Code: mm mc 1st oral (in Spanish)


Disclaimer: Sorry guys but I happened to write this in Spanish.
Este texto es pura ficcion y fruto de mi pervertidos pensamientos. 
Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.  Si tu cabeza te
lleva a intentar llevar a cabo alguna de las cosas aqui descritas, pide

ayuda de un experto (o buscate una vida :D).

   Dicho esto, disfrutad del viaje!

   **TRAVESURAS**

   Capitulo 1: Aula de castigo.

   Marcos iba de camino al colegio sin demasiadas ganas.  Aunque puedan
parecer faciles, para un chico de 13 años una clase es una clase, y nadie
le quita el aburrimiento a Historia, Naturales o Mates.

   - Ey!  Marcos, tio!  Quita esa cara de empanao!  Que aun te veo la marca
de las sabanas!

   El que gritaba mientras le echaba el brazo por la espalda era su colega
y mejor amigo Nico.  Los dos eran el azote de la clase.  No habia profesor
que no rerdara sus nombres, y es que alla donde iban, la liaban.

   No es que fueran malos chicos, claro, pero cuando se tienen tanta
energia dentro parece que no hay mas remedio que dejarla salir.  Y Nico
siempre sabia como hacerlo.

   - Ey Nico!  Uf, que toston, tio!  Quiero volver a mi casa!  Pero dime,
por que tienes esa cara de primo?  Y esa sonrisita?

   - Que pasa, no me puedo alegrar de tener mates?

   - Jaja eso ni en tus pesadillas, colega!

   - Tienes razon!  Como me conoces!

   - Larga por esa boquita, que yo tambien quiero reirme un rato.

   Asi que el muchacho moreno le explico el plan que se le habia ocurrido
cuando le despues que su padre le hubiera hecho pasar por la ferreteria a
hacer unos recados.

   Dos horas despues estaban sentados en el despacho del director
aguantando un sermon de agarrate y no te menees por haber enganchado al
profesor de matematicas a la silla.  El pobre habia tenido que salir con la
silla a cuestas, y pedir que le cortasen el trozo que le mantenia sujeto.
Los calzoncillos de ositos no ayudaron a callar las carcajadas de sus
alumnos.

   - ...  Bueno chicos.  Habeis conseguido lo imposible.  No nos quedan mas
ideas.  Os hemos castigado, expulsado, hablado con vuestros padres, hecho
pagar los destrozos ...  Ya no sabemos que hacer!

   Mientras seguian con su entrenada expresion de consternacion, Nico
chocaba la mano de Marcos bajo la mesa por lo grande de sus logros.

   - ...  Asi que nos hemos visto obligados a pedir la ayuda de un experto.
Dr.  Litztain, si es usted tan amable...

   Para sorpresa de los dos, un hombre de aspecto casi comico, con unas
gruesas gafas de culo de botella y ropas de persona mayor entro torpe e
inseguro por la puerta, con unas cuantas carpetas en la mano.  La autoridad
que imponia ese hombre no era mayor que la de un ejercito de caracoles
borrachos.

   << A este nos lo merendamos en dos dias >>

   Y asi fue como al dia siguiente empezaban la primera sesion despues de
clases.  Por lo visto, lo unico que tenian que hacer era escuchar las
charlas del tal doctor durante un par de horas y luego ya eran libres.

   << Pues vaya castigo!  jaja >>

   Pero, aunque normalmente hubieran revolucionado la clase en cuestion de
minutos, por alguna razon, no habia manera de que sus neuronas dieran con
ningun tipo de plan diabolico.  Nada.  Ni el mas minimo asomo de una
trastada que les ayudase a deshacerse del tipo extraño aquel.

   Tendria algo que ver esa extraña musica que ponia siempre el bicho raro
durante sus sermones?  O era el tono de voz tan pesado y repetitivo que les
dejaba medio alelados?

   Fuese como fuese, durante las noches de aquella primera semana, Marcos
tenia unos sueños rarisimos.

   Estaba con su amigo Nico, los dos en el aula despues de clases, pero
todo el mundo se habia ido.  Y aunque era invierno, hacia muchisimo calor.
Mucho!  Y Nico No paraba de dar la lata con que le molestaba el sudor.

   << Tio, no puedo mas, yo me quito la camiseta!>>

   A Marcos le parecio una idiotez, pero mientras su amigo se liberaba de
su parte de arriba, no parecia poder quitarle ojo.  La mirada seguia las
manos de Nico mientras el sudor caia por su cuerpo.

   Siempre se habia reido de el porque aunque fuesen mil veces a la playa,
nunca conseguia ponerse moreno.  Pero en ese momento, habia algo especial
en esa palidez que se le hacia incontrolablemente irresistible.  Como no se
habia dado cuenta?  Ese color hacia que su cuerpo, moldeado tras los
ultimos años entrenando en el equipo de futbol del colegio, destacase aun
mas sus musculos.

   Acorto la distancia que les separaba para ver el efecto mas de cerca,
pero por el camino algo le paralizo:

   <<Bah!  Que va que va.  Esto no ayuda.  Tio, te importa si me quito los
pantalones?>>

   Aunque le parecio una pregunta muy rara, su cabeza le dio permiso con
prisas y todo.  Eran ahora las piernas de su mejor amigo las que aparecian
en escena.  Y aunque ya las habia visto muchisimas veces ya, sabia que esta
vez era totalmente diferente.  Algo crecia en su interior...  Y no era solo
el tamaño de su paquete.

   << Me vas a dejar solo en esto, colega?  Anda quitate la ropa tambien,
que parezco idiota >>

   Y antes de que pudiera procesar el mensaje, las manos de Nico ya habian
entrado en accion.  Primero le quito las zapatillas, Marcos bajo la
cremallera y su compañero termino por bajarle los pantalones.  Marcos, rojo
como un tomate, se deshacia de su camiseta, que estaba enganchosa de tanto
calor.

   << Pero que tenemos aqui!  Alguien esta contentillo, eh?  jaja >>

   La verguenza hizo que Marcos cogiera de nuevo sus pantalones, pero antes
de que pudiera subirlos, la mano de Nico se lo impidio.  De hecho, esa
misma mano estaba ahora mismo agarrando su pene a traves del tejido del
calzoncillo, mientras la otra manoseaba el culo de su rubio compañero de
trastadas.

   No entendia que estaba pasando, ni estaba seguro de que fuera correcto.
Su mejor amigo le estaba metiendo mano??

   Pero se sentia muy bien.  Mejor que nunca, y aunque parte de su cabeza
le decia "para" el cuerpo parecia responder por si solo.

   << Asi me gusta.  Deja que yo me encargue.  No se como no me habia dado
cuenta, tio, pero me pones a cien!>>

   La boca de Nico pellizcaba el rabo de su amigo a traves del tejido. 
Marcos gemia al por la estimulacion.  No tenia mucha idea de que hacer,
solo habia visto cosas asi en alguna revista que su padre guardaba detras
del armario.  Indeciso, paso las manos temblorosas por la nuca de su amigo
y empezo a jugar con su pelo.

   Nico le miro con esos increibles ojos verdes de los que tantas chicas de
la clase se habian prendado, y con una sonrisita maliciosa le bajo los
calzoncillos para dar libertad a ese pequeño montruito que se sacudia entre
las piernas de Marcos.

   <<Creeme, nunca he hecho esto, pero tengo unas ganas locas de comertela
entera, tio>>

   El airecillo que corria por su entrepierna le habia hecho estremecer,
pero no fue nada comparado a la sensacion humeda de la lengua de Nico
acariciando los rincones de su pene.  Eran siete centimetros, lo contaba
cada mes a escondidas para ver si habian crecido, y parecian encajar a la
perfeccion con la boca de su mejor amigo.

   El ritmo pausado de las sacudidas, los besos, y la mano izquierda
jugando con sus testiculos le llevaban al extasis.

   Ninguno de los dos decia nada y lo unico que se oia en el aula eran las
sacudidas del pequeño cuerpo del rubio sobre su amigo, y los jadeos de
placer, que cada vez eran mas intensos.

   En pocos segundos, sus caderas se le movian solas, cada vez mas fuerte,
y Nico aceleraba el ritmo, la intensidad y el placer.

   La mano de su amigo paso entonces a la zona jamas explorada, su trasero,
y sintio que llegaba a su vez a la cumbre.

   Sin poder aguantar mas, estallo de placer.  Nico se aparto para que esos
seis disparos fueran directos a parar a su cara, y movido por el frenesi,
Marcos lamio todos los restos hasta fundirse en un sensual e inexperto beso
con esa lengua que le habia dado tanto gusto por alla abajo.

   Los ojos azules de Marcos se cruzaban entonces con los verdes de Nico y
un suspiro lo acababa todo.

   Despertaba despues en su cama aterrado, confundido y con el pijama
completamente manchado.  Habia sido un sueño?

   *to be continued