por su cuerpo no la dejaba. Como pudo ella atino a decir: "Por favor señora Mar'a suéltame, que mi hija puede entrar en cualquier momento." "Tengo razón verdad perra. No me mientas." "Si señora." "Si señora que cosa. Perra." "Yo estaba jugando con el perro, mientras mi nieto jugaba con mis tetas." "¿Entonces porque quiere que regrese tu pervertido marido? Déjame adivinar: a usted le importa un comino que tu hija tenga que trabajar duro por usted y el niño. ¿Lo que quiere es que tu marido regrese, para que te trate como una vulgar perra de nuevo, verdad?" Con voz entrecortada, y ya con el calor que flu'a por su cuerpo ella respondió casi gritando, sin importar si su hija escuchaba: "Si, quiero que mi marido me trate como una vulgar perra." "Tu hija sabe que usted juega a la perra, mientras ella no está. Y que esta pervirtiendo a su hijo." "Ella siempre a amado todo esto, antes de quedar preñada, de Danielito. Cuando era apenas una niña de nueve, se levantaba con la bulla de los borrachos y se quedaba mirando a través de un hueco que tiene la pared de su cuarto, todo lo que nosotros hac'amos, incluso me dijo que el d'a que salimos a la calle con el perro, ella salió sin que nadie la viera. Vio todo y después no dejaba de masturbarse. Después que su papá estaba en la cárcel, me contó que ella fue la que sedujo a su papá, y se sent'a culpable porque él estaba en la cárcel. Aunque nosotras jugamos, no es lo mismo que cuando estaba Arturo." Mar'a siguió fastidiando el coño y las nalgas grandes de Ana, entonces con voz de excitación y burla dijo: "¿Cuánto desea que tú esposo este aqu', con usted y su hija?" "Mucho, har'a lo que sea porque él esté aqu' con nosotras." "¿Cualquier cosa? ¿Te gustar'a que yo no lo acusara, verdad?" "Si señora, yo y mi hija le estar'amos agradecidas de por vida." "Sin embargo es una pena, porque aunque yo me olvide del asunto, su pervertido esposo tendrá que permanecer quien sabe cuánto tiempo más por tratar de escapar." La mujer dejo de menear sus caderas. Entonces con tono triste. Dijo: "Si es cierto." "Sin embargo tengo una propuesta para ustedes. Será mejor que vaya por tu hija y le cuente porque estoy aqu', d'gale todo con detalles y después yo quiero que estén juntas, para que oigan lo que tengo que decir." Con eso Mar'a soltó a Ana y dándole una palmada que le dejo marcada la mano en la nalga, la empujo fuera. Ana dio un salto en el sitio, por la picada que le dejo el manotazo. Sin embargo aún asombrada por lo que Mar'a dijo, ella se apuro afuera por Anita. Cuando regresaron, tanto madre como hija. Mar'a estaba sentada esperando. Madre e hija se acercaron. Ana ya se hab'a acostumbrado a Mar'a, sin embargo Anita aún estaba recelosa. Mar'a dijo, después que las dos mujeres estaban de pie cerca de ella: "¿A ver Anita, te gustar'a que tu papá, regresara pronto para que este con ustedes?" "Si, señora me gustar'a mucho." "Si yo les digo que yo puedo sacar a su esposo de la cárcel para que este con ustedes lo más pronto posible, ¿les gustar'a eso?" Madre e hija se miraron una a otra, incrédulas. Sin embargo Ana dijo: "Nos gustar'a mucho, señora. Pero nosotras no tenemos dinero para pagarle." "No es necesario que ustedes tengan dinero, yo les propongo sacar a su esposo de la cárcel a cambio de unos favores, además ustedes podr'an ir a vivir a mi granja, y su esposo trabajar'a para m'. ¿Qué les parece?" Las dos mujeres no pod'an creer lo que oyeron. La expresión de sus rostros dijo montones, entonces Mar'a agrego: "Me parece que están de acuerdo. Bueno lo que yo quiero es tomar unos videos de ustedes." Madre e hija dijeron al un'sono. "¿VIDEOS?" "Si Videos. No se hagan. El material que ustedes hacen se puede vender a buen precio. Por supuesto que yo escogeré mis clientes. Yo no voy a tomar riesgos. As' que ustedes no tienen de que preocuparse. Tal vez hasta ustedes podr'an ganar dinero, si todo va bien. Y puedan salir de la miseria. ¡Digan de una vez, lo toman o lo dejan, Porque ya me estoy cansando de tanta habladera!" Ana dijo: "Por mi está bien. Yo no tengo nada más que perder. ¿Qué dices Anita?" "Por mi está bien mamá, si usted está de acuerdo. ¿Pero que puede pensara papá?" "Me importa un rábano lo que tu papá piensa. Él nos metió en todos estos problemas. Si no le parece. Que se vaya al carajo." "As' se habla Ana. Bueno ya basta de hablar, Entonces estamos de acuerdo. Toda esta charla me tiene demasiado excitada. Porque no me muestran algo de lo que ustedes hacen cuando están a solas." Ana miraba a su hija. Luego de unos segundos, empezó a desabotonar su bata, y la dejo caer al piso, quedando completamente desnuda, mostrando su avanzada barriga que parec'a que iba a explotar. Sus tetas grandes colgaban como dos melones. Y sus pezones eran negros y grandes y alargados. Después fue donde su hija y soltó la toalla que la cubr'a, dejándola caer al suelo. Anita estaba un poco rellena, pero sus kilos de más, la hac'an más apetitosa. Las tetas eran grandes casi como las de su madre y, ten'a aureolas grandes alrededor de sus pezones, su coño estaba afeitado completamente. Estaba hinchado, con labias grandes. Su barriga redonda. Ana le dio a su hija un beso profundo como de amantes, entonces le dijo: "Cariño hoy te prepare tu comida favorita. ¿Por qué no vas por el mantel, mientras yo preparo las cosas? Ok." Anita fue al cuarto y trajo un mantel de plástico que lo extendió en el piso, ante la mirada excitada de Mar'a. Ana trajo una olla de pasta y la coloco en el mantel, luego Ana y Anita fueron de nuevo a la cocina y trajeron, la salsa, mayonesa, pan, y otras cosas que pusieron en el mantel. Entonces llamaron a Danielito, y los tres se sentaron en el mantel. Echaron la salsa y mayonesa en la pasta y revolvieron. Después que estaba todo preparado. Ana saco pasta con la mano y la dio en la boca a Danielito, también Anita hizo lo mismo. Mientras Danielito tragaba, ellas com'an la pasta también, una le daba a la otra. Al rato acostaron a Danielito en el mantel boca arriba y luego vaciaron sobre su pequeño cuerpo, pasta desde los pies a la cabeza. El niño parec'a acostumbrado a tal trato. Después las dos mujeres com'an directamente con sus bocas la comida regada sobre el cuerpo del niño. Incluso lamian todo alrededor de su cuerpo. Ana se concentro en la entrepierna del niño y com'a, lam'a y chupaba el pequeño pene de su nieto. Después voltearon de espaldas al niño e hicieron lo mismo. Ana de nuevo se concentro en las nalgas del niño, limpiando todo alrededor. Después las mujeres empezaron a untarse la comida por todo su cuerpo, y empezaron a jugar entre ellas, lamiendo, a veces una se llenaba la boca y luego se la daba a la otra en la boca, a veces incluso al niño. Al rato ten'an una org'a las dos mujeres. Sin importarle que Mar'a estaba mirando. Después de unos treinta minutos, madre e hija y nieto quedaron echadas en el mantel, todos sus cuerpos cubiertos de comida. Mar'a se levanto. Diciendo: "Okey muy pronto tendrán noticias de su esposo." Con eso salió. Capitulo cuatro Mar'a estaba súper cachonda cuando llego a la casa, sus niños estaban mirando la tv, ella los saludo y luego se disculpo, porque iba a tomar un baño. Toda la acción en la tarde en la casa de Ana la ten'an al borde, por lo que inmediatamente que entro en el baño, cerró la puerta y se masturbó fieramente, construyendo rápidamente un orgasmo. Mientras tanto en la sala los niños hab'an visto a su madre entrar al baño. Luego de estar seguro que ella no los escuchaba, Juanita dijo: "No se ustedes pero a m' me parece que mamá está actuando raro desde ayer." "A m' también" dijo rápidamente Patty. "A m'," "A m'." dijeron casi al un'sono Pedrito y Pablito. Patty añadió: "A m' me parece Cool, ella siempre estaba regañando pero desde ayer, no nos ha regañado." "Yo creo que ella necesita un hombre." Dijo Pablito, con su manera de hablar. Patty dijo casi sin dejar de hablar a su hermano: "Mi amiga dice que cuando una mujer está buscando un hombre se porta my cariñosa, o es muy regañona. Yo creo que mi mamá está muy cariñosa." "Si bueno, parece que el tipo de anoche la dejo cachonda. Y yo estoy casi segura que ahorita esta masturbándose, pensando en el palo de ese tipo." "Juanita que estás diciendo. Ver para creer." Dijo Pedrito. "Lástima que el tipo se fue tan rápido, me hubiese gustado ver más acción. De seguro el tipo hubiera cogido a mi mamá." De nuevo Patty dijo sin pensarlo mucho. "De seguro a Pablito y a Pedrito le hubiera gustado eso." Dijo Juanita. "Lo dudas acaso." Dijo Pablito. Mientras hablaban entre ellos escucharon la puerta del baño abrirse y a su mamá salir envuelta en un paño, que escasamente cubr'a sus nalgas. Ellos nunca hab'an visto a su mamá salir del baño de esa manera, siempre iba en una bata de casa que casi llegaba a los tobillos. Los niños se miraron entre s' como si quer'an decir: ¡tenemos razón! Su mamá fue a su cuarto, y al rato salió con una bata como era su costumbre. Cuando estuvo frente a ellos. Dijo: "Bueno niños, ¿Cómo estuvo la escuela hoy?" Todos asintieron con su cabeza como era su costumbre. Entonces Juanita dijo: "¿Mamá que paso con el tipo, que estaba huyendo de la polic'a?" Mar'a miro a Juanita con conocimiento, entonces dijo: "Escuché que lo aprendieron de nuevo. ¿Por qué preguntas?" "Pensé que ir'a a la polic'a a poner la denuncia." "¿Para qué? Es mejor tener la polic'a fuera de nosotros." "¿Mamá pero el tipo te estaba violando?" "Bueno casi. Pero que importa ya paso." "¿Mamá, eso sonó extraño?" Mar'a miró la cara de sus niños, como si todos estaban interesados en cada palabra que ella dec'a. "Si yo digo que me sent' un poco decepcionada. ¿Eso estar'a mal para ustedes?" Los niños se miraron entre s', luego como una sola voz dijeron: "No, claro que no" Patty agrego: "Lo de anoche estuvo Cool. Un poco asustada. Pero nada más." Mar'a cepillo la cabeza de la pequeña Patty, entonces dijo: "Yo también estaba un poco asustada." "¿Mami cuando viene de nuevo ese tipo?" "No, creo que venga más cariño. El está preso de nuevo." "Jajá, jajá Pablito y Pedrito se quedaron con las ganas." "Cállate Patty ¡Sapa!" Dijo Pedrito. "Basta de peleas entre ustedes, niños. A ver Patty. Termina lo que quieres decir. ¿Con las ganas de qué?" "Con las ganas de que el tipo te cogiera, y ellos ver todo." Las manos de Juanita fueron a la boca, mientras esperaba lo que fuera hacer su mamá. Ella nunca hab'a permitido que ellos dijeran palabras vulgares. Pero en vez de un regaño o darle una bofetada, como hab'a hecho con ella cuando ten'a la edad de Patty y se le sal'a una palabra vulgar. Su mamá sonrió, por la travesura de su hermanita. Entonces dirigiéndose a Pedrito y Pablito, dijo: "¿Ustedes niños han visto a una mujer desnuda?" "Bueno no, a una mujer madura, pero yo he visto a Juanita y a Patty desnudas." Dijo Pablito. "¡Cállate Pablito! Mentira mamá." Dijo juanita. "Es verdad mamá. El otro d'a ella estaba bailando desnuda en su cuarto. ¡No me digas que no, juanita porque te vi! Ella estaba en la computadora. Cuando se dio cuenta que yo la vi entonces cerró la puerta. Y a ti también te vi Patty, también en la computadora." La cara de Juanita se puso roja como una remolacha. Quer'a salir corriendo a su cuarto. Era verdad lo que dec'a su hermano. Una vez él y Pedrito la vieron desnuda mientras ella estaba en la computadora. Aquel d'a hab'a olvidado cerrar la puerta, porque sus dos hermanos estaban fuera jugando fútbol, pero empezó a llover y ella no se dio cuenta. Entonces cuando ellos regresaron a la casa. La vieron desnuda. Ella y su hermana les gustaba andar desnudas por la casa cuando están a solas. Pero ellas prometieron que ese ser'a su secreto. Ahora su mamá sab'a el secreto. Y el miedo recorr'a por su cuerpo. Mar'a no estaba sorprendida por lo que hab'a escuchado. Ella sab'a que sus dos hijas eran exhibicionistas, justo como era ella. Ella también a veces andaba desnuda por la casa, cuando estaba sola. Y se imaginaba que alguien llegara a la casa, de repente y no le diera tiempo de vestirse. La visión de verse desnuda, delante de otra persona extraña, incluso sus hijos, la hac'a temblar de emoción. Mar'a respiro profundo, entonces dijo: "Uhm, parece que aqu' hay una casa llena de secretos. Me alegra que estemos siendo sinceros. ¿A ver niños, ustedes no tienen ningún secreto?" Los dos jovencitos se miraban entre s'. Como si uno le dijera al otro con la mirada, cuidado con hablar. Mar'a vio la mirada de confesión, entonces agrego: "No tienen de que temer, aqu' todas estamos siendo sinceras. Yo ya les dije que soy un poco exhibicionista. Y sus hermanas también, parece que comparten mi fetiche. Pero de ustedes no sabemos nada. ¿Verdad niñas, que cualquier cosa que nosotras sepamos, de nosotras y de ellos, ninguna otra persona lo va saber?" Juanita, ya se hab'a tranquilizado. Parec'a que a su mamá no le importaba. Entonces ella y Patty se miraron y con una mueca, asintieron lo que su mamá acababa de decir. Mar'a todav'a ve'a el temor en los niños. Entonces con una voz, que implicaba mando, como si estuviera regañando dijo: "¡Que les pasa, ustedes tienen bolas, o no!" Pedrito entonces dijo: "Bueno es que a nosotros nos gusta también jugar desnudos en los arbustos que están en la colina." "¿Qué hacen ustedes desnudos en la colina? Ustedes dicen la colina que esta próxima de la granja donde vive la zorra de Doña Elena que parece que tiene un hobby por estar embarazada. En el tiempo que la conozco ya ha dado a luz como a cinco." Patty dijo: "Ya tiene ocho hijos" "Y el mayor debe estar de la edad de Pedrito. ¿Bueno y que hacen ustedes desnudos en esa colina, detrás de los arboles, Acaso masturbándose mientras están fisgoneando para la casa de Doña Elena?" "S', bueno lo que pasa es que donde estamos se ve completico el lavandero que está al lado del baño de los obreros. Y parece que doña Elena lava cada tarde cuando los obreros se van a bañar." Pablito continuo: "Si mami. Ella siempre está lavando cuando los obreros van a bañarse." "¿Y qué tiene que ver que ella lave cuando los obreros se están bañando? Acaso ustedes tienen un fetiche por las mujeres que lavan." "No. Claro que no. pero siempre uno de los obreros va donde está Doña Elena y la coge all' mismo, detrás del lavandero, antes de meterse al baño." "Y siempre es uno diferente. Mami" "Yo siempre pensé que esa mujer era una zorra y no me equivoque. Y ustedes se masturban mientras ven a esa perra ser cogida por uno de sus obreros. ¿No es as'?" "Al principio, solo mirábamos y nos regresábamos a la casa. Pero el otro d'a que no tuvimos clase, fuimos en la mañana. Entonces cuando llegamos." Pablito añadió: "Doña Elena y sus hijos estaban jugando desnudos en la grama del patio. Todos desnudos, mami." "¿Qué estaban haciendo desnudos?" "Estaban jugando con una manguera, pero mientras, doña Elena lavaba el burro, que ella siempre lleva para el pueblo." "también estaba desnuda. ¿No es as'?" "Si. Entonces nosotros nos pareció muy divertido y nos desnudamos, también. Después de ese d'a nos gusta estar desnudos, escondidos entre los árboles. Entonces cada vez que estamos en el campo y sabemos que nadie nos ve, jugamos desnudos." La conversación terminó y cada uno se dedicó a sus cosas de costumbre, mientras Mar'a fue a preparar la cena. Después que los niños estaban acostados después de cenar, Mar'a fue a la salita donde estaba el pequeño altar de su esposo. Después de cambiar las flores y las velas, ella se arrodillo frente al retrato como era su costumbre. A pesar que ella se hab'a masturbado en el baño, sin embargo la calentura que sent'a no se le quitaba. Sent'a rabia y frustración, cuando ellos eran pareja, ella se sent'a satisfecha. Pero ahora sent'a un vacio, y desde unos d'as para acá solo pensaba en sexo. Mar'a se levantó y fue a su cuarto. Mientras trataba de conciliar con el sueño, las imágenes de todas las cosas que hab'a visto en la casa de la mujer del reo, y la conversación que tuvo con sus hijos, no se apartaban de su mente. Ella ten'a que masturbarse de nuevo. Después de su orgasmo, quedo tendida en la cama, entonces pensaba, si acaso sus hijos no se ir'an a sus cuartos a masturbarse también. Una sonrisa se dibujo en su rostro. Parec'an que el exhibicionismo corr'a por sus hijos también. Pero no solo en su familia. También parec'a ser algo común, por lo menos eso parec'a. All' estaba Ana la esposa del reo, y también doña Elena, si lo que le dijeron Pedrito y Pablito era verdad. Ya era casi media noche y el sueño parec'a haberse ido de ella. Menos mal que al siguiente d'a no ten'a que ir a trabajar. Después de un rato más, ella decidió ir a la cocina por un vaso de agua con azúcar. Los d'as eran calurosos por esta fecha, por lo que Mar'a dorm'a en unos shorts de algodón holgados, sin pantaletas, y con una franela holgada de algodón. Ella se levantó de la cama y fue por su bata, pero entonces, pensó y dejo la bata, en cambió se quitó los shorts y la franela quedando desnuda, buscó la linterna que ten'a en su cómoda y salió del cuarto as' como estaba. La casa estaba a oscuras, y callada, entonces encendió la linterna, y empezó a caminar hacia la cocina. Después de preparar el vaso de agua, ella fue a la ventana de la cocina y la abrió, una brisa fresca entro recorriendo su cuerpo. La luna estaba llena y se pod'a ver a lo lejos. Incluso la carretera se ve'a iluminada. Todo estaba quieto, a lo lejos se pod'a ver la colina y los arbustos donde jugaban sus dos hijos varones, y de donde fisgoneaban a doña Elena. La calentura estaba de nuevo recorriendo su cuerpo. Parec'a que hab'a sido pose'da por un esp'ritu del sexo. A ella no le importaba. Inconscientemente, ella empezó a frotar su coño, y se sent'a bien. Quer'a regresar a su cuarto a masturbarse, pero entonces y comenzó a masturbarse all' en la cocina, con la ventana abierta. La sensación era agradable, y su coño quemaba, ella frotaba su coño y manoseaba sus tetas. De repente se dio cuenta que alguien de la casa podr'a ir a la cocina y verla all', pensó, pero ya no le importó. Entonces en cambió ella tomo la linterna y la encendió luego salió de la cocina y empezó a caminar por la casa mientras con la mano libre no dejaba de estrujar su coño y tetas. Cuando estuvo frente al cuarto de Pablito y Pedrito, asió con cuidado la cerradura de la puerta y la giró, esta estaba sin seguro. Entonces abrió lentamente para no hacer tanto ruido por el crujido de la puerta y entro. El cuarto no estaba tan oscuro porque el reflejo de la luz de la luna traspasaba la ventana que estaba abierta. Ellos dorm'an en una cama grande que hab'a sido de los abuelos. Los dos jovencitos estaban descubiertos por el calor que estaba haciendo. Ellos dorm'an en calzoncillos largos y holgados. Mar'a se acerco y se arrodillo al lado de Pedrito. Entonces acercó su nariz a la horca y con la mano suavemente toco la horca del calzoncillo. Como ella supon'a estaba húmeda, y ol'a a semen fresco. Luego muy cautelosamente desbotonó la cremallera y abrió las alas del calzoncillo. A pesar que Pedrito solo ten'a trece y el palo estaba flácido, Mar'a pudo ver que este med'a unos buenos quince cent'metros. Y era grueso como unos tres cent'metros. La cabeza era más gruesa. Mientras miraba el guevo de su hijo, ella no dejó de masturbarse. Luego de unos minutos, fue al otro lado donde estaba Pablito. Con Pablito hizo lo mismo. Después de comprobar que su pequeño de once también se hab'a masturbado, y después de unos minutos de admirarse también con el palo de Pablito. Ella se incorporó, entonces se quedo admirando los pequeños guevos de sus hijos por un rato, mientras no dejaba de estrujarse ella misma, las tetas y el coño. Entonces cerró la cremallera de los shorts con cuidado, y abandonó el cuarto. Después fue al cuarto de las niñas, pero cuando intentó abrir, la puerta ten'a seguro. Ella se sintió decepcionada, le hubiese gustado entrar al cuarto de sus hijas también, pensaba. Entonces se imaginó que quizás la ventana del cuarto estaba abierta, como era con sus hijos, aquella noche estaba haciendo mucho calor. Entonces se dirigió a la puerta de servicio que estaba en la cocina, y daba afuera. Cuando se sintió afuera, la brisa baño su húmedo cuerpo. También el perro guardián, que siempre se echaba al lado de la cocina por la puerta de servicio vio que su ama sal'a de la casa. Mar'a también vio al perro que se acercaba a ella. En otras circunstancias, ella lo hubiese espantado con un "¡VETE!" pero en ese momento lo menos que ella quer'a era hacer algún ruido que despertara a los de la casa, pusiera en alerta los otros perros, de sus vecinos. Menos mal que el perro, rápidamente reconoció a Mar'a y se acercó, moviendo la cola. Cuando el perro estuvo al alcance de su mano, Mar'a le acarició la cabeza, que estaba más o menos a su cintura, mientras con muecas trataba de decirle que no hiciera ruido. Ella empujaba al perro como si quisiera que entendiera que regresara de nuevo a su casa, pero el perro, parec'a no entender. Mar'a se cansó de hacerlo entender, entonces se rindió y dio media vuelta y empezó a caminar alrededor de la casa hacia la ventana del cuarto de sus hijas. Cuando llegó al cuarto, efectivamente notó que estaba la ventana abierta, aunque hab'a una cortina que no permit'a ver para adentro. Ella con cuidado retiró la cortina, y pudo ver la silueta de sus dos hijas en la cama, grande donde ellas dorm'an. Sus dos hijas estaban completamente dormidas, pero Mar'a también noto que la cabeza de una estaba para los pies de la otra. Ella buscó apoyarse en el protector de la ventana para ver bien, entonces de repente, sintió una lengua fr'a y babeada en su coño, desde atrás. Mar'a dio un salto en el sitio del susto, y ahogo un grito, que pudo haber despertado a todo mundo. Pero rápidamente se repuso y con la manó trataba de echar el perro hac'a atrás, pero este era demasiado grande. Al momento toda la horca estaba completamente mojada de la saliva de perro. Pero también de su propia humedad. Ella nunca en su vida hab'a sido lamida en su coño por alguna lengua. Pero este perro la ten'a al borde de un orgasmo, casi en unos segundos. Mar'a no quer'a perder el equilibrio por lo que se apoyo a la ventana, y abrió sus piernas lo suficiente para darle mejor acceso a la lengua del perro. Al rato Mar'a estaba meneando su trasero en la cabeza de Guardián. El perro parec'a no cansarse, y Mar'a ya hab'a estado en esa posición por unos quince minutos, y tres orgasmos. Al fin el perro se retiró y Mar'a se soltó de la ventana. Cuando Mar'a se giró vio al perro lamiéndose su propio palo. Jamás en su vida ella se imaginó que un perro tuviera un palo de ese tamaño, este estaba colgando de su barriga y casi llegaba al suelo. Mar'a pod'a calcular unos treinta cent'metros por lo menos de largo, y unos cinco de grueso. `Dios m'o es enorme, y aún no está completamente fuera de su bolsa', pensaba. Mar'a entonces regresó a su cuarto. Para entonces ya estaban cantando los gallos. Cuando Mar'a se despertó en la mañana, ya era casi mediod'a, los niños ya estaban en la escuela. Ella estaba orgullosa de sus hijos, porque en d'as como el de hoy, ellos no depend'an de ella, sino más bien ellos se las arreglaban. Lo primero que le vino a la mente fue la aventura de la noche anterior. Mar'a se toco su horca y noto que el short estaba pegajoso. Entonces se apoyo con el brazo y se miro, y noto que sus muslos estaban todos llenos de saliva seca de perro. Ella se levanto de la cama para meterse en la ducha, pero extrañamente el sentirse sucia la excito. Entonces revisó en sus apuntes, si aquel d'a recib'a visitas, pero como ten'a el d'a para ella, decidió quedarse as'. Ella se levantó con sus shorts holgados de algodón y la franela holgada que usaba para dormir. Fue a la cocina y abrió la ventana, entonces miro el campo, y la carretera a lo lejos por donde pasaban de cuando en vez, un automóvil o una bestia arreada por alguien, a veces iban transeúntes que iban a pie al pueblo. Ella se quedo mirando la carretera por un tiempo, entonces desvió la mirada a los potreros y los sembrad'os. Ella pod'a ver a lo lejos el reflejo de algún trabajador. Después miro la colina donde jugaban los niños, en las tardes. Ella entonces miro la perrera, donde probablemente estaba Guardián. Su coño empezó a picar, y Mar'a empezó acariciarlo a través del short. Abrió la puerta para salir donde estaba la perrera, entonces una sonrisa picara se dibujo en su rostro y fue a su cuarto. Busco y se puso una falda sin pantaletas que una vez hab'a comprado, porque le pareció sexy pero nunca se la hab'a puesto. La falda era de algodón y era apretada en su vientre y caderas pero holgada desde las caderas, era corta y escasamente cubr'a medio muslo. El objetivo de la falda era que la m'nima brisa la levantara exponiendo sus nalgas y la horca de las pantaletas. Ella alguna vez pensó en usarla en el pueblo, pero nunca tuvo el coraje. Luego se puso una franela sin sostenes. Luego de verse en el espejo salió de la casa. Las personas que pasaran por la carretera, estaban como a cincuenta metros, y de seguro no pensar'an nada extraño. Ella fue directo donde el perro, y justo como pensaba este estaba dentro de la casa, pero como era la costumbre de su hijo Pedrito lo amarraba con una cadena, para evitar que fuera a morder algún desprevenido. Guardián salió de su casa cuando sintió que alguien se acercaba, cuando vio a Mar'a movió la cola. Mar'a se detuvo frente al perro, sin saber qué hacer, miro de reojo para ver si ten'a el palo fuera, pero no era as'. Entonces ella se acercó al perro, acaricio su cabeza, miro a la carretera y levanto la falda, exponiéndole su coño. El perro olió la saliva seca y dio algunas lengüetadas al coño. Mar'a se manten'a mirando por si alguien pasara por la carretera. Después dio vuelta y le puso su culo, justo como hab'a estado expuesta la noche anterior. El perro lamió por un rato, mientras Mar'a gem'a, pero sin quitar la vista del camino. El perro no dejaba de babear que corr'a por sus muslos, Mar'a entonces se le ocurrió quitarle la cadena que lo sujetaba al cuello. Cuando el perro se sintió libre se abalanzo sobre ella, y casi la hace caer. Mar'a tuvo temor porque el perro era muy fuerte y de seguro la echar'a al piso si lo intentaba de nuevo, y eso podr'a hacer que cualquiera que pasara por la carretera se diera cuenta y entonces, crear'a un alboroto. Ella pensó rápidamente entonces corrió a la cocina. El perro perdió el interés y se echó al lado de la casita. El coño de Mar'a picaba y quer'a aporrearlo, cuando llevo su mano al coño este estaba completamente mojado con saliva que corr'a por sus muslo y goteaba en el piso, se sent'a sucia pero también su calentura la ten'a al borde. Ella se froto duro el coño con su mano, pero cuando estaba al borde del orgasmo, retiraba su mano. Esta sensación de estar en excitación, sin acabar le gustaba. Ella quer'a sentir de nuevo la lengua del perro. Pensó en llamarlo, o llevárselo a un sitio donde nadie la pudiera ver, pero el reto de ser expuesta a cualquiera que pasara, la excitaba aún más. Entonces salió de nuevo de la cocina y camino donde estaba guardián. El perro no parec'a interesado. Mar'a se agacho, comenzó acariciándolo de cabeza a la cola, mientras miraba alguna señal de excitación. Entonces empezó acariciar la vaina del perro, como si quisiera masturbarlo. Segundos después un palo rojo empezó a salir de la vaina. Rápidamente este empezó a crecer y minutos después unos 30 cent'metros de carne roja colgaban de la barriga. Este era más o menos el tamaño que ella hab'a visto, la noche anterior. Las voces de personas que re'an en la carretera, la distrajeron de la tarea, e hizo que ella soltara la vaina, y se acomodara, en una posición decente, entonces miro a la carretera. Era una familia que iban caminando hacia el pueblo, los niños jugaban y re'an cuando pasaron frente a la casa, vieron a Mar'a y al perro; entonces el esposo y la señora, dirigieron un saludo con los brazos, mientras segu'an sin prestar atención a lo que estaba haciendo la mujer. Mar'a volvió su atención de nuevo al perro, mientras admiraba el tamaño de ese guevo, se maravillo que pasar'a si ella segu'a manipulando la vaina. Pero con el perro echado ser'a muy dif'cil. Entonces ella tomo la cadena y amarro de nuevo al perro, mientras lo animaba a levantarse, halándolo. El perro se resistió al principio pero después se levantó y siguió a Mar'a. Mar'a llevo al perro a un árbol que estaba cerca y lo amarro asegurándose que no se pudiera echar de nuevo, en la posición donde estaba, se ocultaba de la carretera, y al menos que alguien verdaderamente se fijara, ella podr'a no ser vista. Mar'a se agacho de nuevo, y empezó a manosear la vaina del perro, de una manera desenfrenada, al rato ella ya estaba echada en la grama, y el perro presum'a sus treinta cent'metros, que ten'a antes. Mar'a ya no le importaba nada y desvergonzadamente empezó a bombear el palo del perro, a los minutos este estaba de unos 40 cent'metros de largo y cinco de diámetro, con una hinchazón en el centro que era como de 8 cent'metros de diámetro, de repente el perro empezó a bombear y un chorro de cum baño el rostro de Mar'a que la tomó por sorpresa. Parte del chorro fue directo a su boca que la ten'a abierta, Mar'a trago y el sabor no le pareció nada malo. Mar'a quedo en la grama, mientras se repon'a del orgasmo que hab'a tenido sin ni siquiera tocarse, de repente el ruido de un motor le dijo que era el autobús del trasporte escolar. "Coño, los muchachos" dijo en voz alta y rápidamente se repuso y llevo al perro de nuevo a la perrera. Entro justo a la casa cuando a lo lejos se pod'a ver l silueta del autobús. Mar'a corrió a la ducha. Mientras Mar'a estaba en la ducha escucho la voz de Patty que dec'a: "¿Mami, mami, podemos bañarnos afuera con el chorro del tanque? Hay demasiado calor." Hab'a d'as, especialmente en verano, que los niños acostumbraban a bañarse en el patio trasero de la casa. El patio detrás de la casa daba a los cafetales. Y en estos d'as los trabajadores estaban recogiendo caña, por lo que ellos ten'an privacidad. Mar'a grito: "Esta bien cariño, mientras yo preparo la comida." Ella escucho los niños gritar de alegr'a y todos corrieron a sus cuartos a prepararse, para el baño. Mar'a sent'a unos deseos locos de masturbarse, pensando en toda la aventura que hab'a vivido en las últimas horas, pero ella quer'a estar en fuego, y cachonda, como una perra en calor. Después de bañarse, fue al cuarto y se puso una bata de casa. Pero sin ropa interior, luego fue a la cocina y preparo la comida. Luego de terminar, como una hora después, fue donde los niños. Los niños hab'an abierto el chorro de un tanque aéreo grande que utilizaban para llenar los tanques donde se limpiaba el grano de café, en temporada. Ellos hab'an tapado el desagüe del tanque y estaba casi lleno. El tanque era pequeño y a lo más llegaba a la cintura de Pedrito. Pero del tanque ca'a una chorrera. Los niños llevaban puesto los shorts que siempre usaban cuando se bañaban en la chorrera: las niñas y los niños las franelas largas y shorts que llegaban a las rodillas. Mar'a llego hasta donde ellos y se sentó en un banco que estaba alrededor de una mesa grande de cemento que estaba al lado del tanque. Unos segundos después se levantó y regresó a la casa, los jóvenes se extrañaron, se miraron entre s', pero siguieron con sus juegos, luego escucharon la máquina de coser, y como media hora después su mamá regreso de nuevo. Los niños se quedaron mirando lo que tra'a en la mano. Cuando estuvo de nuevo en el asiento, Mar'a dijo: "Juanita. Patty tomen póngase esto." Entonces le lanzó a cada una unas prendas. Las jovencitas se quedaron mirando, y Juanita dijo: "MAMÁ que le hiciste a mi pantalón de jean." "Tú tienes suficientes pantalones de Jean para estar preocupándose por uno. Vamos dense prisa, y no hagan que me arrepienta. Y ustedes niños. Qu'tense esos shorts." Pablito dijo: "¿Mami y que nos vamos a poner?" "Se quedan en la ropa interior. Aqu' todos somos familia, porque la pena. Vamos niñas que esperan. Y no usen ropa interior." Mar'a miro como sus dos muchachos descascaraban los pantalones cortos y quedaba en ropa interior. Mar'a noto que los muchachos, estaban cachondos, y trataban de ocultar sus palos, cubriéndose con el agua del tanque que ya estaba casi lleno. Al rato Juanita y Patty sal'an de la casa. Las quijadas de Pedrito y Pablito casi se caen cuando vieron, a sus hermanas. Mientras que a las niñas no parec'a importarles, como sus hermanos las miraban, si acaso, les gusto. Ellas llevaban shorts calientes, pero más cortos aún, vulgares, era la palabra. Ninguna joven o dama decente usar'a. Las nalgas quedaban completamente expuestas, y la horca del short quedaba prácticamente encajada. Las franelas estaban justo por debajo de sus tetas, que con el m'nimo agache, estas quedaban expuestas. A Mar'a le gusto lo que vio y dijo: "Ve, as' está mejor. Ahora si se pueden quitar todo el sucio. ¿Yo voy a traer la comida y todos vamos a comer aqu' afuera que les parece?" todos aplaudieron. Las jovencitas parec'an cómodas exponiendo sus cuerpos a sus hermanos, y a ellos no parec'a importarles tampoco, al rato estaban de nuevo jugando, como si toda la vida ellos se hab'an vestido de esa manera. El siguiente d'a era libre en el colegio. Entonces Mar'a propuso que aquella noche fuera a la feria del pueblo, todos estaban aplaudiendo. Cuando hab'a ferias en el pueblo los habitantes estaban casi todo en las calles disfrutando de todas las actividades que se organizaban. Las otras veces que hab'an ido a una feria fue con su papá. Ellos iban y se divert'an en los juegos que montaban y después com'an algo, y luego regresaban a la casa. Mar'a se puso una falda corta de las que usaba a veces cuando iba al pueblo; escasamente le cubr'a medio muslo y era suelta, que la brisa la hacia volar, acompañada con una camisa a medio abotonar que dejaba al descubierto los globos de sus tetas, acompañada con botas de cuero de tacón alto y sombrero de vaquero. Cuando ella salió del cuarto, los niños estaban esperando en la sala, los varones no pod'an creer lo que ve'an, su mamá en verdad era un monumento para ver, y aunque estaban un poco asombrados por la manera de vestir de su madre, ya se estaban acostumbrando a esta nueva conducta de su madre. Mientras las niñas estaban vestidas con su habitual ropa, cuando sal'an al pueblo, para las ferias: pantalones y camisas con botas y sombrero de vaquero. Cuando Mar'a vio a sus hijas dijo: "Juanita, ya es hora que empieces a salirte de ese closet, anda y te pones algo sexy." "¿Mamá, que estás diciendo?" "No es lo que siempre has soñado. Que otros te vean." "S', bueno pero es..." "Nada, cuando yo era de tu edad me mor'a por vestir sexy, y yo se que tu quieres lo mismo. Vamos deja de ser tan mojigata." La pequeña Patty dijo: "¿Yo también, puedo mami?" "Si cariño, ahora vayan." Las dos jovencitas se pusieron faldas de jean que casi llegaban a las rodillas, y franela, botas de cuero y sombrero. Cuando salieron del cuarto, no era lo que Mar'a esperaba, entonces dijo: "No está mal, pero las faldas necesitan un arreglo." Entonces ella arreglo las faldas de las chicas y cuando se las dio dijo: "vayan y se las ponen, y Juanita no use sostenes." Las dos muchachas se pusieron las faldas que ahora les quedaban más arriba de medio muslo. Las tetas de Juanita eran grandes y redondas y se amoldaban claramente al tejido de la franela. Mientras a Patty, los dos limoncitos también se amoldaban a la franela. Las dos jovencitas rápidamente se acostumbraron a las miradas de sus hermanos. Las tres mujeres definitivamente no iban a pasar desapercibidas. "Nos vamos" dijo Mar'a y todos salieron para la camioneta. Los niños se montaron en la parte trasera de la camioneta, mientras las niñas iban acompañando adelante a Mar'a. Rodaron en silencio un rato, entonces Juanita se animó a decir: "Mamá usted cree que sea correcto que vayamos vestidas as', que van a decir de nosotras." "Para ser franca me importa un comino lo que digan de nosotras. Siempre quise ser yo misma. Pero me abstuve por causa de tu padre. Pero como te dije es hora de salir del closet." "Si, pero que van a decir de Patty y yo los amigos del colegio que de seguro deben estar en la feria también." "Por lo que se de tus hermanos, ellos ya saben que tu eres una exhibicionista, as' que cual es tu preocupación, además si en el colegio no lo puedes hacer, estos son los momentos. Mira cariño todo mundo por estos d'as no le importa como tu vistes o como te comportas. Las fiestas las inventaron para que las personas se liberaran de sus ataduras y como dec'a mi padre, echar una canita al aire. Apuesto que hasta tus profesores, te van a tragar con sus miradas de pervertidos, y agradecerán que una muñeca con un cuerpo como el tuyo, lo muestre. Ellos son hombres también, lo que pasa es que en el colegio tienen que ocultar su verdadero yo. Ya vas a ver." Con eso Mar'a soltó una mano del volante y la llevó debajo de la falda, y empezó a quitarse las pantaletas. Cuando Juanita supo cual era su intención dijo: "¿Madre que estás haciendo?" "Haciendo el paseo más interesante. Siempre quise hacer esto. Y estoy en humor para hacerlo. Pero no le digan nada a tus hermanos." Patty dijo: "¿Mami yo también puedo?" "Si cariño si usted quiere, y tu hermana también, este será nuestro pequeño secreto. Okey." Las niñas miraron a su madre, entonces sonrieron y Patty y juanita siguiendo los pasos de su madre se quitaron sus pantaletas. Entonces Mar'a metió las suyas en la guantera y las muchachas hicieron lo mismo. Cuando llegaron a la feria Mar'a estacionó la camioneta, después de echarse una mirada entre ellas, se bajaron. Los niños ya estaban abajo y mirando la gran cantidad de gente que hab'a. Mar'a dio dinero a los niños y estos se perdieron en la multitud. Entonces las mujeres hicieron lo mismo. Mar'a notó inmediatamente como las miradas de hombres, jovencitos y hasta de niñas y mujeres se posaban sobre ellas. Mientras estaban mirando un grupo de música tocando, unos jovencitos se acercaron a ellas, eran compañeros de Juanita. Cuando ella los vio sintió como si quisiera que la tierra se la tragara. Los jovencitos la saludaron y Juanita le presentó a su mamá. Mar'a pod'a sentir la lujuria en las miradas de los jovencitos y se sintió como una madre pervertida. Pero extrañamente en ves de sentir vergüenza, su coño empezó a picarle. Al momento ella se sent'a cómoda en medió de estos niños. Juanita también hab'a perdido la timidez y todos estaban hablando y sonriendo de los chistes que echaban, mientras Mar'a miraba e interven'a de vez en cuando. Los jovencitos invitaron a Juanita a ver el grupo que estaba tocando en otra tarima, era un grupo juvenil. Juanita invito a su mamá y las tres fueron. Cuando llegaron, el lugar estaba lleno de jóvenes. Algunos bailaban, otros cantaban al ritmo de la música y otros más estaban tomando alguna bebida alcohólica. Mar'a pensó que estaban demasiado jóvenes para estar injiriendo bebidas alcohólicas, pero qué más da, ella no era quien para corregirlos. Al rato Mar'a y las niñas estaban metidas dentro del grupo de jovencitos y jovencitas. Juanita se hab'a apartado de ella. Mar'a empezó a buscarla con la mirada y la vio rodeada de jóvenes, que la estaban manoseando, mientras ella trataba de salirse del grupo. El impulso maternal de Mar'a fue ir donde su hija y sacarla de all'. Pero su coño le dijo que se quedara tranquila. Después de un rato noto que Juanita ya no hacia tanta resistencia y empezó a aceptar el manoseo de estos jovencitos. Después de unos treinta minutos Mar'a se acercó donde estaba su hija, cuando los muchachos vieron a su mamá venir, rápidamente dejaron tranquila a Juanita, mientras ella buscaba acomodarse su ropa. Mar'a hizo como si no hubiera notado nada. Mar'a miro de reojo los bultos que sobresal'an en las horcas de los jovencitos, y también la mirada soñadora de Juanita. El coño de Mar'a le picaba y ella sintió envidia de su hija. Como si no hubiera notado nada, se disculpo de los jóvenes y se despidió, sacando a sus niñas de all'. Cuando iban saliendo de la multitud vio a Pedrito y Pablito que estaban reunidos con un grupo de jovencitos. Los dos jóvenes vieron a su mamá acercarse, Mar'a los llamo. Entonces uno de los niños dijo: "¿Esa mujer es tu mamá?" Pedrito respondió, "S'" mientras él y su hermano se alejaban. Cuando estaban todos reunidos y caminando por el lugar Mar'a dijo a Pedrito: ¿Qué significa todo ese alboroto que ten'an ustedes y sus amigos?" "Nada, solo nos divert'amos." "Nada ya veo. ¿Por qué ese chico dijo si yo era tu madre? Que ten'an conmigo" Pablito dijo: "Bueno mami, todos nos estábamos divirtiendo por ti" "Que significa que se estaban divirtiendo de mi, Pablito" "Mis amigos dec'an que nunca hab'an visto a una vieja mas buena, en toda su vida. Uno dijo que le gustar'a que usted fuera su mamá para tenerla siempre en casa, y otro dijo que le gustar'a llevarte a la cama. Y todos nos re'mos. Cada uno de ellos ten'a algo que decir de usted mamá." "As' que sus amigos estaban, hablando cosas sucias de su mamá en sus caras y ustedes se re'an de lo que dec'an. Que par de machos tenemos en casa muchachas. Con hombres como ellos en la casa no tenemos de que preocuparnos." Las muchachas se re'an. "¿Eso era todo?" continuo Mar'a. Pablito continuo "uno de ellos dijo me gustar'a ver las nalgas de esa vieja, apuesto que son redondas y grandes, entonces otro dijo a que no te atreves y vas y le levantas la falda. Entonces todos empezamos a burlarnos del chamo, y él fue donde usted estaba, y te levantó la falda. Suficiente para que todos viéramos tu trasero. Mamá. ¿Usted no se dio cuenta?" "Como diablos me iba a dar cuenta, con todo esa multitud apretando. As' que tengo dos hijos que le gusta andar fisgoneando, no. ¿Y luego que paso?" Mar'a sab'a que alguien le hab'a levantado la falda, pero no le importo. También estaba consciente que los jovencitos que estaban alrededor de ella no apartaban sus miradas de sus tetas y su culo, como si la estuvieran desnudando con la mirada. Algunos incluso se atrevieron a manosearla en atrevimiento. Ella lo notaba pero no le importaba, más bien le gustaba ser el centro de atención de estos pequeños pervertidos. "Eso fue todo, porque usted se fue donde estaba Juanita." "Mejor nos vamos ya para la casa. Que se está haciendo tarde" Fueron donde estaba la camioneta. La camioneta estaba estacionada en un lugar apartado cerca de unos arbustos. Cuando se acercaron escucharon voces y el gemido de una mujer. Se acercaron sigilosamente y vieron en un claro que hab'a, y bañado con la luz de una bombilla del poste a un grupo de jóvenes no mayor de dieciocho años rodeando a una mujer en sus últimos treinta, que estaba desnuda y completamente absorta en chupar los guevos de cada uno de estos jóvenes. Mar'a y sus hijos se escondieron en un lugar donde no los pudieran ver y se quedaron mirando aquel erótico espectáculo. Entonces como si se hubiesen puesto de acuerdo, los cuatro niños dijeron: "Es la profesora Laura." "¿Laura la profesora de Pedrito? No me diga, que pequeño es el mundo. ¿Si no me equivoco ella tiene dos hijos de unos quince y diecisiete años, y su esposo no es acaso Marcos el director del colegio? Vaya, vaya." Los cinco no pod'an creer lo que ve'an sus ojos, entonces Mar'a, dijo: "No hagan ningún ruido, ya vuelvo, voy por la cámara que tengo en la camioneta." Mar'a fue a la camioneta y saco una cámara fotográfica que siempre llevaba en sus paseos, ella era fanática a la fotograf'a, y su esposo le hab'a regalado una cámara en su último cumpleaños. Era una cámara profesional y pod'a sacar fotograf'as n'tidas aún en escasa luz. Y lo más importante era que no necesitaba de flash. Ella tomo la cámara y rápidamente regreso con sus hijos. Enfoco la cámara y empezó a tomar fotograf'as de la profesora chupando los guevos de estos jóvenes. Cuando iban a partir vieron una sombra que estaba detrás de otro árbol escondido a lo lejos. Mar'a enfocó la cámara y vio al personaje, que se estaba masturbando. Entonces enfoco la cara en la lente y dijo: "Vaya, vaya que tenemos aqu'. El director es un mirón y le gusta ver a su esposa, teniendo actos sexuales sucios con extraños." Entonces paso la cámara a sus hijos para que vieran. Después de hacer una toma demás, ella invito a sus hijos a dejar el lugar antes que alguien los viera. Cuando ya iban a dejar el lugar, Juanita dijo: Mira Pedrito esos dos que están de espaldas no son Jorge y Gabriel." Pedrito miro fijamente y dijo "si ellos son" Patty y Pablito también dijeron "Si ellos son" "¿Quiénes son Jorge y Gabriel?'" repuso Mar'a. Juanita dijo: "Los hijos de la profesora Laura." "Vaya, vaya. Bueno vámonos" y todos salieron a la camioneta. Cuando iban rumbo a la casa, todas estaban calladas, entonces Mar'a dijo: "sorpresas te da la vida, la vida te da sorpresas. Quien lo creer'a que el director de la escuela y su esposa e hijos, tuvieran una vida sexual tan libre. ¿Qué piensas ustedes niñas?" "No se mamá, todo me parece Cool." Dijo Patty. "Creo que todos somos unos hipócritas." Dijo Juanita. "Si incluso nosotras." Respondió Mar'a. "Yo te vi que estabas muy a gusto con esos chicos, no es as' juanita." "Mamá porque no me ayudaste, usted sab'as que esos niños me estaban fastidiando y usted solo miraba." "Cuando vi como te estaban manoseando, quise ir y sacarte de all', pero pensé, que ser'a mejor si tu enfrentabas esta situación por ti misma, no va ser la primera vez, ni la última. De todas maneras yo estaba pendiente, por si alguien se pasaba de la raya. Pero al rato me di cuenta que tu no necesitabas ayuda, como dir'a mi papá `ten'a la situación bajo control' creo que si yo no voy a sacarte de all', los que estar'an en problemas ser'an esos niños" "Mentira. Eso no es cierto" "No es cierto, tus ojos, no creo que engañaran ni siquiera a Patty" "Es verdad mami, Juanita estaba excitada." "Ve, as' que porque no eres sincera. ¿Te gustó verdad? No me mientas" "bueno si, fue lindo." "Ve que no es tan dif'cil." Con eso Mar'a alargo la mano y levanto la falda de Juanita, y metió su mano hasta tocar el inflado coño de su hija. Juanita estaba tiesa por este inesperado asalto de su madre. Solo atino a decir "¿Qué haces madre?" "Esta es la mejor manera de comprobar si una mujer está mintiendo. Vaya, vaya pero si estas toda empapada. Mijita cuantos orgasmos has tenido." Patty también se levantó la falda y dijo: "Mami yo también estoy mojada." Mar'a soltó a Juanita y toco a Patty: "Si cariño, ya veo que tengo dos pequeñas mujerzuelas por hijas. ¿Quiere saber si tu madre también está disfrutando de todo esto? Ven y mete tu mano bajo mi falda y toca mi coño." Las dos muchachas no pod'an creer lo que estaban escuchando, estaban consientes que su madre estaba actuando raro en los últimos d'as, pero nunca se imaginaron semejante petición. Sin embargo la pequeña Patty salto del asiento y se acurruco al lado de su madre. Mar'a abrió sus piernas hasta que la rodilla izquierda toco la puerta. Patty levantó la falda de su mamá y sin ninguna timidez asalto el coño de su madre. Mar'a no esperaba que su hija fuera tan impulsiva y el toque de los pequeños dedos con su coño todo mojado hizo que diera un salto en el asiento. "Cariño si no tienes cuidado vas hacer que me orine aqu' mismo." "Mami estas toda mojada, mira" sacando la mano y mostrándola a su madre. Mar'a tomo la mano y se la llevó a la boca y chupo dos dedos de su pequeña Patty ante la mirada atónita de las muchachas. "Si seguro que es mi cum, bueno esto también me hace una mujerzuela. No es as'." Patty agrego: "¿Mami porque tú no tienes pelo all' abajo, como Juanita?" "Eso es porque me lo afeite. Cariño. Mi coño ahora parece un coño de bebe pero crecido. ¿Quieres verlo?" entonces sin esperar respuesta Mar'a se levanto del asiento y levantó la falda hasta la cintura mostrando a la pequeña Patty y a Juanita un coño calvo, grande y mojado, también boqui abierto. ¿Te gusta, a ver muéstrame el tuyo?" Patty se incorporo como pudo y levanto su falda hasta la cintura dejando a la vista un imberbe coño, hinchado por la excitación y brillante. Mar'a lo miro y dijo: "Cariño que lindo coñito tienes entre esas piernas. Vamos Juanita ahora muéstranos el tuyo." Juanita estaba toda cachonda para el momento y sin decir nada levantó su falda hasta la cintura, dejando a la vista un coño inflado con escaso vello alrededor, sus muslos estaban húmedos. Mar'a elogio a Juanita diciendo: "Cariño si yo tuviera un coño como el tuyo de seguro me gustar'a andar desnuda todo el tiempo." "Mami, no es justo" dijo Patty. Mar'a dijo: "El tuyo tampoco tiene que envidiarle nada a ninguno, cariño" Madre e hijas siguieron el camino sin siquiera molestarse en acomodar sus faldas. Después de un rato Juanita dijo: "Mamá, parece que a Pedrito y Pablito no le importo en lo más m'nimo que su madre estuviera expuesta a todos, si acaso, creo que estaban disfrutando de eso." "Eso es porque ustedes tiene dos hermanos pervertidos." "Y usted no piensa corregirlos." "Para que, a ellos les gusto y a m' también, entonces todo está bien" Las tres re'an entre s'. Capitulo cinco Al siguiente d'a cuando estaban desayunando Mar'a entusiasmo a los niños para que fueran al escondite en la colina a fisgonear a la mujer de don Tomás. Todos estaban entusiasmados. Mar'a y las niñas prepararon una merienda y después salieron para la colina. Mar'a y las niñas llevaban jean apretados que hac'an resaltar sus traseros. Los dos niños iban detrás de su madre y no dejaban de admirar sus grandes nalgas y melones que colgaban debajo de una franela sin sostenes. Mar'a estaba consciente que sus dos muchachos no dejaban de mirar su trasero, y por eso iba delante de ellos. Cuando llegaron a los arbustos Mar'a dejo que sus dos hijos guiaran el camino. Ellos entraron entre arboles tupidos altos, hasta llegar a una cueva. La cueva era grande y espaciosa. Después que dejaron las cosas en la cueva. Los dos muchachos llevaron a su madre y hermanas sobre una piedra grande que estaba oculta y desde all' todos pod'an ver la casa de Don Tomas. Mar'a llevaba la cámara y enfoco el patio de la casa, cuando estaba satisfecha con el acercamiento para tomar buenas fotograf'as, retiro la cámara. Pasaron los minutos y no pasaba nada. Entonces Mar'a dijo: "Este paraje es muy bonito. Una podr'a hacer cualquier cosa sin preocuparse de ser vista. ¿As' que aqu' es donde ustedes juegan, no Pablito?" Pablito y Pedrito estaban mirando fijamente en el patio trasero de la casa de Don Tomas. Ellos l miraron a su mamá un poco extrañados por la pregunta y aseveraron con la cabeza. "¿Verdad que ser'a lindo ver a estos dos pervertidos desnudos, justo como ellos hacen cuando están aqu' solos, niñas?" Las dos muchachas quedaron sorprendidas por la insinuación de su madre. Pero la pequeña Patty inmediatamente dijo: "Ser'a Cool mamá." "Pero mamá nosotros no podemos." Dijo Pedrito. "Claro que pueden, acaso son maricas o que. No se preocupen por nosotras. Aqu' todos somos familia. Ven para acá Pablito." Mar'a sabia que Pablito no le importaba si su madre o hermanas lo ve'an desnudo, ella pensó que estando Pablito desnudo, entonces Pedrito se animar'a. Pablito se acerco a su madre y esta tomo la franela y la quito, exponiendo el imberbe y blanco torso de su hijo. Después fue por sus pantalones y soltando la correa los bajo, luego Pablito se los termino de quitar tirándolos donde estaba la franela. Pablito miraba a su madre y hermanas, entonces a Pedrito que no pod'a creer lo que estaba pasando. Después mar'a tomo las bandas de su interior y los tiro abajo, exponiendo un pequeño e imberbe pene, de unos ocho cent'metros. El pequeño cuerpo inmaduro de Pablito ahora estaba expuesto ante su madre y hermanas. Las miradas de juanita y Patty eran de curiosidad. Después llamo a Pedrito pero él se reusó y él mismo procedió a quitarse su ropa quedando completamente desnudo. Mar'a quedo sorprendida por el tamaño del miembro de su hijo de trece. Este ten'a unos buenos 15 cent'metros y unos tres de grueso. A su edad ya ten'a el tamaño del de su padre. Juanita y Patty tampoco dejaban de mirar el pene de su hermano. "No era tan dif'cil. No es as'" dijo Mar'a. Los jovencitos sin embargo aunque empezaron a sentirse cómodos en la posición en que estaban. Mar'a noto la incomodidad, pero eso era algo que ella esperaba, de unos jovencitos que estaban desnudos por primera vez delante de su madre y hermanas. El ruido de un motor hizo que la atención se dirigiera de nuevo a la casa de Don Tomas. Un camión lleno de personas estaba entrando a la casa. Mar'a calculó unas cuarenta personas entre mujeres, hombres y niños. También por la carretera ven'an cinco bestias cargadas, arreadas por dos hombres. Minutos después el patio estaba lleno de gente. Luego llegaron las cinco bestias cargadas, y los hombres empezaron a descargarlas. Dentro de la multitud se pod'an ver a Doña Elena y Don Tomas junto con sus hijos. Mar'a dijo: "Parece que hoy no tendremos el show que quer'amos ver. Parece que en la casa de Don Tomas hay fiesta hoy." Después de mirar el patio por unos minutos más, Mar'a se bajo de la piedra y se dispuso a ir a la cueva. Ella estaba desilusionada, porque ten'a otros planes. Ella no quer'a regresar a su casa, todav'a, entonces pregunto a Pedrito: "¿Qué hay detrás de esta colina?" "El convento de santa catalina." Ella hab'a visto el convento que estaba a orillas de la carretera nacional. El convento estaba a las afueras del pueblo, y cuando ella pasaba por el frente se ve'a bastante callado. Aunque se dec'a que en su interior viv'an unas doscientas monjas. Siempre le impresiono la arquitectura antigua que todav'a se conservaba intacta. Ella hab'a preguntado a su esposo si sab'a cuántos años ten'a esta construcción y su esposo le hab'a dicho que era tan viejo como el pueblo, y lo hab'an construido los monjes que llegaron junto con los españoles cuando la conquista. Ella invito a sus hijos a ponerse de nuevo la ropa, porque percibió que no estaban cómodos en presencia de ellas. Los jovencitos corrieron y se pusieron la ropa, luego todos subieron la colina que estaba cubierta de arboles. Cuando llegaron a la colina se acercaron a un claro y todos vieron abajo la vieja construcción que tanto impresiono a Mar'a. Mar'a tomo la cámara que le serv'a de binoculares. Lo primero que le impresionó fue el tamaño, cubr'a más de una cuadra de construcción. Detrás del convento hab'a un espacio abierto que era de aproximadamente dos cuadras, todo el convento estaba rodeado con un muro de aproximadamente diez metros de altura. Alrededor del muro estaba cubierto de vegetación y no se ve'a otra construcción cercana. El muro llegaba hasta el pie de la colina, y toda la colina estaba cubierta de arboles. La parte más alta del convento era el campanario, como ocurr'a en todas las iglesias. "Bajemos un poco que quiero ver de cerca. ¿Ustedes muchachos han ido cerca?" "No, solo hemos llegado hasta aqu'." "Bueno vamos." Todos bajaron apoyándose de los arboles, cuando estaban cerca del muro, hab'a un camino por donde se notaba que hab'a bastante transito, además se ve'an pisadas de animales. La familia siguió el camino. El camino llegaba a una puerta de madera grande que estaba en el muro. "¿Para qué es este camino mamá?" dijo Juanita. "Ni idea, aunque es utilizado a menudo. Podr'a ser para traer alimentos, de las granjas. Caminemos un poco hac'a el otro extremo del camino, para ver" Ellos siguieron por el camino hasta que avanzaron unos trescientos metros, pero este se segu'a adentrando en la montaña. Las jovencitas se pusieron nerviosas y Mar'a decidió regresar aunque ella quer'a continuar. Desde que hab'an abandonado la colina hasta que regresaron hab'a trascurrido unas dos horas. Abajo en la casa de don tomas se escuchaba música y la bulla de los niños jugando. Mar'a de nuevo se subió a la piedra y tomo la cámara. En la casa de Don Tomas ten'an tres tanques grandes como los que hab'a en la casa de Mar'a, estos los hab'an llenado, y casi todos los niños estaban bañándose junto con algunas madres, otros niños jugaban en la tierra. Hab'a dos madres amamantando que estaban sentadas en unos bancos de cemento que estaban alrededor de los tanques. También hab'a algunos niños entre uno y dos años que estaban con sus madres, o bajo el cuidado de algún hermano o hermana mayor. Otras mujeres estaban ayudando en la preparación de la comida, mientras tres hombres estaban cocinando la carne que hab'an colgado en varas, mientras tomaban cerveza y re'an, otros jugaban bolas criollas en un espacio retirado, también tomando cerveza. Mar'a noto que las madres y otras jóvenes estaban también tomando cerveza. Luego la tención se enfoco en cinco hombres que estaban, colocando una especie de tarima en medio de un charco por donde pisaban los animales, cerca de los establos. El barrial era de tal magnitud que los hombres usaban botas de caucho que le llegaban a las rodillas. Las botas se hund'an casi hasta las rodillas. La manguera con la que hab'an llenado los tanques estaba se estaba botando en el charco. "Pedrito y Pablito ¿ustedes hab'an visto esto antes?" señalando a la tarima. Todos los niños miraron donde estaba señalando su madre. "No." "¿Para qué es eso, mamá? Dijo Patty." "No se cariño. Pero parece interesante." "¿Quienes son todas esas personas mamá?" dijo Juanita. "No se cariño, no los hab'a visto anteriormente, Por lo visto esto es para rato, y las cosas hasta ahora están comenzando, mejor vamos a la casa, y regresamos, cuando la tarde este cayendo." Todos recogieron sus cosas y regresaron a la casa. Capitulo seis Cuando estaban llegando a la casa vieron una camioneta vieja estacionada frente a la casa. Patty con su espontaneidad dijo: "Mi abuela, mami mi abuela está en la casa." "Coño se me hab'a olvidado que tus abuelos ven'an hoy a la casa para llevarlos a ustedes a su casa." Los niños vieron a sus abuelos en el porche sentados en las sillas que estaban en el corredor. Ellos amaban a sus abuelos. Y cuando estaba vivo su papá, él siempre los llevaban los fines de semana. Sin embargo después que su padre hab'a muerto, sólo hab'an ido unas pocas veces. Mar'a no tuvo buenas relaciones con sus suegros, esto es porque ellos nunca estuvieron de acuerdo con su matrimonio. Las veces que ella fue a casa de sus suegros se pod'a contar con los dedos de las manos. Ya ten'an tiempo que no iban, por lo que su abuela hab'a pedido a Mar'a que los dejara este fin de semana." Cuando estaban cerca, los niños corrieron y estaban abrazando a sus abuelos cuando llego Mar'a. Mar'a saludo a sus suegros y después dijo: "Perdóname mamá, pero estábamos paseando por el lugar y se nos hizo tarde." "No se preocupe cariño, acabamos de llegar", respondió cariñosamente Doña Josefa. A pesar de sus 65 años se conservaba muy bien, ella se sent'a orgullosa de su voluptuoso cuerpo, y lo cuidaba. Ocultaba las arrugas con maquillaje, y pintaba su cabello. Ella hab'a aprendido aceptar a Mar'a como su nuera. Aunque no pod'a negar que al principio peleaba a su hijo para que rompiera esa relación. Ella comprend'a el resentimiento que sent'a Mar'a y no la culpaba. Mientras tanto Don José era un hombre de 70 años. Él estaba orgulloso de su cabello blanco, y a pesar de su edad manten'a en forma su cuerpo, por el duro trabajo de granjero. Mar'a les ofreció alguna merienda, y después que todos hab'an comido, y hablado de sus asuntos personales por cerca de una dos horas, los niños y sus abuelos salieron, dejando sola a Mar'a por dos d'as. Ella nunca se acostumbro a estar sola, y al principio sent'a la soledad pero luego se acostumbraba. Luego de dormir un poco para descansar, ella se levantó y miro el reloj, ya estaba anocheciendo. Ella estaba curiosa de lo que estaba sucediendo en casa de Don Tomas, principalmente por la tarima que estaban armando. Después que dejo todo en orden en la casa, ella fue a su cuarto para alistarse para salir. Ella miro los pantalones y franela que llevaba en la mañana. Ella quer'a sentirse como una prostituta callejera de mala muerte, entonces fue a una de las gavetas y saco un frasco de repelente para plagas. Se baño de repelente desde la coronilla hasta la punta de los pies. Luego fue al tocador y se puso maquillaje, como si fuera a trabajar de puta en la calle. Uso un lápiz labial negro para resaltar las grandes aureolas de sus tetas. Después uno rojo para los labios de la labia, entonces se miro al espejo y le gustó lo que ve'a. Se giro y vio sus grandes nalgas redondas, tomo de nuevo el lápiz labial negro y se agacho hasta que su culo estaba a la vista. Entonces pinto su culo con negro, y hizo un c'rculo grande. Después de colocar el lápiz labial en el tocador dio la espalda y el c'rculo negro parec'a como un blanco, ella se sintió sucia y esto le gustó. Se puso los zapatos de goma que llevaba en la mañana. Era lo único que quer'a usar. Para terminar ella fue a la cocina y busco en un gabinete, entonces saco un frasco que hab'a guardado hace años cuando su esposo lo trajo. Él le hab'a dicho que se lo hab'a dado un cliente como regalo. El cliente era de descendencia hindú y hab'a tra'do varios frascos de esta medicina milagrosa como él lo llamaba y le dio uno a José. Mar'a lo hab'a guardado en el gabinete porque ella no cre'a en medicina milagrosa. Pero esta noche ella quer'a saber la efectividad de la medicina. Saco el frasco y leyó las instrucciones en español que el amigo de José le hab'a dado con el frasco. Las indicaciones rezaban: Para hombres vaciar en un vaso una copa de la medicina y terminar de llenar con leche, en caso que, pueda conseguir leche materna, llenar con la mayor cantidad que consiga, par mejores resultados. Para las mujeres vaciar en un vaso una copa de la medicina y terminar de llenar con leche. Si quiere mejores resultados usar la mayor cantidad posible de semen. Ella saco un vaso y coloco la cantidad de medicina que indicaba las instrucciones después fue a la nevera por la leche, lleno el vaso. Y lo tomo. Luego hecho un último vistazo a todo para asegurarse que todo estaba bien, tomo una linterna y la cámara, miro por la ventana hacia la carretera y salió. Ella ten'a que atravesar la carretera, para dirigirse a la colina. El temor de ser vista por alguien que apareciera de repente por la carretera, la excito. Para cuando llego a la carretera, ella empezaba a sentir un calor por todo su cuerpo. Ya no le importaba nada si alguien la ve'a, al contrario la excito. Cualquier inhibición se esfumo y se empezó a sentirse completamente desvergonzada. Ella cruzó la carretera y se metió entre los árboles que la llevaba a la colina. Cuando hab'a caminado unos cien metros entre los matorrales, empezó a sentir un deseo incontrolable de orinar. Su coño le estaba picando y Mar'a ten'a que estrujarlo con la mano para calmarlo. La sensación era extraña, ella nunca se hab'a sentido as', pero era como si estuviera al borde de un orgasmo. Ella ni se preocupo por agacharse, sino que soltó el orines mientras caminaba, mojándose completamente sus muslos y piernas. Mientras orinaba sintió un orgasmo, que casi la hace gritar. Después que orino ella miro su coño y este estaba completamente hinchado. Los labios externos e internos eran tan gruesos como un pulgar. Pero la sensación de orgasmo no le pasaba. El coño le segu'a picando y ella lo estrujaba duro hasta que quedó completamente rojo, el cl'toris sobresal'a de los labios y parec'an un pequeño pene de un recién nacido. Entonces de repente sintió deseos locos de cagar, ella no se molestó en agacharse sino que extendió sus piernas, y la mierda salió dejando una gran plasta en el camino. Ella sintió una sensación de alivio, también el culo le estaba picando, ella llevo la mano a su culo. Y cuando lo toco sintió un alivio y un cosquilleo que recorrió todo su cuerpo. Su ano estaba suelto y pod'a meter la mano hasta la muñeca. Cuando metió su mano en el culo sintió un alivio, entonces saco su mano del culo y la llevo a su coño hinchado y boquiabierto. Se metió su mano y también sintió un alivio. Ella agarro la linterna de unos treinta cent'metros de largo y unos cinco de diámetro y se la metió en su culo, no tuvo que hacer ningún esfuerzo, esta se deslizo fácilmente hasta que quedo fuera la pantalla. Sintió un alivio que la hizo tener otro orgasmo, no teniendo otra cosa para su coño ella siguió caminando pero manten'a su mano adentro y jugaba con él. En el recorrido de unos 300 metros hab'a tenido varios orgasmos. Cuando llego al lugar de observación donde hab'a estado en la mañana ella estaba completamente exhausta. Llego y se tiro en la tierra para descansar y as' estuvo por una media hora más hasta, que comenzó a sentir un alivio. Cuando se levantó ya la noche hab'a ca'do sobre la montaña. Ella se sintió un poco sobrecogida al sentirse sola de noche, en una montaña. Fue a la piedra, abajo se escuchaba la música y una griter'a. Tomo la linterna de su culo que aún la ten'a all', la linterna estaba toda llena de mierda. Pero Mar'a no sintió repulsión. La encendió y se miro el coño, este todav'a estaba hinchado y su cl'toris sobresal'a, ella apunto la luz a la piedra y se monto en ella. Limpio su mano en sus muslos y tomo la cámara para observar. Lo que vio hizo que su coño comenzara a picar de nuevo. Las mujeres estaban en pantaletas, y algunas incluso no ten'an sostenes. Las mujeres, los niños y los hombres estaban reunidos gritando y animando. Mientras en la tarima que estaban preparando en la mañana hab'a dos mujeres, luchando entre ellas mientras una de ellas trataba de empujar a la otra al barrial. Las barras estaban divididas y se pod'a escuchar a los hijos animar a su mamá. Al rato una de ellas ca'a en el charco, donde la esperaban las otras mujeres que hab'an ca'do al charco completamente embarradas de pies a cabeza y estaban alrededor de la tarima esperando que cayera otra v'ctima. Cuando ca'a le ca'an encima y la sumerg'an completamente en el barrial hasta que estaba completamente embarrialada. Un hombre que estaba sentado con un lápiz y un cuaderno llevaba un record de las perdedoras y las ganadoras. Después se colocaba una pasarela de madera para que la mujer ganadora se bajara de la tarima y otras dos mujeres iban a la tarima. Cuando Mar'a llego ya hab'an luchado la mitad de las mujeres, y trascurrieron otras dos horas más hasta que quedaron dos mujeres nada más. Cuando quedo una ganadora explotaron los aplausos, y la mujer desfilaba por la tarima como si hubiese ganado una medalla de oro. Después de declarar a la ganadora, los hombres comenzaron a desnudarse delante de sus hijos e hijas y esposas que para entonces estaban en el barrial llenas de barro a excepción de una. Solo un hombre no se desnudo lo que hizo suponer a Mar'a que probablemente era su esposo. Luego pusieron la tarima y los hombres fueron a la tarima. La ganadora era cogida por todos los hombres, delante de sus hijos y su esposo. Las mujeres que estaban en el charco salieron y fueron a los tanques para quitarse el barro. Una hora después la mujer quedaba completamente exhausta y llena de semen que la cubr'a completamente. Entonces los hombres la agarraron como si fuera una muñeca de trapo y la lanzan al charco. Los niños y mujeres que para entonces están al lado de sus hijos mirando, aplauden y gritan hurras. Después de esta org'a, la fiesta se da por terminada y poco a poco van abandonando el lugar. Mientras Mar'a miraba el espectáculo usaba la linterna como un falo. Y tomaba un video con la cámara. Después de terminar el show Mar'a se dispuso a regresar a su casa. Ella se sent'a excitada y no quer'a que este sentimiento terminara. Entonces en vez de bajar a su casa, ella subió al otro lado de la montaña. Llego al claro donde se ve'a el convento. Este estaba bañado por la luz de la luna que estaba completamente llena. Mar'a empezó a bajar la colina hacia el convento. Minutos después estaba en el camino que iba al convento. Ella empezó a caminar en dirección a la montaña, después de caminar un kilometro aproximadamente, ella escucho un bullicio que sonaba a lo lejos, pero fuera del camino. Ella apago la linterna y se desvió por un potrero, cuando hab'a caminado cierta distancia vio que más adelante estaba iluminado por lo que parec'a fuego, ella avanzó cuidadosamente, y se escondió en una piedra grande, luego se asomo y vio una gran multitud de personas, que entonaban una especie tonada religiosa, todas estaban reunidas mirando al centro de la multitud, cada una de estas personas llevaba una antorcha. Mar'a no pod'a ver quienes estas personas que parec'an que llevaban una especie de atuendo que las cubr'a completamente, parec'a ser negro, pero no estaba segura. Su excitación hab'a cambiado a curiosidad y miedo. Ella quiso devolverse al camino, pero su curiosidad era más fuerte. Entonces ella empezó a acercarse más escondiéndose entre las piedras. De repente vio un árbol grande cerca del lugar donde estaba la multitud. Ella se acerco hasta que estaba protegida detrás del árbol. Ella tomo la cámara y empezó hacer tomas. No pod'a ver quiénes eran estas personas, pero estaba segura que era una especie de rito religioso. Ella no pod'a acercarse más entonces espero. Cuando finalizaron los canticos toda la multitud se agacho en señal de humildad y devoción. Mar'a pudo ver que el centro estaba colocadas como en un altar, velas en forma de palos fálicos encendidos, pero su tamaño era inmenso, eran de aproximadamente un metro de largo y unos diez cent'metros de diámetro, hab'a tantos como personas hab'an reunidas. Delante a modo de icono hab'a un afiche grande de unos dos por dos metros de altura por ancho. Hab'a dos falos grandes cruzados, haciendo una cruz. Alrededor de la cruz fálica, hab'a dibujos. Mar'a miro fijamente y pudo visualizar las pinturas: en la parte superior izquierda hab'a una especie de demonio con un órgano gigante que era tan largo como sus piernas, luego segu'an dibujos de animales, hab'a un burro con su miembro colgando, también un caballo, un toro con un miembro largo que casi llegaba al piso pero no era grueso como el del burro o el caballo, pero parec'a estar enrollado como un espiral, un elefante y para finalizar hab'a un hombre negro con un miembro gigante, que a Mar'a le recordó al reo. Pero este era más grande. De repente detrás del afiche salió una figura con un manto negro que la cubr'a completamente. Se coloco entre el afiche y los falos encendidos. Se agacho delante de la cruz fálica en señal de humildad, luego se levanto y miró a la asamblea. Empezó rezando unas oraciones en un idioma que Mar'a no entend'a, cuando terminaba la oración el grupo que estaba con la cabeza en la tierra boca abajo, dec'a "Amen" Después de terminar las oraciones, dos personas de las que estaban en la multitud se levantaron y en forma ceremonial le quitaron la manta que la cubr'a. La persona que parec'a ser la l'der era una mujer de nos cincuenta años, blanca con grandes caderas y un cuerpo envidiable. La mujer estaba desnuda a excepción de la cabeza, que llevaba un velo como de una monja. También sal'a de su coño un palo fálico de plástico gigante colgando que llegaba hasta sus rodillas y de unos diez cent'metros de grueso, que sosten'a con unas correas de cuero. Las tetas eran grandes, y llevaban dos anillos grandes con crucifijos fálicos que colgaban de ellas. Las dos personas que le quitaron el manto regresaron a su posición. Entonces la l'der tomo una vasija del piso y rezo otra oración, cuando la multitud dijo amen al finalizar la oración levanto la mirada y vieron a su l'der tomar una brocha, y untarla con el liquido que hab'a en la vasija y bendijo las velas fálicas rociándolas. Después que termino su bendición ella se retiro. La multitud se incorporo y nuevamente tapo la visión a Mar'a. La multitud empezó a quitarse las mantas que las cubr'an y Mar'a vio que todas eran mujeres, con los velos de monjas. Aunque estaban de espalda vio que todas ten'an tatuajes en su cuerpo, aunque no estaba segura de que. Cada una de estas mujeres fue retirando su vela fálica. La l'der estaba sentada en una silla que hab'an colocado en el altar delante del afiche. Mar'a se enfoco en la multitud y vio que casi todas las mujeres llevaban crucifijos colgando de sus tetas, también la mayor'a ten'a anillos grandes que atravesaban su cl'toris, con un crucifijo colgando. Después siguió una org'a entre ellas. Algunas bañaron sus velas con aceite que estaba en la vasija y se montaron sobre estos miembros. Mar'a quedo sorprendida la capacidad que ten'an estas mujeres para meterse estos monstruos. La mayor'a de las que estaban jugando con estos falos se pod'an meter casi todo el palo, escasamente quedaban unos veinte cent'metros fuera de sus coños. Mar'a vio a una mujer grande de casi dos metros de altura y unos ciento cincuenta kilos de peso. Pero no porque estaba obesa. Su cuerpo parec'a de una f'sico culturista, que tomo el falo y se lo metió por el culo hasta que la base del mismo quedo entre las raja del culo. Media hora después la l'der se sumo a la orgia, cogiendo con su palo que estaba colgando a su pareja. Cuando la l'der se alejo del grupo, soltó las correas de cuero y tomo el miembro de plástico y lo halo. El palo era de dos cabezas y ella ten'a metido como un metro de palo en su coño. Mar'a comprendió que la fiesta estaba por terminar y dejo de filmar, y se escondió bien. En los siguientes quince minutos se vistieron de nuevo con sus mantas y recogieron todo. Cada una llevaba su falo bendito y la antorcha, recogieron el afiche e hicieron un rollo y una lo cargo mientras otras la ayudaban con sus cosas. Cuando se hab'a alejado suficiente, Mar'a las siguió a la distancia. El regreso era callado y como Mar'a hab'a supuesto estas mujeres eran monjas del convento. Cuando la puerta del convento se cerró detrás de la última, Mar'a se acerco a la puerta y se quedo pensando en toda la aventura que hab'a vivido esa noche. Ella empujo la puerta con cuidado y esta cedió. Ella asomo la cabeza y vio que no hab'a nadie alrededor. Todo estaba oscuro a excepción de la luz de la luna. Ella pasó y camino unos metros luego se detuvo y miro alrededor, el patio del convento estaba cubierto de sembrad'os, también noto que a lo lejos hab'a un establo. Entonces escucho los gallos cantar y supuso que estaba por amanecer. Entonces regreso, salió del convento, ajusto la puerta y empezó a subir la colina para regresar a la casa. Cuando ya se hab'a tranquilizado de todas las emociones que hab'a vivido, de nuevo se dio cuenta que estaba desnuda, caminado en la noche por una colina por donde jugaban sus dos hijos desnudos. Empezó a sentirse de nuevo excitada. Apunto la luz de la linterna a su coño y vio que este aún estaba hinchado y su cl'toris parec'a más grande, parec'a un pequeño pene. Llevo la mano a su culo y noto que su ano también estaba relajado. Ella apago la linterna y noto que la vista ya se hab'a acostumbrado a la oscuridad, además el camino ya no era extraño para ella. Ella tomo la linterna y se la metió de nuevo en su culo, recordando la visión de la monja y el palo en su culo. Ella se sintió más excitada y empujo la linterna hasta que esta desapareció completamente en su recto. La excitación parec'a hervir de nuevo en su cuerpo. Mientras sub'a por la colina ella se iba estrujando su coño, hasta que alcanzaba el orgasmo. Cuando llego a la cima de la colina ya hab'a tenido tres orgasmos. Miro para la casa de Don Tomás y todo estaba tranquilo. Ella deseaba tener algo para meterse en su coño que le picaba constantemente. De repente ella recordó que en la mañana hab'an tra'do merienda, y la hab'an dejado en la cueva. Entonces se dirigió a la cueva. Pero esta estaba completamente oscura, pujo duro y saco la linterna de su culo que salió llena de mierda. Mar'a la agarro sin ninguna repulsión y limpio la pantalla en sus nalgas. Ella encendió la linterna y entro a la cueva. La bolsa de la merienda estaba justó donde la hab'an dejado. Se sentó en la tierra y tomo la bolsa de papel, la abrió y estaba todo justo como lo hab'a dejado. Ella vacio las cosas en la tierra y tomo un refresco de lata lo abrió y se la tomo, Calmando la sed que ten'a. Luego agarro una bolsa de plástico y saco los panes rellenos que ella hab'a preparado en la mañana. Tomo uno y se lo comió. Luego un pensamiento perverso cruzo por su mente. Agarro otro pan relleno y se incorporo poniéndose en cuclillas, y se lo metió en su culo, agarro otro y otro hasta que los cuatro que quedaban en la bolsa se los metió. Tomo una lata de refresco y se la metió en su coño, haciendo que ella exhalara un suspiro, entonces empujo la lata, se metió otra y otra hasta que ten'a tres en su coño. Luego destapo la otra y se la tomo. Mar'a empezó a caminar colina abajo para la casa, con su culo y coño picando pero sintiéndose llena. Ella apago de nuevo la linterna y empezó a meterse la linterna en su culo, se esforzó y esta se abr'a paso entre los panes, hasta que la pantalla era cubierta por sus nalgas. Ella sent'a que su culo iba a estallar, cuando camino otros doscientos metros ya casi llegaba a orillas de la carreta. No aguanto y empujo botando la linterna y los panes fuera de su culo. Ella sintió un alivio, entonces tomo la linterna que estaba llena de pan con salsa y mierda y se la metió de nuevo en su culo boquiabierto. No hubo necesidad de empujar, esta entro completamente en su recto. Mar'a agarro la masa de pan lleno de salsa con ensalada y tocineta y mierda que estaba amontonado en la tierra. Y empezó a untárselo por todo su cuerpo. Mar'a se sent'a como una cerda, pero no sent'a ninguna vergüenza sino más bien la excito. Los trozos que cayeron a la tierra ella los recogió, comenzó a tragárselos. Extrañamente el sándwich con sabor a mierda le pareció delicioso, después que se hab'a comido todo se lamio los dedos. Cuando termino ella siguió el camino, llego a la carretera, y cruzo. Cuando entro a su parcela, escucho al perro ladrar en la parcela. Ella sab'a que este no se quedar'a tranquilo hasta que no la reconociera, entonces se dirigió a la perrera. Cuando el perro reconoció a su ama, dejo de ladrar y empezó a menear la cola. El perro se acerco y empezó a oler a Mar'a, luego empezó a lamer su cuerpo, Mar'a dejo que la lamiera hasta que se cansó. Ella se alejó del perro y fue al patio de atrás, pero el perro la siguió. Mar'a se sent'a sucia y excitada. Fue al chorro de agua que llenaba los tanques y abrió la manguera. El agua estaba fr'a pero Mar'a se empezó a quitar toda la suciedad, después que se hab'a quitado toda la suciedad, se saco la linterna del culo y la lavo. Entonces tomo la punta de la manguera y se la metió lavándose su culo. Después que se baño recogió una toalla se secó y fue adentro de su casa. Cuando estaba por cerrar la puerta noto que el perro la hab'a seguido, y se quedo mirándola como con una mirada de súplica o eso fue lo que le pareció a Mar'a. Un pensamiento perverso paso por la mente de Mar'a. "Porque no, total estoy sola." Ella fue por la cadena del perro y la puso en el collar, entonces lo llevo adentro. El perro se resistió, algunas veces que ten'a la osad'a de hacerlo era castigado. Mar'a sab'a porque no quer'a entrar, entonces ten'a que hacer algo que hiciera que el castigo valiera la pena. Ella se acerco al perro, abrió sus piernas y con las dos manos abrió su coño hinchado y se lo puso en la nariz del perro. El perro inmediatamente lanzó una lengüetada que sorprendió a Mar'a, pero la sensación era agradable. Dejo que el perro lamiera su coño un rato. Ella miro de reojo bajo su barriga y vio que su miembro estaba saliendo de la vaina. Entonces ella se retiro de nuevo dentro de la casa y tiro de la cadena, esta vez el perro avanzó, después que hab'a entrado, Mar'a tranco la puerta y llevando al perro por la cadena fue a su cuarto. Cuando entro al cuarto se tiro a la cama, mientras el perro quedo de pie al lado de la cama. Se quedo pensando que hacer. El perro botaba mucha baba y de seguro no lo pod'a subir a la cama, también ten'a d'as que no se hab'a bañado, e iba a dejar la cama hedionda a perro. Ella se levantó de la cama y fue al closet. Entonces recordó que ten'a unas colchonetas que una vez hab'a comprado para hacer ejercicios. Dejo al perro en el cuarto y fue a un cuarto que usaban de depósito. Buscó hasta que hayo las colchonetas y las tomo. Cuando iba saliendo vio colgando de la pared un collar de perra con una placa que dec'a Bianca. Ella recordó que este collar era de la compañera de Vigilante. Su esposo hab'a comprado la pareja, cuando eran cachorros, pero cuando la hembra justo hab'a cumplido el año, murió arrollada por un camión. Ella se hab'a soltado de la cadena y empezó a corretear otro perro que hab'a entrado a la finca. El otro perro corrió a la carretera y Bianca fue detrás de él. Pero en ese momento bajaba por al carretera un camión cargado y se llevo a Bianca por delante. Matándola en el acto. La muerte de Bianca hab'a sido un duro golpe para todos. Entonces ellos hab'an guardado el collar como recuerdo. Mar'a bajo el collar y lo llevo al cuarto junto con las colchonetas. Mar'a tiro las colchonetas en el piso, después fue al espejo y se puso el collar, ella empezó a sentirse como una perra, pensó: "Me llamo Bianca, la perra de Vigilante" después miro sus pezones que estaban duros y hab'an crecido unos dos cent'metros, y las aureolas estaban más marrones. Luego bajo la mirada a su coño y sus labias segu'an hinchadas, y el cl'toris sobresal'a como un pequeño pene. Mar'a golpeo su cl'toris con el dedo 'ndice, y la hizo brincar de placer. Entonces se giro y agacho un poco, su culo segu'a relajado y parec'a más grande, su cuerpo parec'a hervir de excitación. Ella de nuevo tomo el maquillaje y se pinto sus cejas, se acomodo las pestañas, se maquillo su rostro y se pintó los labios con un color negro, haciendo resaltar sus labios que parec'an más carnosos ahora. Luego tomo la pintura de labios negros y se pinto las aureolas, tomo el lápiz rojo y se pinto las labias, que sobresal'an como unos pétalos hinchados. Agarro una pintura de unas negras y se pintó su cl'toris haciendo que resaltara. Le gusto lo que ve'a. La acetona de la pintura de labios ard'a en el cl'toris creando una sensación de dolor y placer, pero poco a poco se fue esfumando a medida que la pintura se secaba. Se dio vuelta y se agacho exponiendo completamente su ano abierto. Tomo el lápiz labial rojo y lo pinto, después se miro en el espejo. Ella se sent'a vulgar, pero cachonda. Fue al closet y saco unos tacones de unos diez cent'metros de alto que hab'a comprado pero nunca los hab'a usado. Se los puso y camino. Cuando caminaba el cuerpo se mov'a sensualmente y sus nalgas ondulaban. Le pareció que ya estaba lista para su parejo, Pero faltaba algo, fue de nuevo al espejo y abrió sus piernas completamente, entonces con una mano empezó a sacar las latas de refresco que se hab'a metido en la colina. Cuando saco las tres latas su coño estaba boquiabierto completamente, y las latas estaban calientes. Mar'a fue a la nevera y después de lavar las latas las metió de nuevo a la nevera. Cuando se dispon'a a ir al cuarto, vio la leche, entonces se mordió su labio inferior y fue y saco la medicina y preparo otra bebida. Después de tomársela fue al encuentro de Vigilante. La reacción de la medicina fue casi inmediata, cuando llego al cuarto se sent'a mojada en sus muslos. Ella bajo la mirada y vio que su coño estaba más hinchado: sus labias florec'an intensamente y estaban resaltadas por el color rojo del lápiz labial, su cl'toris era más grande y grueso, sus muslos estaban todos mojados pero no de orines. La excitación que sent'a era tan intensa que le pareció que estaba flotando en un mundo donde su mente lo único que le importaba era el sexo. Ella fue al espejo y vio que los labios eran más provocativos y los ojos brillaban, también vio que sus pezones eran más grandes y ten'an como cinco cent'metros de largo. Ella se los toco e inmediatamente la hizo chillar de placer. La imagen que ella vio en el espejo fue la figura de una diosa del sexo. Se voltio y sus nalgas parec'an más grandes y redondas, y ten'an una tez roja, su culo le picaba, entonces se agacho y vio que su ano parec'a una flor. Mientras estaba concentrada admirando su culo, sintió una lengua fr'a y babosa en su cara, ella se le hab'a olvidado momentáneamente del perro. Ella se abalanzó sobre el perro como una amante que no hab'a visto en años y empezó acariciarlo. Mar'a se entrego a las lengüetadas del perro y empezó a besarlo en la boca dándole besos húmedos, después de los besos, Mar'a llevo a Vigilante al la colchoneta y ella se acostó boca arriba y acerco al perro. Este ten'a parte del miembro fuera de la vaina, ella se metió bajo el perro y empezó a acariciar y mamar el pene del perro, como si de una chupeta se tratara, el perro en cambio empezó a lamer el coño de Mar'a, que la hizo temblar y gemir de placer. Mar'a abrió las piernas completamente y levanto sus lomos para darle más acceso. "Eso bebe, chupa mi coño de puta. Chupa a tu perra." Repet'a constantemente mientras ella se dedico a mamar y pasar el palo del perro que ahora era como de cuarenta cent'metros y unos cinco de ancho en la parte más delgada y ocho en el medio sobre sus tetas. Mar'a gem'a y se contorsionaba de placer. El perro empezó a bombear echando chorritos de cum bañando los pechos y cara de Mar'a. Ella abrió la boca y tomo un chorro de cum, tragando y saboreándolo, como si nunca hubiera tomado algo tan sabroso. Mar'a perdió la cuenta de los orgasmos, se incorporo y se puso en cuatro bajando sus tetas hasta que quedaron aplastadas en la colchoneta, abrió las piernas y con las dos manos extendió sus nalgas aparte exponiendo al perro un coño boquiabierto, hinchado, rojo, y el culo boquiabierto. "Ven acá cariño. Cógeme, yo soy tu perra. Vamos" repet'a El perro parec'a entender e inmediatamente se acomodo sobre la espalda de su perra y en unos segundos su pene hab'a encontrado el hueco del coño, empujando con fuerza y metiendo todos sus cuarenta cent'metros de un solo golpe, haciendo saltar y gritar a Mar'a. El perro se mantuvo bombeando y bombeando, mientras Mar'a gem'a y chillaba, por cada choque como si fuera una corriente eléctrica que recorr'a su cuerpo. "S', S', cógeme. Oh que rico. Vamos mi amor. Trátame como una perra. "Soy tu puta. Oh si." Mar'a no dejaba de gritar y decirle al perro cosas vulgares, de ella misma. Una hora después el perro y Mar'a estaban enganchados por un nudo que creció dentro de su coño, como si fuera una bola criolla. El perro se bajo de la espalda dejando a Mar'a completamente bañada de baba de perro, entonces se giro y quedaron en posición opuesta. Después del último orgasmo que acababa de pasar, Mar'a trato de zafarse del perro pero el nudo era demasiado grande. Ellos quedaron enganchados por otra media hora, hasta que el perro halo y se soltó, entonces se alejo y se hecho en una esquina del cuarto, lamiendo su pene aún colgando fuera de su vaina. Mar'a cayó en la colchoneta, satisfecha y sin fuerzas. A los pocos minutos quedo dormida, en la colchoneta. Mar'a se despertó estirándose, por un momento no supo donde estaba, y porque estaba tirada en la colchoneta, bañada de baba seca y semen. Momentos después recordó todo y una sensación de satisfacción recorrió su cuerpo. Luego hecho una mirada alrededor y el perro no estaba. Ella se levantó, se miro en el espejo, y vio que sus labios aun estaban carnosos, aunque no tanto como antes. Los pezones segu'an largos pero hab'an bajado su tamaño, su coño segu'a hinchado pero no como antes sin embargo las labias se ergu'an orgullosamente del grosor de un dedo pulgar. Luego salió del cuarto y vio al perro echado al pie de la puerta de salida hacia el patio, giro la cabeza al reloj que colgaba en la pared de la sala, y vio que ya era mediod'a. Ella fue y abrió la puerta y el perro salió corriendo al patio y jugando como si de un cachorro se tratara. Mar'a se quedó mirando al perro desde la puerta, los sentimientos que sent'a ahora por Vigilante eran diferentes al de antes, ella hab'a visto al perro como una mascota y un guardián que serv'a para proteger la casa, pero ahora ve'a al perro como si fuera parte de ella, el mismo sentimiento que ella sintió cuando se enamoro locamente de su esposo. Ella fue a la cocina y preparo un plato de cereales para ella y comida para Vigilante. Ella regreso al patio con el alimento del perro, cuando se dispon'a llevarlo a la perrera se dio cuenta que todav'a estaba desnuda, y la perrera estaba en el patio delantero, y cualquiera que pasara por la carretera la podr'a ver, sin embargo la sensación de andar desnuda la excitaba y no quer'a ponerse la molesta ropa. Ella salió y se acercó a la esquina de la casa, de all' a la perrera eran como unos veinte metros, desde esa posición ella pod'a ver si alguien iba por la carretera. Pensó, entonces se encogió de hombros, y salió hacia la perrera, con un movimiento rápido. Su corazón se aceleró, con temor, pero ella llevaba puesto los tacones altos y no pod'a ir más rápido. Cuando llego a la perrera, vacio el alimento en el plato del perro, entonces miro alrededor. El miedo de quedar expuesta a cualquiera que pasara de repente, se tornó en placer, luego regreso a la casa, pero esta vez ya no le importaba si alguien la ve'a, y camino con paso lento, cuando llego a la esquina de la casa, una sensación de alivio pero también de frustración baño su cuerpo. Ella regreso a la casa, pero recordó que no pod'a dejar al perro suelto, entonces fue al cuarto por la cadena y regreso y amarro al perro, entonces regreso de nuevo a la perrera con el perro, lo amarro le dio un beso en la nariz. Le hablo como de un amante se tratara y regreso a la casa. Esta vez ella no tuvo ningún apuro. Si acaso, ella se tardo todo lo que pudo. Ella regreso a la casa, entonces supo que en cualquier momento pod'an regresar sus hijos, fue al cuarto, se quito la correa de perra, lo miro sonrió, pensó: "Mi nombre ahora es Bianca, la perra de Vigilante." Después de recoger y lavar las colchonetas fue al baño se baño, y fue al cuarto a vestirse. Los sostenes le molestaban, porque ten'a sus pezones demasiados sensibles, y las pantaletas apretaban su coño causándole molestias también. Ella pensó y se quito la ropa interior, entonces busco una falda y se la puso, luego una franela pero los pezones forzaban el tejido, pensó y dijo: "Que diablos" dejándose la franela sin sostenes. Después ella se dedico a las cosas de la casa, tratando de olvidar todo lo que hab'a vivido en las últimas horas. Escucho una corneta y supo que sus hijos hab'an llegado, miro el reloj, y se dio cuenta que la tarde ya estaba cayendo, salió al porche y vio a sus niños bajando de la camioneta y corriendo a la casa. El abuelo hab'a tra'do a los muchachos, pero como hab'a hecho en las oportunidades anteriores no se bajo, sino que saludo con la mano, y después que los niños se dirig'an a la casa, arranco y se fue. Los niños que iban llegando se abalanzaban contra su madre y le daban el beso de cariño. Todos notaron que su madre se ve'a diferente, pero no atinaban que era. Patty dijo. "¿Mami que tienes en tus tetas?" "Nada cariño. ¿Por qué? Ah ya se a que te refieres. ¿Es esto?" tocando un pezón a través de la franela, enviándole un calambre que recorrió del pezón a su coño. "Entremos que quiero mostrarles algo." Sin responder la pregunta. Los niños entraron. Capitulo Cuando ya hab'a ca'do la noche y estaban reunidos viendo televisión. Mar'a salió del cuarto con la cámara: "Niños pónganse cómodos para que vean lo que tengo aqu'. Pero primero vamos hacer unas cotufas. ¿Qué dicen?" "S' mami." Aplaudiendo, dijo Patty. "Buenos niñas acompáñeme a la cocina, y ustedes chicos conecten la cámara al amplificador de video y pongan la pantalla." Los muchachos fueron rápidamente por un amplificador de pantalla que su padre hab'a comprado y lo usaban para ver pel'culas. El aparato ten'a una pantalla plegable de un material parecido a una tela blanca, que era de dos metros por dos metros. Ellos fueron a la sala y dispusieron las cosas en su lugar, entonces conectaron la cámara. Cuando terminaron su madre y las niñas tra'an un bol grande lleno de cotufas y refrescos que dio a cada uno. Todos se acomodaron esperando que su mamá encendiera la pel'cula, Mar'a dijo: "Niños, después que ustedes salieron con sus abuelos, yo me prepare y fui a la colina, porque ten'a curiosidad para que estaban armando esa tarima en medio del charco. ¿Recuerdan?" todos asintieron con la cabeza, "Bueno prepárense para ver esto." Y Mar'a encendió la cámara. Luego apago las luces de la casa dejando todo oscuro. Mientras estaban viendo el video, Mar'a estaba pendiente de cómo sus hijos, tomaban aquel material. Los varones no apartaban sus ojos de la pantalla, y sus manos manoseaban su horca. Ella estaba segura que ese ser'a el comportamiento, de sus dos pequeños pervertidos, luego se fijo en las niñas. Las jovencitas tampoco apartaban su mirada de la cámara y sus manos también estaban en sus horcas, Patty ten'a su mano debajo de falda, y Juanita se retorc'a disimuladamente en su asiento, Mar'a supo que estaba excitada. El video duró una hora y cuando sab'a que iba terminar, se levanto y cuando termino encendió las luces. Ella vio las miradas de sus hijos que no pod'an ocultar su excitación. "Y entonces, que les pareció" dijo Mar'a. Los niños no atinaban a hablar. Para sorpresa de Mar'a fue Juanita quien dijo: "A m' me gusta." "Estaba Cool" dijo Patty. Pedrito agrego: "Nosotros también deber'amos organizar una fiesta as'." "Estaba del carajo" dijo Pablito. Todos soltaron una risita ahogada. Mar'a dijo: "Esta bien, ustedes pueden usar el lenguaje que quieran, pero solo aqu' en la casa. Okey" "Mami puedo decir coño." "Si cariño, tu puedes decir coño, guevo, culo, puta perra, cualquier cosa que te dé la gana, pero solo aqu' en la casa okey. Lo mismo va para todos" respondió Mar'a a Patty. "Bueno después que termino la fiesta, yo estaba animada, y no quer'a regresar a la casa, entonces me acorde del camino extraño que llega al convento. Pensé que iba a perder el tiempo, pero de todas maneras no quer'a regresar a la casa, as' es que fui al camino y empecé a caminar hac'a la montaña. Ya llevaba una hora caminando y no ve'a nada diferente, pero de repente escuche un barbulló de voces a las afueras del camino, el lugar era un potrero, yo me desvié del camino porque quer'a saber que era toda esa bulla, con cuidado me acerque para que no me fueran a ver. Entonces vi a lo lejos lo que parec'a un incendio, pero cuando estaba más cerca vi que eran personas que sosten'an antorchas, me acerque todo lo que pude para que no me vieran, hasta llegar a un árbol donde me sent'a segura. Las voces eran canticos religiosos. Pero será mejor que vean el siguiente video." Mar'a apago la luz y encendió de nuevo la cámara. El video era de aproximadamente otra hora. Mar'a ve'a como sus varones apretaban sus muslos, mientras no quitaban sus manos de la bragueta, y los ojos de la pantalla, las niñas también estaban de igual manera. Cuando el video termino Mar'a dejo que la pantalla quedara en blanco, y un susurro general de desaprobación se escucho en la casa. "Oh mamá, esas personas son monjas." Dijo Juanita. "Mami vio como esa mujer se metió ese palo en el culo. Que Cool" "Me parece imposible, es eso posible." Dijo Pedrito. "Pues si es posible, ustedes lo vieron. Y por el coño también es posible, ustedes lo vieron. Bueno eso no es extraño si tomamos en cuenta que ustedes salen por all' cuando nacen." "No puedo creerlo, eran monjas." Volvió a decir Juanita que parec'a no entender. "Y cuál es el problema, si eran monjas. Son mujeres, como nosotras, y tienen coños como nosotras." "Si bueno es verdad." Después de hacer y responder preguntas, Mar'a termino la conversación mandando a sus niños a dormir, porque al otro d'a hab'a colegio y ella ten'a que trabajar. Capitulo siete Después de aquel fin de semana, las cosas empezaron a cambiar en la casa de Mar'a. Los niños y niñas empezaron a ser más abiertos, no era extraño escuchar una mala palabra. Las jovencitas empezaron a vestir sexy en la casa, con faldas cortas, y franelas que escasamente cubr'an sus tetas y shorts de jean que ella les hab'a cortado. Los pobres niños ten'an que tragar duro, cada vez que sus hermanas andaban por la casa exponiendo sus nalgas a ellos. Mar'a sin embargo se dedico más a Vigilante, cuando ten'a cualquier tiempo disponible lo soltaba de la cadena y jugaba con él. Lo hab'a bañado e incluso, lo manten'a peinado, y le hab'a cortado las garras. El viernes en la tarde Mar'a llego con nuevas para sus hijos: "Adivinen niños, mañana vamos a conocer el convento." La cabeza de todos se fijaron en su mamá, como si esto no era posible. Mar'a explico: "Yo estuve preguntando y me entere que el convento está abierto al público los sábados durante el d'a. El lugar fue declarado como sitio tur'stico por su arquitectura. El dinero que recaudan es una ayuda para mantener las instalaciones. Por eso mañana vamos y le echaremos una mirada." "Yo quiero conocer a la mujer que se metió su palo por el culo." Dijo Patty "No vayan a mencionar nada, que nos comprometan. Ustedes van y se comportan como si no supieran nada, de todas maneras es dif'cil reconocer a las monjas una de otra, porque todas visten igual." Los niños estaban entusiasmados. Al siguiente d'a temprano Mar'a y sus hijos estaban delante del convento, también hab'an unas quince personas esperando, la mayor'a eran familias que estaban de paso. Cuando abrió el convento una monja invito a entrar al grupo. Todos entraron a una sala de recibo grande de unos diez metros de altura, el techo era una cúpula sostenida con columnas góticas, la sala era espaciosa y todos cab'an en el lugar y aun quedaba espacio. Las paredes estaban adornadas con cuadros religiosos, y pinturas de artistas antiguos. Las personas caminaban por la sala entusiasmadas por la arquitectura. Mar'a y los niños recorrieron la sala, tomando algunas fotos con sus hijos al lado de alguna escultura o pintura. Cuando se abrió una ventana al fondo, todos se dirigieron a comprar las entradas. Mar'a también se acerco junto con sus hijos, y esperaron que todos compraran los tickets. Hab'a una cartelera a un costado de la ventana que distorsionaba la ambientación. Mar'a se cerco para leer la información que all' se expon'a. Los papeles que llenaban la cartelera era información de cómo comportarse en un aposento sagrado. A Mar'a le llamo particularmente la atención una nota que dec'a que el convento aceptaba contribuciones voluntarias de aquellas almas que a bien quisieran dar. Hab'a una nota al final de la cartelera donde invitaba a los padres a abrir sus almas a Dios, invitándolos para los estudios que impart'an en el convento donde enseñaba a las familias a convivir bajo la protección del creador. Cuando todos hab'an comprado sus entradas Mar'a se acerco a la ventana, donde una monja cariñosa estaba vendiendo los tickets, después de dar la bienvenida y felicitar a Mar'a por haber tra'do a sus hijos para que se acercaran al señor. Le dio las entradas. Cuando iban caminado a la puerta de acceso al interior del convento, Juanita le dijo en voz baja a Mar'a. "Mamá ella era una de las monjas que estaba en el video, estoy segura" "Tú también te diste cuenta. Aunque como dije antes todas se parecen." Cuando atravesaron la puerta entraron a un pasillo, donde estaba la multitud reunida, mientras escuchaba a otra monja que se estaba presentando y que les ser'a la gu'a por el aposento. Después que indico como ser'a el recorrió y que ella tratar'a de responder a todas las inquietudes que tuvieran, invito a seguirla. Recorrieron un pasillo espacioso que estaba lleno de pinturas de tinte religioso, el pasillo rodeaba un jard'n que parec'a estar en el centro del convento, a medida que iban caminando se ve'an puertas cerradas, que los curiosos preguntaban porque estaban all', a lo que la monja explicaba que estaba detrás de cada una. De repente se desviaron y empezaron a subir por una escalera de madera. Al subir la escalera llegaron a un lugar que parec'a ser residencial. La monja explico que era la residencia de la madre superior, y que ella los estaba esperando en su oficina, para saludarlos. Al final hab'a una puerta grande de madera de dos hojas, que estaba de frente al pasillo. En la parte superior de la puerta se le'a "Sor Teresa. Madre superiora" la monja toco la puerta y empujo, las dos hojas se abrieron y con una reverencia ella hablo, después se volteo y mando a pasar al grupo. Era una oficina digna del vaticano, y con un escritorio grande de madera, todo al mismo estilo de los muebles que hab'an visto. La oficina era grande y todos cab'an sin ningún problema. Detrás del escritorio estaba la madre superiora de pie. Para Mar'a no hab'a duda, esta mujer era la l'der que ella hab'a visto en el campo. Los niños también lo notaron y se daban con el codo uno al otro en señal de conocimiento. Mar'a hizo un ademan de silencio, la madre superiora fue presentándose a cada uno y les daba la bienvenida. Cuando Mar'a estaba frente a ella no pod'a creer que ella hab'a visto a esta mujer desnuda, y con un gran falo en su coño. Se preguntaba si todav'a llevaba los anillos y s'mbolos fálicos. Disimulo, mientras la mujer le extend'a la bienvenida, con una voz muy educada, y cariñosa. Lo que más le preocupo a Mar'a era el comportamiento de sus hijos que sab'an quién era esta mujer, ella noto el nerviosismo de ellos, como si estuvieran viendo un fantasma. Sor teresa noto el nerviosismo de los niños, pero no le parec'a extraño, siempre le ocurr'a con la mayor'a de los niños. Después de salir del lugar, el recorrido parec'a monótono porque todos los lugares que visitaban eran parecidos. Mar'a y los muchachos no le importaban todas las explicaciones e historia que daba de cada rincón que iban visitando, ellos estaban más pendientes de las monjas que se encontraban por el camino. Luego atravesaron otra plaza, para llegar a unos salones hechos al mismo estilo con ventanales grandes y estaba lleno de jóvenes aspirantes a monjas. Al final fueron al patio trasero donde hab'a estado Mar'a. El lugar era una mini granja, donde cultivaban, cereales, papas, vegetales, aliños, etc. A un costado estaba un establo. La monja explico que all' se quedaban algunas bestias que se utilizaban para cargar, mercanc'a que ten'an que comprar a los granjeros locales. También dijo que a veces manten'an temporalmente un o dos toros que compraban, para luego mandarlo a matar para surtir la carne. Mar'a recordó las fotos que estaban en el afiche. Después que termino la visita, Mar'a hablo con la monja que serv'a de gu'a, para ver si era posible hablar con la Madre Superiora. Le explico que ella hab'a le'do la cartelera y estaba interesada en colaborar. La monja inmediatamente llamo a alguien a quien llamaba hermana, después de un rato recibió la llamada de la misma persona y le dijo que la madre superiora podr'a atenderlos. Cuando entraron de nuevo a la oficina de la madre superiora, la madre superiora invito a los niños a sentarse en un mueble grande que estaba retirado, al lado de un ventanal. A Mar'a la invito a sentarse en una silla que estaba al otro extremo del escritorio. "La hermana Sara me dijo que usted estaba interesada en contribuir con nuestra sagrada hermandad. Y en nombre de todas yo le estoy muy agradecida." Mar'a le explico a la madre superiora que ella viv'a en el pueblo, detrás de la colina, que era dueña de una granja, que vend'a el producto a los comercios, y también ten'a bajo su propiedad algunos animales. Mar'a dijo que ella podr'a contribuir, con mercanc'a que ella cultivaba en la granja, o con algún animal que ellas necesitaran o con dinero. La madre superiora agradeció. Mar'a dijo que al menos que ellas tuvieran alguna necesidad especial, ella contribuir'a modestamente con algo de dinero semanalmente. La Madre superiora saco una tarjeta de la hermandad donde estaba escrito la cuenta bancaria. Mar'a objeto y dijo que si no le importaba ella har'a la contribución personalmente, y si necesitaban alimento o algún animal, lo podr'a pedir con confianza. Mar'a le dio la dirección de la casa. La conversación se hizo amena entre las dos mujeres, empezó a nacer una filis entre ellas. Mar'a llamo a los niños que estaban mirando por la ventana, les presentó a sus hijos. Luego la conversación fue amena entre todos como si ya se hubieran conocido de hace tiempo. Para sellar la amistad la madre superiora fue a un gabinete y saco una botella de vino, que abrió y brindo. Cuando salieron del convento, hab'a un sentimiento de frustración generalizado, no era lo que ellos esperaban. Mar'a los animo diciendo: "habrá otras oportunidades, tranquilos." Después que estaban en casa, Mar'a salió a atender los asuntos de negocios con el capataz. Las cosas estaban mejorando y las ventas hab'an subido. Ella ya estaba cansada de salir a vender. Por lo que quer'a hablar ese asunto con el capataz. El señor Rodrigo era un hombre que estaba en sus sesenta. Era un hombre grande y fuerte de tez trigueña. Su esposa era una mujer negra de unos cincuenta años y parec'a no envejecer. Sus hijos ya estaban casados y viv'an en otro pueblo. El señor Rodrigo y su esposa viv'an en una de las casas que José su difunto esposo hab'a construido para albergar a aquellas familias que trabajaban en la granja, y no ten'an donde vivir. En la granja viv'an diez familias que habitaban en pequeñas casas también construidas por su esposo, todos eran extranjeros. El señor Rodrigo no era extranjero pero el señor José le hab'a pedido que viviera en la granja después que le dio el cargo de capataz para que pudiera atender de cerca los asuntos. En el campo trabajaban unas veinte personas durante todo el año. Pero en temporada de cosecha, se empleaban trabajadores temporeros, que ocupaban un salón grande que ten'a cocina y baños y les serv'a de habitación. También se contrataba una cocinera. Cuando ella llegaba a la casa del señor Rodrigo, él y su esposa se dedicaban a atenderla. A Mar'a siempre le gustó, el deseo de trabajar y la dedicación de él. En sus veinte años que ten'a trabajando nunca conoció de él alguna falta. Era un hombre recto. Después que ella hab'a llegado y recibió las atenciones de siempre. Mar'a, el señor Rodrigo y su esposa, se sentaron en el corredor de la casa. Mar'a le explico al señor Rodrigo que ella le estar'a eternamente agradecida si él asum'a el reto de ser el repartidor de la mercanc'a, porque ella quer'a dedicarse a sus hijos como lo hac'a antes que su esposo muriera. Le dijo que no conoc'a a otra persona a quien le pudiera dar esta responsabilidad. El señor Rodrigo acepto. Entonces ella le dijo si conoc'a a alguien de los trabajadores de confianza que pudiera asumir el cargo de capataz. Él le dijo que sab'a quién pod'a asumir esa responsabilidad, y él mismo se encargaba de ese asunto. Mar'a agradeció a él y a su esposa. Después ella le explico cómo era la ruta que ella segu'a. Y se despidió. Mar'a en su regreso a la casa no pod'a contener su felicidad, porque ahora podr'a tener más tiempo con su Vigilante. Sus hijos se iban en la mañana al colegio y regresaban cuando ya estaba cayendo la tarde. Cuando ella llego a la casa, los niños estaban ante la televisión, las niñas estaban usando de nuevo los shorts de jean, con franela. Ella termino de llegar y después se sentó con ellos. Sus hijos se hab'an acostumbrado a las experiencias fuertes, y parec'an estar aburridos, con estos programas de televisión que unas semanas atrás se peleaban por tener el mejor puesto. Mar'a se levantó y fue por sus tijeras, entonces regreso a la sala. Se sentó y dijo: "Patty cariño ven acá." Patty se levanto de su asiento y se acerco a su mamá. Mar'a la llevo entre sus piernas, la observo y dijo: "Vamos hacer algunos arreglos a esta franela." Tomo las tijeras e hizo un corte en la franela alrededor un poco más abajo de sus pequeños meloncitos. Luego hizo cortes verticales pequeños hasta justo debajo de los senos, todo alrededor de la franela, cada tira era como medio cent'metro de ancho. Después dejo las tijeras en el mueble y retiro a su hija, admirando lo sexy que le quedaba la franela. Todos los demás niños hab'an dejado de ver televisión y estaban pendientes de lo que estaba haciendo su mamá. "Te gusta, anda al espejo." Patty fue al espejo, y modelo ante él. Admirando su pequeño pero bien desarrollado cuerpo, cuando regreso donde su mamá. Mar'a agrego: "Perfecto cariño, menos mal que aqu' no hay viejos, porque estar'an babeándose." Patty y los demás sonrieron. "Aún hay otro detalle que solucionar. Porque no te quitas esas pantaletas molestas." "Mamá, ¿Puedo? Digo que hay de Pablito y Pedrito" "cariño yo estoy segura que a ellos les encantará. Yo he visto como estos pervertidos las ven a ustedes dos. No se preocupen por ellos." Patty fue a su cuarto y regreso sin pantaletas. La vista era para matar pervertidos que sufren del corazón. Ahora las nalgas quedaban completamente expuestas porque la horca del short se met'a completamente en la raja de las nalgas, y parte se met'a en la raja de su pequeño coño, exponiendo los labios externos. Las manos de los muchachos inmediatamente fueron a la horca de sus shorts, tratando de ocultar el hard-on que la vista le provocó. Mar'a vio y dijo. "No te dije cariño. Parece que tus hermanos les gusta lo que ven." "Juanita ven ahora tu." Juanita ya hab'a perdido sus inhibiciones y se acerco donde su mamá. Mar'a hizo lo mismo con la franela de Juanita. Entonces ella fue al espejo y sonrió ante la vista erótica de su cuerpo. Mar'a le dijo que se quitara los sostenes y las pantaletas, justo como hab'a hecho su hermana. Juanita fue a su cuarto y cuando regreso, hasta Mar'a se lamio los labios por lo que vio. Sus tetas parec'an saltar con orgullo, y sus pezones estiraban la tela de la franela. Mar'a supo que ella estaba excitada. Entonces la mirada bajo al coño de la adolecente. Que ten'a la horca del short completamente metida en el coño desarrollado e hinchado, exponiendo sus labios. Luego se volteo y las nalgas blancas estaban completamente expuestas, al igual que Patty la tira de la horca se metió en la raja del culo. "Ve as' está mejor para dos pervertidas exhibicionistas." Mar'a vio los bultos en las horcas que los niños no pod'an ocultar. Entonces dijo: "Bueno niños ya es hora que dejen a un lado esa timidez. Vamos qu'tense esos shorts sin protestar." Los dos jovencitos hicieron justo como les dijo su mamá. Quedando en interiores. "Ahora qu'tense esos interiores." Los dos muchachos se quitaron sus interiores quedando en pelotas. Pero inmediatamente pusieron sus manos cubriendo sus penes erectos. "Ya está bueno. Pongan sus manos atrás." El pene de Pablito era de unos diez cent'metros de largo, y unos dos de grueso. Pero el de Pedrito era de unos orgullosos dieciocho cent'metros y tres de grueso. Las miradas de Mar'a y Juanita se admiraron por tremendo tamaño de pene para un niño de trece años. "Yo sospecho que es lo que hacen ustedes con sus penes cuando están arriba en la colina. Y quiero que ustedes sean sinceros, con nosotras. Le prometo que nada de lo que pase aqu' sale de la casa, y ustedes saben muy bien que yo les dije que las cosas que hagamos entre nosotros nadie las debe saber. Vamos niños, no tienen que temer nada. Eso es muy normal. Mira yo se que Patty y juanita juegan juntas en la cama. Y se lamen sus coños. Yo lo sé y ustedes ahora lo saben." Las niñas no pod'an creer lo que escuchaban. ¿Cómo sab'a su mamá que ellas jugaban en la cama? pero era cierto. Mar'a siguió: "vengan acá niños." Los dos se acercaron a su mamá. Ella los acercó y los puso frente a frente, entonces ella tomo la mano de Pablito y la puso en el pene de Pedrito, luego la mano de Pedrito y la puso en el pene de Pablito. Luego los empujo. Los niños no sab'an que decir o hacer, pero ya sab'an que su madre conoc'a su secreto. El saber que su madre y sus hermanas supieran, y que su madre les hubiera prometido que sus secretos se quedaban entre ellos, los animo. Entonces ellos se entregaron al desenfreno, como lo hac'an en la colina. Se besaron como dos amantes, se mamaron sus guevos, se lamieron el culo. El espectáculo terminó después que Pedrito cogió a Pablito y Pablito cogió a Pedrito. Después que quedaron agotados en el piso, las niñas y su mamá aplaudieron. Después que ellos se repusieron y sintieron vergüenza por el desenfreno. Mar'a dijo: "Niños, nadie debe sentirse avergonzado por lo que es. Mira todos los niños, alguna vez han tenido sexo con otros niños o incluso con hombres, y las niñas con otras niñas o mujeres. Si a ustedes les gustan los niños o los hombres ese es su problema y todos aqu' lo respetamos. ¿Dime algo, les gusta sentirse femeninas?" Los dos niños asintieron con sus cabezas. "Bueno, ya todo está dicho, si quieren se visten o se quedan desnudos. Ustedes deciden, es más les doy una idea. Porque no van y me traen un jean cada uno y le hacemos algún arreglo. Y franelas." Los dos niños ya animados se fueron a sus cuartos y trajeron cada uno un jean y franela. Mar'a corto el jean de Pablito haciendo un short del pantalón como los que hab'a hecho a sus niñas. Después se los dio para que se lo pusiera, sin usar interior. Pablito se puso el short y as' como en sus hermanas, la tira de la horca del short se clavo en su culo exponiendo sus nalgas. La horca apenas proteg'a que su pene y bolas no se expusieran. Mar'a observo y dijo: "Qu'tate el short que no te quedan. Patty ve por unos de tus cacheteros y me lo traes." Patty corrió y busco un cachetero. Mar'a tomo el cachetero y le hizo algunos cortes entonces se lo lanzó a Pablito. Pablito se puso el cachetero. El cachetero se ajustaba al cuerpo del jovencito, sus bolas y pene abultaban la horca. Sin embargo Mar'a hab'a dejado una tira que se metió en la raja del culo, exponiendo sus nalgas. Después le pidió que se pusiera la franela, y Mar'a le hizo un corte como hab'a hecho con las franelas de sus niñas. Pablito se ve'a completamente femenino. Después pidió a Juanita que buscara un cachetero de ella e hizo lo mismo que hab'a hecho con el de Patty. Cuando termino los dos niños parec'an dos niñas. Mar'a agrego: "Yo voy a comprarles ropa femenina para ustedes, y lo pueden usar aqu' en la casa. Es más, vamos hacer una regla. Mientras cualquiera de nosotros este en casa, está completamente prohibido usar ropa masculina. ¿Aceptan o no?" Todos dijeron al un'sono, "De cuerdo" Mar'a agrego. "Como aqu' todos estamos siendo sinceros, yo tengo un secreto que quiero que ustedes sepan. Ustedes saben que yo soy una exhibicionista." Todos asintieron con sus miradas. "Bueno cuando ustedes se fueron con la abuela y abuelo, yo les dije que me prepare para ir a la colina. Bueno esto fue lo que paso. Me acosté a descansar un poco y me quede profundamente dormida, cuando me desperté ya era de noche. Yo decid' que iba a ir desnuda a la colina esa noche, entonces me desnude y me bañe con la loción anti repelente, después busque la linterna y la cámara. Yo me sent'a excitada, pero quer'a que aquella noche fuera inolvidable para m', entonces fui a la vitrina y busque una medicina, que sirve como afrodisiaco, que mi esposo una vez hab'a tra'do, porque un cliente que tiene familia en la india le hab'a mandado. La medicina la guardamos en la vitrina y nos olvidamos de ella. Pero aquella noche me acorde de la medicina, y la saque, entonces después de leer las instrucciones me tome en un vaso de leche una copa de ese afrodisiaco, aunque recomienda que agregue cum, para mejores resultados. ¿Saben ustedes lo que es cum?" Nadie respondió, "Cum es el semen que escupen los guevos cuando están acabando. Las mujeres también echamos cum pero normalmente queda dentro de nuestros coños cuando acabamos también. Después sal' desnuda de la casa rumbo a la colina, cuando hab'a caminado un trayecto empecé a sentir un calor por el cuerpo y una sensación de excitación que nunca hab'a experimentado. El coño me picaba tanto que ten'a que estrujarlo violentamente, pero lo que lograba era aumentar la excitación, el culo también me picaba que me tuve que meter la linterna para calmarlo, cuando llegue a la colina ya hab'a experimentado como cinco orgasmos. A pesar que estuve andando por ah' hasta la madrugada, la excitación no menguaba, a pesar que ya hab'a perdido la cuenta de todos los orgasmos que hab'a tenido. Cuando llegue a la casa en la madrugada, el perro me reconoció y se me abalanzó lamiéndome por todas partes, incluso por mi coño y culo, la lengua del perro aumento mi excitación, que incluso me abr' de piernas para darle más acceso a mi coño, yo vi su guevo rojo colgando de la barriga, para entonces mi mente no pensaba, sino mi coño. Entonces met' al perro a la casa y lo lleve a mi cuarto. Fui de nuevo a la vitrina y me prepare otro vaso de medicina y lo tome, luego busque la colchoneta que está en el cuarto de chécheres, cuando iba de regreso al cuarto vi el collar de Bianca que guardamos de recuerdo, después que murió. Me lleve el collar y la colchoneta al cuarto, extend' la colchoneta en el piso, luego fui al espejo. Recuerdo que cuando ustedes llegaron de donde la abuela, Patty me pregunto que ten'a debajo de la franela, y yo no le respond'. Bueno cuando me vi en el espejo, los pezones hab'an crecido casi cinco cent'metros y estaban duros como piedras, los toque y un rayo me sacudió de las tetas hasta mi coño, haciéndome chillar de placer, entonces mire mi coño y este estaba completamente hinchado las labias eran tan gruesas como los dedos pulgares m'os, mi coño parec'a una flor, y el cl'toris parec'an un pequeño pene, del tamaño de un dedo meñique, entonces me puse el collar de Bianca, y jure que ser'a la perra de Vigilante, incluso pensé que desde entonces me llamar'a Bianca Mar'a, la perra de Vigilante. Después fui donde el perro y me cogió como nunca alguien me hab'a cogido en la vida. Por eso es que desde aquel d'a, mis sentimientos hacia el perro han cambiado y me he sentido deprimida porque desde aquella noche no he podido estar de nuevo con mi amante. " Las últimas palabras sonaron melancólicas, "Bueno, ya ahora no hay secretos entre nosotros. Pero es muy importante y quiero que juren. Que cualquier cosa que nosotros hagamos, no sale de la casa. Entendido." Todos estaban sorprendidos por la historia que acababan de escuchar. Pero después de reaccionar dijeron con voz alta. "Lo juramos." Juanita agrego. "Mami, no tienes porque privarte de tus placeres, ahora ya todos sabemos, y todos estamos contentos con lo que somos. Es más yo propongo algo. Desde este momento usted será llamada Bianca Mar'a, la perra de Vigilante o de cualquier otro Perro, que se quiera tirar. En esta casa usted será la perra de la casa, y nosotros la llamaremos, Bianca o Perra. El que esté de acuerdo conmigo levante la mano." Todos levantaron la mano. Juanita agrego: ¿Mamá está usted de acuerdo con todo lo que dije? Mar'a con voz fuerte dijo: "lo estoy" Juanita agrego: Bueno levante tu mano derecha y ponga la otra en el pecho. Mar'a hizo como Juanita hab'a dicho, Juanita agrego: "¿Jura usted a partir de este momento ser la perra de Vigilante o cualquier otro perro que se quiera tirar, y que en esta casa será llamada perra, o Bianca?" Mar'a juro con voz fuerte. Todos aplaudieron, Juanita siguió: "no es justo que el perro este apartado de su perra, la perra debe cuidar de su perro, el perro estará siempre con la perra y dormirá con él. También debe llevar el collar que la identifica, y andar desnuda mientras esta con su perro. ¿Los que estén de acuerdo conmigo levanten la mano?" todos al un'sono levantaron la mano. Juanita siguió: Patty ve al cuarto y te traes el collar para la perra." Patty fue corriendo y trajo el collar. "También propongo que Pedrito y Pablito sean llamados en esta casa, Pabla y Petra. Los que estén de acuerdo levanten la mano." Todos levantaron la mano. Luego dirigiéndose de nuevo a su mamá dijo: "Ahora perra ya no tienes derecho a estar vestida en esta casa. Niñas vayan y desnuden a la perra." Patty, Pedrito y Pablito, fueron y quitaron el vestido de Mar'a dejándola en sostenes y pantaletas. Después sin miramientos le quitaron sus sostenes y pantaletas dejando a Mar'a desnuda delante de sus hijos. Mar'a no sent'a ninguna vergüenza, más bien su excitación la ten'a al borde. "Vamos en cuatro perra" dijo con voz autoritaria Juanita. Mar'a se puso en cuatro sumisamente. Sus tetas redondas colgaban, y sus nalgas se ergu'an orgullosamente, los niños rodearon a Mar'a admirando su cuerpo, Mar'a sent'a un fuego que le quemaba el coño, sin que le dijera nada ella abrió sus piernas exponiendo a los niños su coño inflado por la excitación. Juanita dijo: "Parece que la perra esta en calor." Después ella puso el collar alrededor del cuello de su madre. "Bueno perra ve por tu perro. Pero espera, Petra anda al gabinete y traiga la medicina" Pedrito fue al gabinete y trajo un frasco que estaba escrito en un idioma extraño, junto al frasco hab'a otro papel, lo leyó, y lo recogió trayéndolo a Juanita. Juanita leyó las instrucciones entonces dijo: "Petra y Pabla. Háganse la paja ahora" sin escrúpulos los dos niños sacaron sus penes por un lado de las licras, y comenzaron a masturbarse. Cuando acabaron vertieron el semen en un vaso que Patty hab'a tra'do, después Juanita vertió una copa del afrodisiaco y lo lleno de leche. "Vamos perra tómate tu medicina" Antes de tomar el vaso Mar'a dijo: "Vamos aclarar algunas cosas. Yo estoy de acuerdo con todo lo que tienen destinado para m', pero como yo voy a ser una perra, significa que los quehaceres de la casa serán responsabilidad de otro, no voy a cocinar, ni lavar. Entendido" Juanita pensó y vio sentido en lo que ella estaba diciendo. Mar'a noto la preocupación entonces agrego. "Yo tengo la persona que se puede encargar de todo." "Pero si traemos a un extraño a la casa, ya no podemos seguir con este juego." "No hay problema, por esta persona." Luego Mar'a contó con detalle como ella hab'a conocido a la mujer e hija del tipo aquel que se hab'a escapado de la cárcel y que tuvo a punto de violarla. "La mujer y la hija son unas zorras, la esposa tiene sexo con su pequeño nieto y su hija, y cualquiera que se le atraviesa, incluso con el perro. La hija trabaja en un bar y está preñada de nuevo. Ellas mantendrán silencio, estoy segura." "Okey entonces mañana será mejor que vaya y le haga una visita, mientras tanto yo me encargo de la cocina y Pabla y Petra, de lo demás." "otra cosa cuando me tome esa medicina será, mejor que vaya al baño, porque cuando hace efecto, inmediatamente relaja el culo y el coño, limpiando el recto y la vejiga." "usted tiene libertad de hacer lo que quiera en esta casa, nadie le va ordenar donde ir o que hacer, será como vigilante, el andará por la casa libremente. Recuerde que usted es una perra y tiene que comportarse como una perra." Mar'a bebió el contenido del vaso, entonces se levanto y fue a su cuarto, busco los tacones altos y salió de la casa. Los niños se quedaron admirando la espectacular figura de su madre, sus nalgas se bamboleaban de lado a lado, mientras caminaba. Mar'a salió de la casa y todav'a era de d'a, aunque se ve'a que la noche se estaba acercando, ella corrió a los arbustos que estaban lejos en el patio trasero, y vacio su culo y vejiga. La medicina actuaba como una droga que le nublaba la mente, solo pod'a pensar en sexo, y en hacer cosas pervertidas. Miro sus pezones y estos hab'an crecido hasta diez cent'metros, se apretó la teta derecha, provocándole un orgasmo al instante, Mar'a noto que de sus pezones botaba leche como si fuera una mujer recién parida, además sus tetas parec'an más grandes, luego miro su coño y este era el doble del tamaño de lo que fue la última vez, las labias parec'an querer salirse, y se inflaron que parec'an dos cambures, ella abrió un poco sus piernas y el coño quedo boquiabierto. Entonces llevo su mano al culo y este estaba completamente relajado, ella se metió una mano en su culo con facilidad sin ofrecer ninguna resistencia. Ella no pod'a pensar, solo quer'a tener algo que le consolara su culo y coño, entonces regreso a la casa. Cuando entro los niños estaban a la expectativa, la visión de su madre los impresiono. Los ojos de Mar'a parec'an ser más grandes, su mirada era de excitación, su boca se ve'a más sensual que nunca, los labios eran más gruesos. Su coño florec'a mientras su cl'toris parec'a el pene de Pablito, la tez de la piel se hab'a tornado rojiza. Mar'a corrió a la cocina y los niños la siguieron, Mar'a busco desesperadamente algo, no parec'a hallar nada que le satisficiera, entonces busco en un gabinete y vio una bolsa de papel. La rompió y al piso cayo un pan campesino de casi medio metro y unos diez cent'metros de grueso. Ella sab'a que si usaba ese pan se quedar'a sin cena. Ella acostumbraba comer para la cena un emparedado con medio pan campesino relleno de tocineta y ensalada. Los muchachos vieron como su madre buscaba un cuchillo y abr'a el pan por la mitad, después fue a la nevera y saco el tocino haciendo rebanadas, ellos ya hab'an visto a su madre preparar la cena de ella, por lo que se imaginaron que quizás le hab'a dado hambre, como reacción a la medicina. Mar'a termino de preparar el pan con tomate, lechuga, cebolla, y aceitunas que eran su debilidad. Después de preparado el pan era más grueso, los niños esperaban que su mamá se dispusiera a comerse ese pan, pero en cambio mar'a se puso en cuclillas, entonces grito: "Coño no se queden ah' como los mismos estúpidos, venga y me ayudan", los niños se acercaron entonces Mar'a dijo: "Petra toma el pan con las manos sin dejar caer nada y métamelo en el culo, que no aguanto la sensación de tener algo grande en mi culo. Ella agarro sus nalgas con las manos abriéndolas, exponiendo a sus hijos un culo boquiabierto, el anillo del culo estaba hinchado y sobresal'a. Pedrito sin ningún pudor agarro el pan, lo centro en el culo. "Mételo ya, no aguanto. Oh s' que rico." Pedrito metió todo el pan en el culo de su mamá hasta que este desapareció completamente en su ano. Mar'a no dejaba de gemir, y decir vulgaridades a sus hijos, cuando el pan estaba completamente en su culo, Mar'a se apoyo del mostrador para pasar el intenso orgasmo que sintió, los niños vieron como de su coño sal'a un liquido blanco, que baños sus mulos. Patty dijo: "Mira el coño de la perra, como esta chorreando leche, ¿eso es cum?" Mar'a contesto: "si cariño ese es mi cum. OH que rico. Oh s', soy una perra feliz. " Después de pasar el orgasmo Mar'a fue a la nevera y saco una lechosa madura, tan larga como el pan y tan gruesa, como de unos quince cent'metros de diámetro, ella se apoyo su culo sobre el fregadero entonces agarro y abrió su coño que ya estaba boquiabierto. Ella empezó a gritar de placer cuando apretó sus labias hinchadas con los dedos. Cuando dejo de gemir dijo: "Ven Patty cariño consuela a la perra, necesito esa gran cosa en mi coño." Patty fue y tomo la lechosa y empezó a empujar en el coño de su madre, mientras esta no dejaba de gritar, y vociferar de placer, Patty metió la lechosa completamente, Mar'a grito: "Empuja todo lo que puedas hasta que no pueda entrar más, vamos cariño." Patty empujo hasta que ten'a medio brazo dentro del coño de su madre, cuando encontró resistencia ella saco el brazo. Los ojos de mar'a estaban vidriosos. Cuando se sintió calmada, ella abandono la cocina, y salió al patio de nuevo. Los niños la siguieron; a Mar'a no le importaba si alguien la pod'a ver, fue donde Vigilante soltó la cadena de donde estaba amarrado, luego se agacho y le dio un beso húmedo en la boca, ante la mirada de asombro de sus hijos. Ellos miraron desde la esquina de la casa, ligando que nadie fuera a pasar en ese momento por el frente de la casa. A Mar'a no le importaba, después de acariciarlo y manosearlo, Mar'a llevo a su perro a la casa. Cuando entraron a la casa Mar'a soltó al perro, mientras este no dejaba de lamerla por todas partes, Mar'a expuso su coño y culo al perro. Para que le diera un baño de baba. Los niños se sentaron en la sala mientras miraban a su madre y al perro que parec'an dos amantes en celo. Mar'a se tiro al piso y empezó a mamar el órgano de Vigilante, como lo hab'a hecho con el reo. Casi todo el palo del perro desaparec'a en la garganta, el perro bombeaba, Mar'a saco el órgano mientras el perro segu'a bombeando. Unos minutos después un chorro de cum de perro fue directo a la boca de la mujer, Mar'a trago todo el cum sin desperdiciar nada, se saboreo después que el perro hab'a vertido la carga dentro de su boca. Mar'a no le importaba más, que estaba pasando a su alrededor o quien estaba mirando, ella sent'a que solo viv'a para complacer a su amante. Mientras tanto los niños se hab'an olvidado de su madre y todos estaban desnudos en el piso en una org'a familiar. Toda la familia estaba teniendo sexo, los hermanos entre s' mientras Mar'a estaba entusiasmada con el perro. Después que el perro termino de vaciar su semen en la boca mar'a se incorporó y vio a sus hijos entretenidos en la más obscena org'a, ella sonrió, entonces metió su mano en el coño y saco la lechosa, que le hab'a metido Patty. Miro su coño que parec'a tan abierto que parec'a que acababa de dar a luz a un hijo, ella dejo la lechosa a un lado y se dedico de nuevo a su amante. Media hora después ella y el perro estaban enganchados de nuevo. Los niños ya hab'an acabado la org'a y ve'an a su madre enganchada, as' como una perra se engancha con el perro. Ellos se levantaron de nuevo y se vistieron, entonces Juanita sugirió que Pedrito y Pablito deb'an parecer más femeninos, y todos fueron al cuarto de las niñas, dejando a su madre, jadeando mientras segu'a enganchada. Una hora después salieron del cuarto. Juanita hab'a maquillado a Pablito y a Pedrito, y Patty, también ella se hab'a maquillado. Para disimular el corte de cabello de sus dos hermanos, a cada uno le hizo dos colitas, cuando ellos se vieron en el espejo, estaban irreconocibles, cualquiera que los viera de seguro los confundir'a con niñas. Ellas le hab'an prestado zapatillas, para que no hubiera ningún rastro que los hiciera sentir masculinos. Los niños vieron a su mama que estaba tirada en el piso dormida, toda bañada de sudor y baba, sus muslos y coño chorreaban en el piso semen del perro y de ella dejando un charco en el piso. El perro se hab'a alejado y estaba echado en un rincón. Los niños fueron a la cocina y prepararon su cena, comieron y acomodaron la cocina. Mar'a segu'a dormida en el piso. Juanita fue y dijo, mientras la sacud'a: "Perra levántate" Mar'a empezó a reaccionar y se quedo mirando al techo, como si quisiera recordar que hab'a pasado, momentos después reacciono violentamente, sentándose en el piso mientras, sus hijos la miraban. Ella hecho una mirada alrededor, luego sonrió cuando vio que Pablito y Pedrito parec'an dos niñas. "Qué hora es dijo, mientras se levantaba del piso." "Son las diez, ya es hora de ir a la cama." Respondió juanita. "Oh dios que sed tengo", fue a la nevera y se tomo como un litro de agua de un solo jalón. Ella miro, en al cocina y se dio cuenta que ellos ya hab'an comido, entonces dijo. "Dios m'o que hambre tengo, me comer'a un elefante." "Sera mejor que prepare tu comida perra, ya nosotros comimos." "Yo ya prepare mi comida, antes que ustedes, mujerzuelas." Mar'a sonrió. "Quieren ver a la perra de su madre comerse la comida que preparo. Bueno vean. Quien de ustedes tiene que ir al baño a orinar", todos levantaron las manos. Ellos iban al baño a orinar justo antes de irse a dormir para no tener que levantarse de noche. Mar'a agrego: "Todav'a no vayan." Entonces ella se puso en cuclillas y pujo duro. Los niños miraban como el pan campesino sal'a de su culo, todo lleno de mierda. Después que el rolo de medio metro hab'a ca'do al piso, mar'a se levanto, y con una sonrisa como de burla dijo: "Ven yo les dije que yo ya hab'a preparado mi comida." Los niños no pod'an creer lo que hab'an escuchado, mientras Mar'a se agachaba y tomaba el pan untado de mierda con las dos manos y empezó a comérselo, como si fuera la última comida que iba a comer en d'as. Cuando termino se limpio las manos con la lengua, hasta que estaban limpias y se saboreo, extrañamente este bizarro espectáculo excito a los niños. Mar'a agrego: Quien va orinar primero. Patty levanto la mano. "Bueno cariño quiero que te quites ese short" Patty se quito el short exponiendo un coñito rojo. "Un que tenemos aqu'" Mar'a se agacho delante de su pequeña Patty, metió el dedo corazón en el inflado coño de su hija. "¿Quien te rompió la virginidad?" "Petra" respondió la niña con ojos de excitación, "Que suertudo, muchacho." Mar'a se hecho al piso boca arriaba y abrió la boca completamente. "Vamos cariño orina en la boca de la perra de tu madre." Patty se agacho hasta que su culo toco la nariz de su mamá y soltó el chorro de orines, Mar'a trago tan rápido como pudo, mientras lo demás corr'a por su cuellos y barriga. Entonces ordenó a Juanita hacer lo mismo. Después que Juanita vacio su vejiga en la boca de su mamá. Mar'a se incorporo y fue donde Pedrito, saco su órgano por un lado de la licra, y empezó a mamarlo hasta que su hijo acabo en su boca un chorro de semen. "Ahora orina, vamos dale a la perra de la casa el elixir." Mientras manten'a su guevo en la boca, Pedrito soltó el chorro de orines, que Mar'a trago sin soltar ninguna gota. Después hizo lo mismo con su pequeño. Cuando todos hab'an vaciado sus vejigas los mando a dormir. Mientras ella esperaba que le diera sueño de nuevo. Capitulo ocho Cuando los niños se levantaron en la mañana ya era casi mediod'a como ellos acostumbraban a levantarse los domingos. Encontraron una nota de su madre en puerta de la nevera donde dec'a que ella iba por la esposa del reo. Mientras Mar'a iba en camino a la casa Ana, pensaba en los acontecimientos ocurridos el último d'a. "Las cosas se aceleraron".n Cuando llego a la casita de barro, ella estacionó y bajo, el perro estaba atado a un árbol y empezó a ladrar, alertando a Ana y Anita que salieron con sus barrigas casi a explotar a la puerta. El perro pareció reconocer a Mar'a, y dejo de ladrar batiendo la cola. "Umm, ya olio a la perra en calor" pensaba Mar'a mientras avanzaba a la puerta donde las dos mujeres la esperaban con entusiasmo. Ella fue recibida y le alcanzaron una silla del sencillo comedor de pantry. Mar'a tomo asiento, mientras Ana y su hija, parec'an estar ansiosas por conocer de noticias. Mar'a noto la desesperación de ellas, y sintió lastima por la situación desesperada que estaban. "Me temo que tengo noticias que ustedes no esperan." Dijo mar'a mientras vio las miradas de desconsuelo en las mujeres. "Es imposible que dejen en libertad a Arturo. Ahora afronta otro cargo que lo sumaron al anterior, y tiene que esperar por lo menos otros cinco años, antes de hacer una consideración." Las mujeres se le aguaron los ojos. "Pero tengo una oferta para ustedes, yo les ofrezco un techo donde vivir, y no les va hacer falta nada. Lo prometo" las mujeres parec'an entusiasmadas ahora. "Necesito que una de ustedes me ayude en la casa, en los quehaceres e incluso van a recibir un sueldo. ¿Están de acuerdo?" sin pensarlo, las dos mujeres estuvieron de acuerdo. "Yo vine a ustedes, porque nuestras familias, tienen cosas bizarras en común y necesito completo silencio de lo que ustedes vean y escuchen en mi casa. As' como su secreto está seguro conmigo, necesito que nuestro secreto este seguro con ustedes. Si están de acuerdo, entonces podemos cerrar el trato." "por nosotras no hay problema, seremos como una tumba." Dijo Ana, casi que saltando de alegr'a. "Otra cosa más, ustedes pueden hacer con sus vidas lo que les dé la gana, pero es muy importante que cualquier cosa que hagan este fuera del conocimiento de la ley. No quiero problemas con la justicia. ¿Me entienden?" "Completamente señora." Respondió Ana de nuevo. Mar'a les dijo que ellas iban a vivir en un anexo que hab'a al lado de la casa que fue construido para alojar las visitas, pero que casi nunca se utilizó. El anexo estaba completamente equipado, por lo que no era necesario que llevaran cosas que no necesitaran. Las dos mujeres corrieron a recoger sus cosas personales, y alguno que otro art'culo que estaba en buen estado. Después con la ayuda de Mar'a montaron todo en la camioneta. Luego Ana cerró con llave la casita de barro y desato al perro. Ella y el perro junto con los corotos fueron en la parte de atrás, mientras Anita y el niño acompañaron a Mar'a en la cabina. Cuando llegaron a la casa Mar'a estacionó frente al anexo. El anexo estaba al lado de la casa, aunque no se pod'a ver desde la carretera. El anexo ten'a un corredor como era costumbre en todas las casas de la zona. Hab'a unos bancos grandes de madera. Después de amarrar el perro en un árbol que estaba al lado del anexo Mar'a entro a la casa con Anita y Ana cargando a Danielito. Las mujeres no pod'an creer lo que ve'an, el lugar era un palacio comparado con la mugrienta choza donde viv'an. Todo el interior estaba amueblado: Hab'a dos habitaciones grandes con camas matrimoniales en cada habitación y un baño común, una sala y la cocina comedor con todos sus implementos; en la parte de atrás hab'a otro cuarto que serv'a para guardar cosas. Mar'a dijo que all' pod'an poner las cosas que no necesitaban. Mar'a busco en un gabinete de la cocina y saco un llavero, donde estaba una copia de las llaves del anexo y otra copia de las llaves de la puerta principal de la casa y se la dio a Ana. Las dos mujeres llevaron sus cosas personales a un solo cuarto. Cuando ellas ya estaban acomodadas en su nuevo hogar, Mar'a les dijo en qué consist'a su negocio, también les dijo que iba a tomarse unas vacaciones en unos quince d'as para estar en casa. Los niños todos iban al colegio y era necesario que una de ellas estuviera temprano en la casa para preparar el desayuno y la merienda para el colegio, los niños regresaban del colegio en la tarde cuando pasaba el trasporte como a las cinco. Y ella se iba a trabajar después que los niños sal'an para el colegio, y no ten'a hora de llegada. Cuando mar'a completo todas las indicaciones de lo que ellas iban hacer en la casa, ella los invito para que conocieran la casa y a sus hijos. Sus hijos hab'an visto a su mamá llegar junto con dos mujeres, un niño y un perro y algunas cosas. Entonces corrieron a sus cuartos a vestirse apropiadamente. Cuando Mar'a abrió la puerta principal de sus casa sus niños estaban bien vestidos y esperando en la sala. Mar'a presentó a cada uno de ellos a Ana y Anita. Los niños estaban un poco impresionados, no se imaginaron que su mamá traer'a a una familia completa a vivir en el anexo. No solo eso sino que las dos mujeres, estaban embarazadas. Las mujeres eran de tez morena. Ana era una mujer que parec'a ser de la edad de su mamá, y aunque en el rostro se reflejaba la vida dura que estaba llevando, ten'a un cuerpo conservado, llevaba una bata materna vieja que apenas cubr'a medio muslo. Las piernas morenas rivalizaban con las de su mamá, pero parec'a tener un trasero más grande y redondo, sus tetas eran grandes, más que las de su mamá. Anita también era morena y parec'a ser un molde de su madre. Sus rasgos infantiles todav'a se le notaban en el rostro, también llevaba una vieja bata materna que no era más larga que la de su madre. El niño era moreno, y se parec'a a su mamá; Iba vestido con una franela vieja y short y unos zapatos viejos. Después de la presentación Mar'a invito a Ana y Anita para mostrarles todo lo relacionado con el trabajo que ellas iban a desempeñar en la casa, luego ellas fueron a la cocina y prepararon una comida rápida. La tensión que hab'a al principio se desvaneció y Ana y Anita se sintieron bienvenidas en la casa de Mar'a, al rato charlaban y se re'an, como si fueran viejas conocidas. Después de servir la comida a la mesa todos se acomodaron alrededor. Mar'a dio la bienvenida a la nueva familia, y todos procedieron a comer. Mientras com'an Mar'a dijo: "Niños podemos sentirnos seguros con Ana y Anita, yo ya hable con ellas, y juraron silencio. Ellas son tan bizarras como nosotros, as' que nos llevaremos bien. ¿Verdad Ana y Anita?" "Si señora, nosotras somos como una tumba." "Ven niños, porque tanta formalidad, será mejor que a partir de ahora seamos nosotros mismos. Incluso Ana y Anita, tampoco van a ocultarnos nada de sus bizarras perversidades." Todos terminaron la comida, entonces los niños corrieron al cuarto de Juanita y Patty. Media hora después, salieron del cuarto cuatro niñas, vestidas en la misma ropa que llevaban el d'a anterior. Mar'a miro las miradas de asombro de Ana Y Anita y dijo: "Como dije nosotros somos una familia un poco rara." Juanita se acerco donde Mar'a y dijo: "Creo que estas violando el código de esta casa, perra." Mar'a sumisamente se levanto y fue a su cuarto, unos minutos después salió del cuarto desnuda, en tacones y con el collar en su cuello. Las dos mujeres no pod'an creer lo que ve'an, la elegante señora, era una perra. Mar'a se acerco y dijo: En esta casa yo soy la perra de Vigilante, entonces salió de la casa, al rato Mar'a tra'a al perro por la correa, dijo: "Vigilante, le presentó a Ana y Anita" ellas también son unas perras como yo. Ana y Anita sonrieron al perro y le dieron un cariño, pasando la mano por su pelaje. "Mucho gusto Vigilante. Muchacho suertudo, que perra te has encontrado." Todos sonrieron. Mar'a fue detrás de las dos mujeres que aún permanec'an sentadas a la mesa. Entonces se apoyo sobre Anita y le acaricio la oreja con su lengua. La muchacha se giro, y Mar'a le dio un beso húmedo a la muchacha. Después fue donde Ana e hizo el mismo procedimiento. Entonces tomo a Danielito que estaba en el regazo de Ana y lo monto en la mesa. Le dio un piquito en la boca, luego con destreza le bajo el short, desnudando al niño, que no ten'a interior. El chico ya portaba un miembro que era del tamaño del de Pablito. "parece que este muchacho saco la herencia de su padre, mira este palo. Y apenas tiene cuatro años." entonces abrió su boca metiéndose el miembro del niño con todo y bolas, mientras con una mano acariciaba su pequeño trasero. Después de unos minutos de fastidiar al niño. Subió el short a su lugar y bajo al niño de nuevo al regazo de Ana. "Porque ser tan formales Ana, aqu' ya todos nos conocemos." Entonces Mar'a se apoyo de nuevo apretando sus tetas contra la espalda de la mujer, y empezó a desabotonar la bata. "Levántate." Luego que Ana estaba de pie, Mar'a quito la bata maternal de Ana, dejándola en sostenes y pantaletas. Los niños miraban con entusiasmo la perversidad de su madre. Las pantaletas eran blancas y llegaban a la cintura, a los niños le recordó las pantaletas que hab'an visto en la casa de la abuela. Grandes y tapaban de cintura para abajo, cubriendo completamente sus nalgas, eran blancas pero se ve'a un manchón negro que prácticamente iba desde la cintura hasta su coño. Entonces Mar'a soltó el sostén dejando al descubierto unas tetas que prácticamente colgaban hasta la cintura, grandes y redondas. Después Mar'a se agacho y fastidiando a la mujer con sus manos fue quitando las pantaletas hasta que estaban en los tobillos, entonces Ana levanto uno y después otro pie para que Mar'a terminara de quitarlas. El cuerpo de Ana nunca supo lo que era una navaja, sobacos, vientre y coño era un matorral de pelos. Después Mar'a fue donde Anita e hizo lo mismo exponiendo a sus hijos las dos mujeres completamente desnudas. Los niños estaban entusiasmados mirando el cuerpo de Anita que llevaba unos aretes, colgando de sus tetas, que eran tan grandes como las de Mar'a, también ten'a tatuado un corazón en cada teta. En la nalga derecha también ten'a tatuado un pene grande flácido con una leyenda encima que dec'a PAPÁ. En la izquierda un tatuaje que dec'a COGEME y en la altura de la cintura por la espalda otro que dec'a SOY UNA PUTA. Cuando los niños volvieron la atención a ella de nuevo, Mar'a dijo: "Ven ahora si estamos cómodos, ustedes son bienvenidas en nuestra familia. Entonces Mar'a fue al baño y regresó con un paquete de hojillas de afeitar, entonces se lo dio a Ana y Anita para que se afeitaran todo su cuerpo. Fue a la cocina y preparo unas bolsas de mercado, para ellas. Ana tomo las bolsas, mientras Anita recogió sus pertenencia y al niño. Y Mar'a y los niños las despidieron en la puerta. Las dos mujeres regresaron al anexo, desnudas, pavoneándose. Cuando las mujeres hab'an desaparecido de la vista, Mar'a y sus niños regresaron adentro. Mar'a contó todo lo que sab'a de ellas y del espectáculo que ellas hab'an montado en la choza, la primera vez que fue. Después los niños se entregaron a otra org'a como se hab'a hecho costumbre entre ellos, y Mar'a fue por Vigilante y se unió a ellos. Después de unas horas los niños se fueron dejando a Mar'a y a Vigilante enganchados. La alarma despertó a Mar'a en la mañana, entonces salió del cuarto con el perro. En la cocina estaba Anita, preparando el desayuno y la merienda, se escuchaban las voces de sus hijos preparándose para el colegio. Mar'a fue donde Anita y le dio un beso húmedo en la boca, entonces salió con Vigilante a la perrera. Aunque ya a esa hora transitaban muchas personas y carros por la carretera, Mar'a no le importaba nada, le dio el beso que se dan dos amantes cuando se despiden después de una noche de sexo, y regreso a la casa. Ya los niños estaban sentados en la mesa, mientras Anita serv'a el desayuno. Mar'a fue a su cuarto a alistarse para irse al trabajo. Cuando regreso a la cocina ya sus niños estaban esperando el trasporte. La corneta sonó y ellos fueron dando a su mamá el beso cariñoso de cada d'a, y corrieron al autobús. Antes de salir de la casa dio las últimas instrucciones a Anita, y se fue para el trabajo. Los d'as transcurrieron más o menos igual, en la casa de Mar'a, todos entregados al desenfreno y a las perversidades. Incluso Ana, Anita y el pequeño Daniel, comenzaron a participar, Mar'a iba, como era su costumbre los sábados al convento a llevar una contribución, ya ella hab'a cuajado una solida relación con la madre superiora y muchas monjas del convento. Algunas de ellas hab'an participado en el rito aquella noche. Capitulo nueve Ya Mar'a estaba de vacaciones y pasaba todo el d'a en casa con su perro. Una tarde los niños llegaron preocupados. La maestra de Patty hab'a mandado una nota: Señora Mar'a: Buenas tardes señora Mar'a, lamento mucho tener que escribir esta nota, pero las circunstancia me llevaron a esto. Sucede que he notado últimamente un comportamiento indecente en la pequeña Patty. Como por ejemplo diciendo malas palabras a sus compañeros, incluso acostumbra a subirse la falda, que prácticamente expone sus pantaletas. Algunas veces sus compañeras, me dicen que ella las invita al baño hacer cosas, que bueno usted entenderá, me da pena escribir. Yo he tratado de razonar con ella, pero siempre esta reincidiendo lo que me obligo reportar esta conducta al director. Usted tiene una cita, con el director mañana para aclarar el asunto. Atentamente. La maestra. Mar'a leyó la nota, entonces sentó a sus niños en la sala. Ella se sentó en el piso al lado de su amante, entonces dijo: "Cariño que les he dicho como debe ser su comportamiento fuera de la casa. No podemos jugar con fuego. Si ustedes no tienen cuidado, todo esto que estamos haciendo podr'a llegar a la polic'a. Entonces me meter'an a la cárcel, y me quitar'an a ustedes. ¿No queremos eso verdad? Entiendo que a veces es frustrante, cuando una no puede hacer lo que le guste, sin ofender a otras personas. Por eso ustedes tienen que ser muy inteligentes. Sin embargo no hay de qué preocuparse, yo mañana hablo con el director y estoy segura, que él y yo vamos a ser muy buenos amigos. Pero recuerden no siempre vamos a tener la misma suerte. Dejen que yo sea quien lleve las pautas, Okey. Al d'a siguiente Mar'a se puso un vestido sexy, apretado de licra sin pantaletas y sin sostenes para ir al colegio hablar con el director. Ella sab'a que esa no era la forma de vestir cuando se va a un colegio, y menos donde estudian sus hijos, donde se imparten reglas de conducta y decencia. Pero ella quer'a dejar una impresión. De todas maneras no era ningún delito vestir de esa manera en la calle, aunque pareciera una callejera. Cuando ella llego al colegio todos los niños estaban en su salón de clase, a excepción de algunos adolescentes que estudiaban bachillerato y ten'an la hora libre. Ella cruzo el campus de la escuela bajo la mirada de jovencitos, que se la tragaban con la mirada. Mar'a amo el sentimiento y la excito. Llego a una oficina de información y el personal la miraba con extrañeza, pero sin embargo le indicaron donde quedaba la oficina del director. Mar'a toco la puerta, después de unos segundos la puerta se abrió y un hombre de unos cincuenta años, que parec'a un oso estaba frente a ella. El hombre la miro de arriba abajo, entonces ella se presento y le extendió la nota de la maestra. El director la mando a pasar, sin poder apartar la mirada de la escultural figura de Mar'a. El mando a tomar asiento en un sofá que estaba al lado de su escritorio, mientras él se sentó en otro que estaba frente a ella. El sofá era acolchado y cuando Mar'a se sentó era dif'cil mantener una postura decente delante del hombre. El hombre tomo la nota. La leyó: "Lo que tenemos es un asunto muy grave señora Mar'a, su hija está violando las normas de conducta del colegio." "Entiendo señor director. Déjame explicarle" interrumpió Mar'a al director al tiempo que le paso un sobre. "Le ruego que mire el contenido, Yo estoy segura que usted entenderá, mis razones" El director tomo el sobre, y entonces lo abrió. Inmediatamente su rostro se puso rojo como un tomate. Él recordó el d'a que su esposa estaba siendo cogida por un grupo de adolescentes, mientras él se masturbaba. Después que miro las fotograf'as no encontraba palabras. Mar'a agrego: "Ve usted, no hay porque ser tan duro. Mi filosof'a es `haga lo que te dé la gana, siempre que no dañes a tu prójimo. Nosotros también tenemos nuestros secretos'" Mar'a vio el cambio de actitud del hombre, entonces ella se relajo en el mueble extendiendo sus piernas y desplegando a la vista del dirctor su coño, húmedo. "Te excita lo que ve. Porque no hacemos esto más interesante. Mande a llamar a tu esposa y a mis niños." El director abrió el intercomunicador y mando a llamar a su esposa a la oficina. También dio instrucciones que los niños: Juanita, Patty, Pedro y Pablo Hernández, se presentaran en su oficina. Minutos después una secretar'a tocaba en la puerta del director, el abrió y mando a pasar los niños. Los niños estaban asustados cuando entraron, y vieron a su mamá. "Tranquilo cariño, no pasa nada. Yo ya hable con el director y aclaramos todo." Mientras hablaba, sonó la puerta de nuevo y el director fue abrir la puerta. Los niños y Mar'a escucharon cuando la mujer dec'a: "Que diablos está pasando Marcos, estoy en plena clase, y tuve que dejar los jóvenes solos." "Cálmate Laura, pasa que esto es importante." Cuando Laura paso se quedo sorprendida cuando vio tanta gente en la oficina. Inmediatamente reconoció a los niños y supo por intuición que la mujer que estaba sentada con ellos en el sofá era su madre. Mar'a se fijo en la mujer que d'as atrás estaba arrodillada mamando los guevos de unos adolescentes, era una mujer de unos cuarenta años, con abundante cabellera negra largo que ella llevaba suelto, era una mujer alta y un cuerpo bien formado, a pesar de llevar un uniforme de chaqueta y camisa abotonada hasta el cuello y una falda larga que pasaba sus rodillas con un cinturón de cuero ceñido a la cintura, que ocultaba sus encantos, Mar'a supo que ella se preocupaba por mantener su cuerpo. Su tez era blanca y usaba lentes, que le dan un aire de autoridad. El director tomo el sobre que hab'a dejado en el escritorio y se lo dio a Laura. Laura abrió el sobre e inmediatamente su tez y aire de arrogancia cambió. Mar'a supo que los ten'a donde ella quer'a. Dijo: "Como yo le dije a mi amigo Marcos, mi pol'tica es `haz lo que te dé la gana, pero nunca dañes a tu prójimo. Nosotros también tenemos nuestros secretos como familia, y es una regla en la casa que los secretos no se dicen porque si no dejan de serlos. Pero ya basta de decir mierda, todo esto me tiene al borde." Con eso Mar'a abrió sus piernas completamente haciendo que el vestido se recogiera a la altura de su horca. Exponiendo a Laura y a Marcos su coño hinchado y boquiabierto. "Yo sé que a usted le gusta mamar palos de jovencitos, pero porque no prueba el coño jugoso de una mujer madura." Laura estaba vacilando. Mar'a agrego: "Que esperas mujerzuela, agáchate y empieza a comerme." La profesora solo ocultaba su sumisión bajo una fachada de dureza. Cuando Mar'a le ordeno. Ella sumisamente se agacho entre las rodillas de Mar'a y clavo su cara en el coño de Mar'a, en minutos ya hab'a perdido toda la timidez y lengüeteaba el coño como si se tratara de un helado. Mar'a gem'a, pero sin embargo dijo: "Niños porque no se ponen cómodos, y usted Marcos también, disfrute de la tierna carne de mis hijas. Mirón." Los niños empezaron a desnudarse y en minutos todos estaban desnudos. El director no pudo resistir, saco su palo de la cremallera y empezó a manosearlo lentamente mientras no apartaba la mirada de la multitud. Mar'a agrego entre gemidos: "niños pongan cómoda a la profesora y ustedes niñas vayan a darle una mano al director." Los niños se abalanzaron sobre la profesora. Laura apartó la cara del coño de Mar'a y se arrodillo mientras Pablo y Pedrito iban soltando los botones de la chaqueta y la camisa. Cuando estaba desnuda de la cintura para arriba, ella se incorporo, Mar'a y los niños vieron que en las tetas grandes de la mujer colgaban anillos, en el seno derecho se le'a `mámame' y el izquierdo `chúpame'. Entonces los niños se dedicaron a soltar la falda, hasta que esta cayó al piso. La mujer presum'a de un coño tan grande como el de Mar'a, con un cl'toris que sobresal'a, atravesado con un arete y un crucifijo fálico colgando. Después que la mujer estaba desnuda se agacho y empezó a servir a Pablo y Pedro hasta que estos vaciaron su semilla en la boca de la mujer. Mientras Mar'a no dejaba de masturbarse, y miraba el acto, cual mirona. Las niñas estaban entretenidas con el director. Mamando su órgano, por turnos. Hasta que el vacio la carga en la cara de Patty. Mar'a se levantó del sofá y acomodo su vestido indicando a los niños que se vistieran y regresaran a las aulas: "Yo tengo que charlar un poco con el director y la profesora, vayan niños" cuando ellos hab'an salido para sus salones. Mar'a dijo: "Ven no fue nada dif'cil, todo es posible cuando se hacen las cosas inteligentemente. Marcos usted podr'a ver esta escena repetida muchas veces, con otras madres y sus hijos." "Eso es imposible, me meter'a en problemas." "Correcto, pero si usted es observador puede deducir a quien trae. Mira yo conozco cantidad de familias que estoy segura que ellos comparten nuestras perversiones, lo que se necesita es mucha perspicacia. Usted es un hombre inteligente." Entonces alargo otro sobre sobré la mesa. Marcos lo recogió y extendió las fotograf'as, eran fotograf'as del espectáculo que hab'a tenido lugar en casa de Don Tomas. Marcos y Laura empezaron a ver detalladamente las fotos, todos los presentes eran conocidos por ellos, sus hijos estudiaban en la escuela. Mar'a agrego "Quédate con ellas te puede ser de ayuda." A Laura le dijo: "Y usted Laura conozco ese s'mbolo que cargas en tu coño colgando, se lo he visto a cantidades de monjas, en un rito que estuve presente, aunque ellas no me vieron. No sab'a que ellas aceptaban a otros en su culto." "No es as', en la hermandad hay muchas familias, aunque solo aceptan mujeres. Los hombres y los niños solo nos atienden cuando hacemos nuestro ritual en casa. Cuando llegue el momento estoy segura que usted recibirá el llamado." "Pobre de tu esposo, ya tu coño y culo no lo satisface a él verdad." "si es cierto, pero él encuentra la forma de complacerse. Lo mismo sucede con mis hijos. Yo los complazco con mamadas. Es todo lo que ellos pueden recibir." "Bueno mi casa está a la orden, para Marcos y sus dos hijos. En mi casa hay suficientes mujeres que estarán gustosas de complacerlos en lo que quieran, empezando por mis hijos." "Dirá hijas." "No hijos, Pablo y Pedro le gustan los hombres, en mi casa ellos visten como niñas." Mar'a se despidió de sus nuevos amigos, satisfecha que poco a poco más gente se iba uniendo a su c'rculo de perversidad. Capitulo diez Mar'a estaba decidida acelerar un poco las cosas con la madre superiora, por lo que el siguiente sábado le extendió una invitación para que recorriera con ella la hacienda. Sor Teresa se negó al principio, pero por la insistencia de Mar'a ella acepto acompañarla el domingo. Mar'a llego con las nuevas a su casa. Todos ten'an que levantarse temprano, y estar listos para recibir a la monja. Mar'a se levantó temprano y cuando llego al convento, ya Sor Teresa estaba esperando. Mar'a llevo a la madre superiora para que conociera la casa. Cuando llegaron todos estaban en el porche de la casa esperando. Sor teresa saludo a los niños de Mar'a con el cariño que siempre reflejaba. Entonces Mar'a le presentó a Ana Y Anita, los nuevos miembros de la familia. Después que se tomaron un refrigerio, las dos mujeres salieron a recorrer la granja. Salieron a la carretera de nuevo y viajaron unos cinco minutos hasta que llegaron a un desvió de tierra. Luego avanzaron unos trescientos metros hasta que llegaron a un pequeño caser'o, Mar'a le explico a Sor Teresa que all' viv'an las familias y los trabajadores de la granja, su esposo hab'a construido estas casitas para albergar familias extranjeras que sal'an huyendo de su pa's y no ten'an adonde ir. Mientras iban pasando el caser'o, a las puertas de las casas o del lugar donde se encontraran, las personas iban saludando a su patrona. Luego que pasaron el caser'o rodaron unos 200 metros, hasta un corral, donde hab'a unas veinte reses, entre vacas, toros y becerros. Ellas se bajaron y Mar'a le explico a la Madre superiora que: las vacas aportaban la leche para las familias de la granja. En cambio los toros eran vendidos al matadero, a excepción de unos tres que ella hab'a comprado de un lote que llego del extranjero. Mar'a hecho una mirada alrededor y dijo: "Mira allá hay uno, los demás deben estar en el potrero." "Vamos hasta allá quiero verlo de cerca." Dijo Sor Teresa. Las mujeres caminaron a lo largo del corral. Mar'a noto que cuando ella ve'a un toro, hac'a una especie de reverencia, y su mirada iba la barriga del toro. Cuando llegaron al lugar, Sor Teresa dijo: "esta es una de las razas más grandes de vacunos que hay, aunque hay otra raza que es todav'a más grande." El toro media unos dos metros, hasta los lomos y ten'a una joroba, que era casi medio metro de altura. El toro estaba apartado, en un corral aparte junto con una vaca que parec'a ser de la misma raza. "Como pensé," agrego la monja "hay una vaca en celo y el toro esta all' para engendrarla." De la vaina del toro colgaba un órgano negro de aproximadamente un metro de largo y unos cinco cent'metros de grueso. Mar'a dijo: "menos mal que las vacas, no son como nosotras las mujeres, que lo primero que vemos es el bulto entre las piernas." "Las cosas no son como parecen." Sor teresa replicó. "yo estoy segura que aun hay medio metro de su miembro que aun no ha desplegado." "Si pero no es demasiado delgado para el tamaño de ese miembro." "Ese es uno de los misterios infinitos de la creación. Los toros no son como los humanos. Quiero decir ellos depositan su semen directamente en el útero de la vaca, por eso es as' de largo. Cuando el toro monta la vaca y tiene su miembro dentro de la vagina, despliega todo su tamaño, pero se encuentra con un útero cerrado, entonces él bombea, pero el útero hace resistencia y el pene se encoge formando una especie de resorte, expandiendo el túnel de la vagina. El toro se mantiene bombeando, hasta que logra el efecto deseado y el útero cede entonces el miembro atraviesa el útero en toda su extensión y deposita su carga en la vaca, sin perder nada. Por eso es que el dicho `los caminos de Dios son infinitos' son muy ciertos" Mar'a estaba impresionada del conocimiento de Sor Teresa en el acto de procreación de los toros. Después de explicarle otras cosas sobre el miembro del toro, ellas salieron de nuevo al camino. Mar'a la invito unos cien metros más adelante, hasta que llegaron a tres corrales, donde estaban aparte, Burros y Burras con sus burritos, caballos y yeguas con sus potrancos, mulos y mulas. De nuevo como si se tratara de un protestante predicando la palabra, con furor, sor Teresa dijo: "El tamaño del miembro del burro depende mucho de su corpulencia. Por ejemplo" señalando a un burro corpulento "este de aqu' debe tener su miembro unas tres veces más grande y más largo que aquel." Señalando a un burro que se ve'a enclenque, pero que era de la misma altura. Su función es muy parecida al de los hombres, montan la burra y cuando llega el momento sueltan su semen en la vagina, los espermatozoides se encargan del resto." De repente se escucho el relinchar de un caballo. Y Sor Teresa agrego: "Apuesto que ese es un semental, que está tratando de montar una yegua." "¿Qué diferencia hay entre semental y caballo?" pregunto Mar'a, que estaba muy impresionada por el conocimiento de aquella mujer. "Es lo mismo. Pero la diferencia es su miembro. Un caballo normal tiene un pene parecido al del burro. Pero el de un semental es un poco diferente. Si nos apuramos tal vez usted misma pueda ver la diferencia." Las dos mujeres alargaron el paso hasta donde hab'a un caballo grande, tan grande como el toro y casi as' de corpulento, su crin era negra y espesa, se balanceaba como la cabellera de una mujer cuando sacud'a su cabeza. El pene del caballo era rosado y estaba colgando de su barriga y era como de un metro de largo. Pero como de unos quince cent'metros de grueso. La cabeza parec'a una coliflor y era como de unos veinte cent'metros de grueso. Sor Teresa dijo: "Esto es lo que yo llamo un semental. Alto y corpulento, además que es una belleza. Mire su pene, a diferencia de los caballos el del semental termina como una campana. Parece una coliflor." "No parece como muy grande para esa yegua." "No cariño, las vaginas son incre'blemente elásticas, además el propósito de la campana es porque el túnel de la yegua es ancho, y él pene necesita crear un efecto como sucede cuando una tiene una jeringa en la mano y tapa el extremo, uno no puede sacar el pistón. Algo parecido a lo que hace un perro." "Que suertuda es esa yegua." "Si cariño muy suertuda" replico Sor Teresa con un sentimiento de envidia. "La gente dice que el tamaño no importa, pero yo nunca he podido entender. A mi parece que esa frase la invento uno que ten'a un miembro muy pequeño." "Yo pienso lo mismo." "Madre, puedo confesarle algo. Aunque me da mucha pena." "Hija yo soy una religiosa, y nuestros votos implican recibir confecciones y ofrecer ayuda a las almas angustiadas." "Yo amaba a mi esposo con toda mi alma, y tuve cuatro hijos con él, pero la verdad nunca quede satisfecha cuando él me hac'a el amor. Su pene era muy pequeño, y después que el vaciaba su semilla, yo ten'a que masturbarme." "Cariño ese es un problema que han tenido que soportar muchas mujeres. ¿Pero dime no has considerado tener otra pareja?" "La tengo, y es lo mejor que me ha podido pasar." "Ve por eso siempre digo, Dios es el único que sabe porque suceden las cosas. Y como es este hombre, me refiero a su miembro." "No es un hombre, es mi perro. ¿Usted cree que estoy actuando mal?" Mar'a soltó la bomba, y miró fijamente a sor Teresa para ver que ademán hac'a. "No cariño, si usted decidió que su amante sea un perro, está bien a los ojos de dios." "¿Pero no es pecado?" dijo Mar'a solo para ver que le respond'a. "¿Qué es pecado, y que no lo es? Ese es el gran dilema. Yo estoy segura que el pecado es una especie de penitencia que los humanos inventaron, para probarse a s' mismo. ¿No se ha dado cuenta usted cariño que todas las cosas que más deseamos son considerados pecados? Son las sociedades las que han impuesto sus propias reglas, y los poderosos han decido que está bien o mal, de acuerdo a la conveniencia. Yo te voy a contar algo porque tú has abierto tu alma a m'. En los d'as antiguos cuando existió el sagrado templo de Salomón, se adoraban a otros dioses, pero al final era el mismo dios. As' como hoy las personas adoran a santos a quien le tienen devoción, y le hacen ritos, pero a la final todo mundo sabe que la adoración es para el único dios del universo. Como dije en el templo que Dios le hab'a dicho al rey Salomón que construyera para que la nación de Israel lo adorara, hab'a un 'dolo al lado del mismo sant'simo, al que los creyentes lo llamaban el dios Tauro. Era la representación de un hombre de unos dos metros y medio de altura con cabeza de toro, en señal desafiante con un miembro monstruoso, completamente erecto. Se dec'a que era el dios patrón de los animales. También hab'a una orden de mujeres que viv'an en el templo a las que llamaban las prostitutas del templo, que eran las sacerdotisas y adoraban al dios Tauro. Hab'a d'as dedicados a la adoración de Tauro, donde ven'an devotos de todas partes, al templo a traer ofrendas. Las ofrendas eran animales, que eran bendecidos por las sacerdotisas en nombre del dios Tauro. El d'a de la bendición los animales eran tra'dos al templo por cada devoto y las sacerdotisas ten'an sexo con cada animal. As' era como este animal era dedicado a Tauro. Luego la devota ten'a sexo con el animal también. A partir de ese momento esa devota era bautizada, y pasaba a formar parte de la congregación. Cuando los representantes de los otros dioses vieron que cada d'a se sumaban más miembros a la congregación empezaron hacer una campaña de descredito, hasta que prohibieron la adoración al dios Tauro. Desde entonces al dios Tauro lo pintan como el diablo, por eso es que usted ve que el diablo tiene cuerno y una mirada feroz, como si fuera un toro rabioso. Sin embargo la hermandad se mantiene en proscripción hasta el d'a de hoy." "¿Y usted conoce alguien que pertenece a esa hermandad?" "Miles cariño. Yo misma pertenezco a esa hermandad. Nuestro convento está dedicado al dios Tauro, es uno de los miles que hay por el mundo." "¿La iglesia sabe?" "si por supuesto, de hecho nosotras tenemos una representante en el vaticano, sin embargo estamos obligadas, a mantener la orden en secreto." "¿Cómo funciona hoy?" "Las cosas no han cambiado, el ritual se mantiene, pero en secreto. Las festividades al dios Tauro son durante los carnavales y es cuando los iniciados se bautizan como hermanas." La madre superiora miro alrededor y entonces se agacho y tomo la falda, y la llevo hasta su barriga. Dijo. "Esto nos identifica como hermanas." Mar'a se quedo admirando por un rato el coño de la Madre superiora. Las labias sobresal'an colgando como una mariposa. Ella maquillaba su coño como si fuera un rostro. El cl'toris parec'a un pequeño pene, y lo atravesaba una argolla de unos cinco cent'metros de diámetro y medio de espesor, de la argolla el crucifijo fálico que era tan grande como su coño. Justo encima del coño ten'a un tatuaje que se le'a PUTA. Mar'a preguntó sin apartar la mirada del coño: "¿Que significa el crucifijo?" "hasta el tiempo del señor Jesucristo, nuestro s'mbolo segu'a siendo una réplica del dios tauro del templo. Pero cuando la iglesia asumió el control de la hermandad, se cristianizo el culto y el toro fue reemplazado por un crucifijo. Algo parecido como pasó con la navidad. Antes del cristianismo durante la época de navidad se adoraba al sol naciente, pero después se cambio el s'mbolo pagano del sol por la de un niño en un pesebre. Muy conveniente verdad. As' que a nosotras se nos cambio el Toro por una cruz fálica." Después de eso Sor Teresa soltó su falda de nuevo y las dos mujeres se fijaron de nuevo en el semental y la yegua, mientras semental empujaba su palo dentro de la yegua, Mar'a dijo: "¿Un semental te ha montado?" "Varias veces, es uno de mis favoritos, yo amo el tamaño. Y este es uno de los que mejor se ajusta. Aunque mi favorito es el Toro. Es como una experiencia celestial. El útero de nosotras es como la de las vacas, ofrece resistencia, entonces ese palo se enrolla y estoy segura que mi coño se expande más que el de la yegua. Pero lo mejor es cuando estoy teniendo el orgasmo y el útero cede, y toda esa vara va directo a mi útero haciéndome chillar de dolor y placer, siempre me orino y algunas veces me he cagado. Pero esa es la experiencia más hermosa que he sentido." "Yo también he sentido una experiencia parecida pero es debido a un elixir que tengo en la casa. Este elixir me trasforma completamente convirtiéndome en una especie de diosa del sexo, mis ojos se hacen más vivos y mis labios se pone voluptuosos. Mis tetas crecen de tamaño y mis pezones se ponen duros como dos penes erectos de unos diez cent'metros de largo, casi al instante tengo que orinar y cagar. Mi coño florece y mis labias parecen una flor abierta, del grueso de un cambur, mi coño se abre y empiezo a chorrear, como si tuviera incontinencia. Mi culo se relaja y aflora creando un anillo de unos dos cent'metros de espesor. Me pongo completamente sensible y el más simple roce de algo con mi culo, coño o pezones me hace gritar de placer. Mi coño y culo me pica y pica hasta que no me meto algo grande, entonces me calmo. Eso ha sido lo más rico que he sentido en mi vida. Pero no lo he usado más, porque no puedo tener el más m'nimo roce con mi culo, coño o pezones, parece que mi mente se nubla y lo único que puedo pensar es en sexo. Lo del coño y el culo no es tanto problema porque uso falda sin pantaletas, pero mi problema son los pezones, que no puedo usar sostén." "He o'do hablar de ese elixir, es de la india, es un afrodisiaco potente, que fue hallado en un templo dedicado a la diosa del sexo y abandonado durante la invasión de los ingleses en el siglo XVIII. Unos antropólogos hallaron este elixir hace unas décadas y desde entonces un laboratorio lo ha estado comercializando. Yo he le'do que la persona que lo usa constantemente se convierte en un objeto sexual y sus órganos sexuales se van deformando, haciendo a la mujer más apetecible. También supe que el asunto de los pezones tiene remedio. Lo único que tiene que hacer es empujar el pezón duro contra la teta, como si fuera un tapón en una botella y este se esconde. Pero cuando la mujer esta excitada, ellos florecen de nuevo. Yo siempre he querido usarlo, porque me han contado cosas maravillosas de él, pero nunca he tenido la oportunidad de tenerlo en mis manos." "Si usted quiere, hoy podr'a ser ese d'a, vamos a la casa, y por mis hijos y Ana y Anita no se preocupe. Ellos saben todo, y me han visto usarlo. Nosotros hicimos un juramento, que no habr'a secretos entre nosotros y que cada uno podr'a ser lo que quiera ser. Ana Y Anita son dos putas que yo contrate y viven en mi casa. Porque desde que mis hijos supieron que soy una perra, me hicieron jurar que ten'a que comportarme como una perra. Por lo que en mi casa yo no hago otra cosa que complacer a mi perro." "Eso es lo que yo llamo una familia bendecida por el señor, completamente sincera. Te felicito por tener una familia como la tuya. Bueno si usted quiere vamos, quiero probar ese elixir." Mar'a interrumpió: "A quien te gustar'a tener, al toro o al semental, para vivir esa experiencia." Sor Teresa respondió sin tapujos. "Al toro, él es mi dios y señor." Las dos mujeres dejaron la conversación y fueron a la camioneta, después se dirigieron a la casa del capataz. Era la primera vez que ella trataba con el nuevo capataz. Era un hombre negro grande y corpulento de unos treinta años. Su esposa apenas alcanzaba los veinte, y ten'a un bebe en brazos. Era un hombre amable. Mar'a le dijo que necesitaba que le llevaran ya a la casa al toro que estaba montando la vaca, porque ella estaba pensando en hacer negocio, y el cliente no tardar'a en llegar. El hombre sin chistar nada fue inmediatamente por el jeep y la carrucha para cargar animales. Entonces con la ayuda de otros obreros en pocos minutos ten'an al toro listo para partir. Mar'a arranco y el jeep con el toro lo siguió. Cuando llegaron a la casa. Mar'a ordeno que lo amarraran en un poste de madera que fue enterrado para amarrar animales entre los árboles que estaban la lado del anexo. Los niños y las mujeres hab'an salido cuando oyeron el escándalo que se formo con los perros y el toro. Ellos estaban al lado de Mar'a y Sor Teresa mientras amarraban al toro. Juanita dijo, "porque trajeron ese toro." "Es una sorpresa cariño que te va gustar." Después Mar'a vio como ella trataba de explicarles a sus hermanos, que ten'an la misma inquietud. Después que el toro estaba en su sitio y los hombres y el jeep hab'an salido a la carretera todos fueron a la casa. Mientras Anita y Ana preparaban la mesa para servir la comida, y Sor teresa conversaba con los chicos, Mar'a se disculpó y fue a su cuarto. Al rato salió completamente desnuda con su collar y tacones. Los muchachos no pod'an creer lo que estaban viendo, las miradas iban desde su madre hasta la madre superiora. Mar'a se acercó y dijo: "Les presento a Sor Puta Teresa." Sor Teresa se levanto del asiento e hizo una reverencia. Mar'a agrego: "Muévanse mujerzuelas. Ya basta de estar violando el código" los niños se levantaron de sus asientos. Y fueron a sus cuartos. Mar'a le hab'a comprado ropa a cada uno para ocasiones especiales, como las de hoy. Eran vestidos ajustados de licra, con tacones y pantaletas corte francés. Las niñas fueron las primeras en salir. Después salieron los niños también con sus vestidos, y tacones de cinco cent'metros de alto, ellos hab'an aprendido a maquillarse y acomodarse el cabello para hacerlo femenino, después vinieron y se sentaron a la mesa, donde ya estaban Mar'a y Sor Teresa, después que Ana y Anita hab'an terminado de servir la pasta con salsa y tajadas que hab'an preparado, ellas también se acomodaron alrededor de la mesa, con Danielito como siempre en el regazo de la abuela. Después que Sor Teresa bendijo el alimento, Mar'a dijo: "para hoy tenemos un lindo espectáculo, que nos va brindar la Madre Superiora. Pero a m' se me ocurre que desde ahora podr'amos comenzar el show, Ana usted recuerda el acto que me presentaron el d'a que fui a su casa. Vamos háganlo ahora para esta audiencia. "Señora pero la única comida es la que hay en la mesa." Mar'a dijo dirigiéndose a la audiencia: "¿Levanten la mano los que quieren el show?" Todos la levantaron "Pero hay un inconveniente, el show es con la comida y la única que hay es la que tenemos. Repito ¿levanten la mano los que quieren el show?" Todos levantaron la mano. "Bueno Ana no hay más que decir. Empiecen" Ana y Anita fueron al espacio que hab'a entre el comedor y la cocina. Entonces se quitaron sus batas maternales. Ellas se hab'an afeitado completamente y sus coños estaban a la vista completamente. En su estado de gravidez, los coños se estiran deformándose, haciéndolas más provocativas. Luego se empezaron a besar como amantes, acariciándose mutuamente por todas partes. Después Ana desnudo al pequeño Danielito y empezó a mamar su pequeño pene, Anita se hab'a agachado a su lado e hizo lo mismo. Mar'a se levantó de su asiento llevándose el plato de comida de ella y se paro al lado de ellas que aún estaban entretenidas con el pene del infante. Mar'a vacio la pasta sobre sus cuerpo, y luego lo restregó por todo su cuerpo, retirándose, entonces repitió el procedimiento con los platos de Ana y Anita. Los demás entendieron el mensaje e hicieron lo mismo. Cuando hab'an vaciado la pasta en el cuerpo de las dos mujeres, ellas estaban en el piso bañándose en una piscina de pasta. Todos se hab'an acomodado alrededor de las dos mujeres y el niño, sentados en las sillas del comedor. Mar'a estaba apoyada en la orilla del asiento masturbándose. Al rato las pantaletas de los niños también hab'an volado. Sor Teresa también ten'a su mano bajo la falda del hábito. Media hora después las dos mujeres ten'an pasta en sus culos y coños. Una hora después estaban jadeando de placer, en el suelo bañadas en pasta, de los pies a cabeza, con la pasta regada por todas partes. Mar'a entonces fue donde Ana y metió su mano en el culo de Ana Y saco una manotada de pasta con mierda. Entonces se la llevo a su boca y comió todo lamiéndose los dedos, luego repitió el procedimiento una y otra vez hasta que ya no sacaba mas pasta del culo de Ana. Entonces fue a su coño y extrajo una gran cantidad de pasta que llenaba su mano lo paso a la otra mano y repitió el procedimiento hasta que ten'a las dos manos full. Se levanto, fue donde Sor Teresa, se arrodillo y dijo: "Para m' ser'a un gran honor si usted madre se digna de comer de mi mano." Alargando la mano a la boca de la madre superiora. Sor teresa comió con abandono hasta que la mano quedo limpia y luego lamio. Entonces Mar'a repitió el procedimiento. Cuando la madre hab'a terminado de comer su alimento. Mar'a acerco su boca a la de ella y le dio un beso de amantes. Hizo lo mismo con sus hijos hasta que las dos mujeres hab'an quedado completamente libres de pasta. Para terminar fue donde Anita y le pidió que cagara la pasta que ten'a en su culo. Anita se acurruco y pujo dejando una plasta de pasta y mierda. Mar'a se agacho y empezó a comer directamente del piso, hasta que no hab'a más. Después que el espectáculo de Ana y Anita hab'a terminado Mar'a aplaudió exigiendo la atención del público. Después que ten'a la atención, mando a Juanita a buscar el elixir de la vitrina. Juanita corrió y en un momento estaba con el frasco entregándoselo a su mamá. Después mando a Patty por un vaso y la leche. Patty rápidamente trajo el vaso y la leche. Entonces llamo a Pablito Y Pedrito para que estuvieran frente a ella. Cuando estaban frente a ella, se agacho y levanto el vestido hasta la cintura de cada muchacho y empezó a mamar sus guevos, hasta que ellos vertieron su cum en el vaso. "Caramba niñas, ustedes estaban cargados."Dijo mar'a mientras miraba que el semen de los dos jovencitos llenaba medio vaso. Después destapo el elixir y vertió una copa, y lo termino de llenar con leche. Después que ten'a el vaso lleno. Volvió a aplaudir y mostrando el vaso a todos pidió a la Madre Superiora que tuviera el honor, la madre superiora se levanto de su asiento y se acercó. Entonces Mar'a se agacho y tomo el dobladillo de la falda y la fue recogiendo en sus manos hasta la cintura, exponiendo a los presentes el coño en forma de mariposa y el crucifijo a los presentes. Después Mar'a pidió a Sor Teresa que levantara sus brazos y terminó de quitar el hábito. La Madre Superiora quedo completamente desnuda a excepción del velo que cubr'a su cabeza. Justo como hab'an visto en el video, ella ten'a argollas atravesando sus pezones con crucifijos en cada teta. Lo que no hab'an visto los niños eran los tatuajes que ten'a en el coño y sus tetas. PUTA sobre el coño, y en cada teta hab'an pintados penes que iban de los pezones hasta el pie de la teta. Mar'a mientras tanto estaba admirando las vulgaridades que ten'a escrita en sus nalgas. Parec'a una plana. Sus dos grandes nalgas estaban cubiertas de palabras, las más vulgares que alguien pod'a imaginarse. En la espalda hab'a dibujos de animales con sus miembros colgando. Después de admirarlos ella dio la vuelta a la Madre Superiora, y los niños inmediatamente saltaron de sus asientos, manoseando las nalgas de la vulgar mujer y leyendo todo lo que dec'a, como una cartilla de groser'as. Cuando los niños hab'an satisfecho su curiosidad. Mar'a volvió de nuevo a tocar sus palmas, los muchachos se sentaron, mientras Ana y Anita aún permanec'an sentadas encima del piso lleno de pasta. Con Danielito en el regazo de la abuela. Entonces Mar'a tomo el vaso lleno y lo dio a la Madre Superiora. Sor Teresa tomo el vaso y bebió su contenido. Segundos después ella empezó a sentir un calor por todo su cuerpo, y como si hubiese tomado un alucinógeno, su mente se nublo y su coño tomo el control. Momentos después un hilo de orines empezó a bajar por sus piernas y luego un chorro que mojo a las mujeres y al niño que estaban en el piso. Sor Teresa solo atino a decir. "No aguanto," cuando un chorro de mierda bajo por sus piernas al piso y luego una plasta cayo, salpicando de nuevo a Ana y Anita. Todos ve'an cómo las labias del coño se inflaban como si fuera un balón, hasta que parec'an cambures alrededor del coño, dejándolo boquiabierto justo como hab'a sucedido con su madre. El culo también floreció como si su recto quisiera salirse. Los pezones empezaron a crecer, hasta que alcanzaron unos diez cent'metros de largo. Pero parec'an más gruesos que los de su madre. Sus labios se hincharon y sus ojos se brotaron. La madre superiora empezó a gritar, mientras se estrujaba duro su coño con una mano y con la otra su culo. Dec'a: "No aguanto, oh ¡S'!, mierda que rico. Quiero algo grande en mi coño. Oh méteme algo en mi culo. Oh no aguanto. Vamos perra. Méteme algo en el culo, que no aguanto. Mientras apuntaba su culo a Mar'a, y ella estrujaba su coño con todas sus fuerzas. Mar'a se arrodillo, poniendo sus rodillas en la plasta de mierda que la madre superiora hab'a dejado en el piso, enfrentando su culo. Entonces ella alargo su mano y empezó a meterla en el culo de la mujer hasta que el largo del brazo desapareció casi hasta el sobaco. Sor teresa empezó a menear su culo en el brazo de mar'a ya bombear, adelante y atrás tan rápido como pod'a. Mar'a entendió el mensaje y ella comenzó a sacar y meter el brazo lleno de mierda, en el culo de la mujer tan rápido como pod'a. "Oh si, dame más duro perra, si vamos. Quiero algo más grueso. Vamos perra dame algo más grueso." Mar'a metió el otro brazo con la misma facilidad que el primero, los dos brazos llegaban casi a los sobacos, luego empezó a menear los dos brazos en el culo mantecoso de la mujer. Sor Teresa gem'a y vociferada vulgaridades a Mar'a, mientras meneaba su culo en los brazos. "No aguanto mi coño, quiero algo en mi coño." Mar'a dijo a Patty: "Cariño traiga la botella de vidrio de dos litros que está en el gabinete." Patty fue al gabinete donde guardaban los refrescos y cargo una botella de unos 40 cent'metros de largo y unos 20 de diámetro. Mar'a saco sus manos llenas de mierda de la mujer, dejando un boquete de culo de unos quince cent'metros. "Porque saca tus brazos puta, mételos de nuevo, quiero algo en el culo, quiero algo en mi coño." Gem'a casi llorando Sor Teresa. Mar'a dijo. "Quiere algo grande en tu culo. Aqu' va esto." Con eso ella empujo en el culo la botella, con algo de esfuerzo, mientras la madre suspiraba de alivio, hasta que la botella quedo adentro, dejando el culo de la madre superiora con un boquete de unos quince cent'metros de diámetro. La mujer segu'a pidiendo algo par su coño. Mar'a le dijo: "Si usted quiere algo en el coño, usted sabe donde conseguirlo." La madre superiora, recordó al toro y empezó a correr al patio, por el camino que hab'a recorrido más temprano. Los demás corrieron detrás de ella. Cuando la mujer llego donde el toro, este zapateaba, pero a ella no le importaba, el toro hab'a sido atado con el cabestro corto, lo que no le permit'a moverse. Sor teresa se metió debajo de la barriga del toro olvidándose de la piquiña en su coño. Ella comenzó desenfrenadamente a acariciar su miembro y bolas, mientras chupaba y lamia su vaina y trozo de palo que iba saliendo. Minutos después el palo del toro era como de metro y medio justo como hab'a dicho que ser'a. Ella tomo la vara entre sus manos, entonces se incorporo, se dio media vuelta y bajo su cabeza, mientras se abr'a completamente. Mirando por debajo de su coño ella posiciono la punta en la entrada y se echo hacia atrás permitiendo que medio metro de guevo la penetrara. El toro empezó a empujar hasta que la punta toco el útero y el guevo se enrollo como un espiral de casi treinta cent'metros de diámetro. Mar'a, sus hijos, Ana y Anita. Vieron como el coño de sor teresa se abr'a en un boquete. La mujer sintió un alivio. Cuando se sintió llena, en el culo y coño. Pero el toro empezó a bombear con golpes duros que hac'an a Sor Teresa gritar de placer y dolor, mientras era empujada hacia adelante con cada golpe. Ella afinco sus pies duro contra la tierra y sus manos en las patas delanteras del toro. El toro bombeo y bombeo, enviándole un chorro de placer a la madre superiora con cada golpe. Cuando ella ya no aguantaba más, su útero cedió y el siguiente empujón del toro, abrió la compuerta y las bolas del toro chocaron contra las nalgas de la mujer. Un "¡Ohhhh MIERDA!" Se escucho seguido del grito, de Sor Teresa. Cuando el palo hab'a entrado en el útero llenándolo de semen y arremolinándose en esa cavidad. El toro quedo inmóvil, pero la mujer cayó al piso, tirándose boca abajo a lo largo en la tierra. El pene del toro se bamboleo en el aire por unos instantes hasta que desapareció de nuevo en la vaina. Mar'a sintió un poco de temor y se acerco, entonces tomo a Sor Teresa por un brazo y la ayudo a salir de debajo del toro e incorporase. Cuando la mujer se levanto, un chorro de su propio cum que parec'a leche corr'a por sus muslos. Mientras el coño parec'a más hinchado y completamente boquiabierto. Sor Teresa se incorporo con ojos soñadores, y mar'a la retiro a un lado, entonces se agacho y golpeo un poco las piernas de la madre superiora para que las abriera. Sor Teresa abrió las piernas como un metro, aún en un estado catatónico. Mar'a metió su brazo pasando el anillo del útero que aun estaba dilatado. La madre superiora empezó a gemir de placer de nuevo. Mar'a metió su brazo todo lo que pudo hasta que su hombro quedo adentro. La mano tocaba el chorro de cum que parec'a un pozo y empezó a restregarlo las paredes del útero. Mientras Sor Teresa se retorc'a de placer y machucaba su coño contra la nuca de Mar'a. Mar'a grito: "Anita anda a tu casa y traes el cucharon, y un bol. Apúrate puta" Anita corrió y momentos después estaba de vuelta con un bol de plástico y el cucharon. Mar'a saco su brazo, haciendo suspirar de alivio a la mujer, tomo el cucharon y volvió a meter el cucharon con todo y brazo de nuevo. Mar'a recogió cum de toro en el cucharon y lo retiro con cuidado. Todas las miradas estaban atentas, cuando el cucharón estaba rebosado de una sustancia trasparente, de apariencia blancuzca. Repitió el procedimiento varias veces, mientras sor teresa no dejaba de gemir de placer, hasta que casi no sal'a nada. El bol lleno hasta la mitad, más o menos litro y medio de cum de toro. Mar'a se incorporo y dio a sor teresa el bol. Diciendo: "Aqu' está el elixir de tu dios. Pocas putas tienen este privilegio." La madre superiora tomo el bol en las dos manos y haciendo una reverencia al toro empezó a tomar su cum sin descansar hasta quedar vacio. Entonces devolvió el bol a Mar'a y empezó a lamerse los labios. Como si eso fuera lo más rico que se hab'a tomado en toda su vida. Hab'a trascurrido unas dos horas desde que la madre superiora hab'a salido de la casa corriendo, y la noche ya estaba cayendo. Cuando regresaron a la casa, Mar'a saco la botella de vidrio, dejando un boquete de 20 cent'metros de diámetro. La madre superiora estaba agotada, y cayó al piso e inmediatamente quedo dormida. Mar'a llamó al convento para informar que la Madre Superiora estaba tomando una siesta por la caminata del d'a y que probablemente se quedar'a en su casa. Capitulo once A partir de aquel d'a Mar'a visitaba más a menudo el convento. Se hab'a hecho adicta a la perversión y no pensaba en otra cosa. Ahora estaba en una encrucijada y ten'a que tomar una decisión. Dentro de poco los niños saldr'an de vacaciones, y además la econom'a hab'a mejorado. Ella se dispuso a cancelar todas las deudas de la granja. Y abrió una cuenta bancar'a a nombre de sus hijos, para donde ir'an las ganancias de la venta. El dinero que ella ten'a lo traspaso a otro banco. Con parte del dinero abrió una cuenta para Ana y su hija y nietos, para que vivieran cómodamente por un tiempo. Después esperó que sus hijos salieran de vacaciones, y sus abuelos vinieron por ellos, como era costumbre. Cuando supo que era el momento, ella escribió una nota anónima que fue enviada a casa de sus padres, donde se reportaba la desaparición de Mar'a. La polic'a hizo una búsqueda pero nunca la hallaron. Los padres y hermanos de Mar'a con el tiempo aceptaron la perdida. Sus hijos también aunque ellos sospechaban donde podr'a estar, pero no dijeron nada. El t'o y su esposa, que aún viv'a con sus padres asumieron la administración de la granja. Ana y Anita y los hijos de ambas regresaron a su pa's, con el dinero que Mar'a les hab'a dado abrieron un burdel. Mar'a se hab'a convertido en una hermana de la hermandad y viv'a en el convento. El elixir hindú se convirtió en parte de la dieta de todas las hermanas. Fin